Confundida dentro de un silo, paseo en círculos. El sol finalmente me deja,
pero la noche entra acompañada del frío desértico.
Paseo en círculos esperando y con cada paso entierro los granos abandonados,
fluorescentes gracias a la abundante luz de luna.
La naturaleza toma su curso, los brotes de las plantas fluorescentes abren surcos en la tierra-arena.
Los brotes envuelven mi cuerpo, remolinos inversos me levantan.
No se como llegue aquí, los silos no tiene puertas. Mi último deseo fue estar sola.
Pero ahora miles de pequeñas hojas siguen alzándome metros y mas metros.
Al borde del silo, las ramas se detienen, sólo el silo las mantienen vivas.
Veo el desierto a lo lejos y hacia abajo, muy abajo.
Siento como las hojas que atan mis pies pierden la suavidad. Se hacen solidas y frías, tan frías que parecen hielo.
Son de hielo. Veinte metros suspendida en el vacío.
Pido mi último deseo: No quiero que llegue el día, no quiero que se avive el desierto. No quiero estar sola.
Las vidas paralelas continúan© Elena Montejo 1997
Sin razón de ser
Continúan escondidas en diferentes madriguera, calladasRetorciendo el cuerpo, termina el día
Mi última oportunidad
Bebiendo la sangre termina el mesSúplica ante el cielo
¡Lluvia que nos limpie!
Ceremonia que nos perdone, que nos impida crecer en monstruocidadEl error ya cometido, empapado de realidad
¿dónde quedo la fantasía?
Me muerde lo mundano
¿de dónde saco sangre para alimentarte?No llegó la lluvia
No encontramos el lugar sagrado de donde brota el perdón
Así terminó el resto de tú vida
Así terminó el resto de mí vidaÚltimo recurso
Dios, acércate por favorLas vidas perpendiculares continúan
Búsquedas sin formas
Hallazgos sin sentido
Noviembre terminó abruptamente
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