Introducción
Los Límites de la
Racionalidad
La razón es un hotel al borde de
un abismo
Shopenhauer
Cuando escribimos los límites de la racionalidad usamos la
palabra límite en su acepción latina de limes, esa
franja de tierra que separaba el imperio romano del exterior
bárbaro, limes de lo racional y lo irracional, de lo
civilizado y de lo bárbaro. De esta forma lo diferenciamos del
límite (Grenze) como frontera, como cul de sac. Como
límite del conocimiento (Kant) o límite del mundo o el
lenguaje (Wittgenstein) (Trías, 1991: 15-16).
Nuestra idea de límite coincide con la de Eugenio
Trías en cuanto a territorio para ser cultivado, espacio capaz
de ser explorado, más que borde infranqueable, navaja de
Occman o criterio demarcacionista popperiano.
Lo que queremos remarcar en este estudio es la
consideración de la racionalidad como el tramado o la
constelación de diferentes sistemas, dimensiones o
teorías. En este sentido vamos a concebir la racionalidad como
la siempre inacabada resultante de la interacción de
diferentes nociones de racionalidad o de múltiples
racionalidades. Así enfatizamos la idea principal que hemos
querido destacar en este estudio, es decir, que la racionalidad no
puede ser completamente descrita, entendida o explicada, por medio de
un solo modelo, teoría o metáfora.
De esta forma podemos decir que hemos limitado a la racionalidad a
un territorio fértil de interacciones, a una noción
amplia y con el menor número de restricciones que podamos
mantener sin perder un sentido mínimo de racionalidad. Esto lo
resumimos en el concepto de constelación racional, donde el
término «constelación», lo utilizamos en el
sentido dado por Benjamin-Adorno-Bernstein, como una
yuxtaposición más bien que un conglomerado integrado de
elementos cambiantes que resisten la reducción a un
común denominador, corazón esencial, o primer principio
generativo. (Bernstein, 1991: 201)
Las constelaciones siempre han sido inspiradoras de la
mitología astral y han servido de espejo al hombre para
especular sobre sí mismo. En el mundo simbólico chino
la constelación es el tercer elemento fundamental de la
interpretación, siendo los dos primeros principios
fundamentales, el yang, o principio activo, y el ying, el principo
pasivo. La constelación representa el conjunto de las
relaciones y lazos que pueden existir entre todas las relaciones y
entre todos los mundos.
En este sentido el término constelación asemeja una
hermenéutica oriental del universo. Y quizás nuestro
concepto de constelación también participa de este
afán humano, de humanidad, en cierta forma sinónimo de
racionalidad.
Presentamos una panorámica de la noción de
racionalidad desde la racionalidad científica, cuasiparadigma
de la racionalidad, Capítulo 1, hasta la racionalidad
ética y moral (capítulo 3), pasando por la racionalidad
práctica de la acción (Capítulo 2). Estamos
conscientes de haber desarrollado el tema más en amplitud que
en profundidad, pero nuestro objetivo ha sido dar una vista general
de la complejidad de la constelación racional. La misma
estructuración de los capítulos de esta obra es tan
sólo una de las posibilidades de sortear la complejidad
inherente a la racionalidad humana.
Hoy en día cuando el modelo de razón ilustrada ha
sido cuestionado por el postmodernismo, aunque creemos que el
postmodernismo es mirar el futuro desde el pasado, desde un
modernismo estático, paralizado ante la dificultad de encerrar
el porvenir; se hace necesario revisar la noción de
racionalidad.
El ataque a la razón ilustrada y al modernismo ha sido
realizado con las propias armas de la razón ilustrada. Tanto
el deconstruccionismo como el reconstruccionismo, lo que
podríamos llamar las dos tendencias que polarizan la
visión filosófica actual son producto del modernismo.
No es asunto tan fácil como asesinar a la razón, es una
cuestión de redimensionar o redefinir la razón a la luz
de la constelación racional.
Hablar de la racionalidad, como nosotros pretendemos en esta
monografía, es limitar este concepto a la posibilidad humana,
al territorio de lo humano. En cierta forma podemos considerar que
los límites de la racionalidad es el territorio de nuestra
condición humana. Debemos aceptar con humildad que somos
pequeños seres en un gran universo en expansión, un
pequeño paréntesis de orden en el ineluctable viaje
hacia el caos.
Para Shopenhauer la razón moderna era un hotel al borde del
abismo y quizás sea menester alquilar un cuarto en ese hotel
de Hilbert, para aproximar algunas vistas a ese abismo de la realidad
donde pretendemos reflejar la racionalidad humana.
Capítulo 1: La Constelación Racional