La introducción de dichos elementos en los mercados Europeos condujo a una moda que a comienzos del siglo XIX colocó la chinchilla lanígera como uno de los animales más apreciados del mundo desde el punto peletero. Por consecuencia, a fines del siglo, desde Vallenar y Coquimbo salieron al Viejo Mundo cuatrocientos ochenta y cuatro mil pieles anuales y el bello roedor entró en peligro de extinción. El hábitat regional del animalito
se inicia en Choapa, por el sur, y cruza toda nuestra región hasta
Atacama y más al norte.
Así se llegó a centrar afanes en Auco, poblado cercano a Illapel donde la topografía, los regímenes de temperatura, existencia de vertientes y las áreas humanas, no provocan peligro para su desarrollo. Los especialistas han precisado que dentro
de un hábitat de veinte mil hectáreas en alrededor de mil
hay colonización de chinchillas que actualmente están confiados
al manejo de una reserva nacional. El sitio puede ser visitado viajando
desde Illapel. En Auco CONAF mantiene un sitio de hospedaje de excelente
cali-dad, sus horarios de atención es de Jueves a Domingo de 08.30
a18.00 Hrs., cancelando $ 1.500 los adultos y $ 500 los niños.
Este Parque se encuentra
ubicado a 110 Kms., al Sureste de La Serena. Su horario de atención
es de Jueves a Domingo y Festivos, pudiéndose ingresar desde las
08.30 a 16.30 Hrs., con un margen de retirada a las 18.00 Hrs., aproximadamente.
Cancelando $ 1.500 los adultos y $ 500 los niños. Sitio de Camping
por la noche $ 6.000. La observación se hace más intensa cuando logra saber que allí subsiste un bosque relicto cuya antigüedad queda asociada a la era del cuaternario antiguo y su vegetación es una muestra de lo que copó la costa central chilena en el Pleistoceno. He aquí un retorno de milenios sin necesidad de naves computarizadas ni fantasmagóricos personajes de otras galaxias. Y el encuentro con alrededor de 54 variedades de plantas que sólo es posible reubicar desde Valdivia a Magallanes. Los especialistas adelantan teorías. La más común es que durante las migraciones del tiempo glacial la flora Magallánica impulsó al norte la flora Valdiviana y ésta llegó hasta Coquimbo, donde, el fenómeno de nubosidad y humedad creada en el área costera, se mantuvo, creando lo que hoy es un santuario vegetal o, si se quiere, un escenario natural donde creció la vida mucho antes de la aparición del Homo Sapiens. El nombre del lugar está vinculado
a las tradiciones de la capital del antiguo corregimiento. En ella se levantaba el templo de San Francisco sin proveerse que no había madera de la extensión y grosor que requerían vigas y porta-ones. Entonces, un lego llamado Jorge, de origen inglés, dijo haber soñado que en cierto lugar había material, desde donde efectivamente se transportó para la fábrica del monumento. Las visitas a Fray Jorge se hacen bajo control de CONAF.
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