POEMAS DE LA SOMBRA DE UN AYER
- INVIERNO
- LA
LUNA OCULTA
INVIERNO
De seda negra es la tela
que cuelga de la ventana,
las gotas del rocío
cristalizan al amanecer.
Los rayos de luz son fríos
refugios del invierno,
que concede a la lluvia
la gracia del mañana.
Mientras tanto, nubes blancas
esperan con impaciencia
la renuncia del silencio.
Mientras tanto, teje su hilo invisible
la sutil araña, referencia clave
de la luna negra.
Es difícil encender la llama
a través de la ventana;
la araña no cede su seda
y el silencio hace un vacío
que consume la brasa.
Los rayos de luz son fríos...
Prefiero cielos de luna estrellada.
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La Luna Oculta
Ayer despedí a la luna
Y a la espesa niebla,
Ayer miré a las estrellas...
Y no distinguí ninguna.
Ayer me quise ocultar bajo su reflejo,
Quise ahogarme en la laguna
Para apagar mis llamas...
Lágrimas ardientes de mil destellos,
Lágrimas ardientes de mis deseos.
Ayer subí hasta la luna, ayer elevé
Mi corazón para ocultarlo en su estela,
Quería creer que divisaba la llegada
De una estrella y tras la luna me asomé...
Ayer, al asomarme, quise ver otra cosa.
Ayer, al asomarme, quise ocultar la verdad,
Apoyarme en la blanca luna...
Cuando mi mundo es azul, yo quise verlo de
rosa.
Ayer fue ayer y pasado,
Ayer se aclaró el firmamento.
Ayer no distinguí estrellas en el cielo,
Pero todo lo vi claro.
Y las estrellas se hicieron colores
Y aquellos colores eran Ella,
No la blanca Luna de Seda,
Sino mi amiga hija de flores
Azules, de flores corazones.
Hoy no es ayer ni mañana.
Hoy mi cielo está nublado,
Aunque tras las nubes brilla,
Y es de noche... noche de madrugada.
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