![]() Con una personalidad especial, característica de las Hermandades Post-Conciliares, va propagando por medio mundo a todos los rocieros, se encuentren donde se encuentren, que en ella tienen su propia Hermandad. Huelva se vuelca con Emigrantes, y en sus calles y sus plazas bullen de alegría al paso de sus carretas. La seriedad y la pulcritud de sus acciones son admirados por todo el que se siente devoto de la Blanca Paloma. La llegada al Santuario cada año va calando más entre la multitud que presencia su presentación ante la Reina de las Marismas. Huelva a hecho suyo esta Hermandad que nació entre emigrantes en Alemania y ha acogido a todos los rocieros onubenses que han llamado a sus puertas. Hoy, la Hermandad de Emigrantes de Huelva, sigue enarbolando la bandera rociera, y sus hermanos la mantienen en alza, floreciendo entre ellos el espíritu de unidad y devoción. Las dos Hermandades de Huelva comparten devoción, religiosidad y, sobre todo, espíritu de fraternidad por la que es Reina, Pastora y Madre. |
La Hermandad de Emigrantes comienza su peregrinar el miércoles. La Misa de Romeros tiene lugar a las ocho de la mañana en la Plaza de los Dolores y marca el inicio del recorrido por la ciudad, entre la alegría generalizada y los ¡vivas! a las Blanca Paloma. En la capital, la caravana tiene sus paradas más significativas en la Comandancia de la Guardia Civil, donde se realiza una ofrenda floral; en el número 42 de la calle del Puerto, casa de un hermano; en el colegio Reyes Católicos, donde se realiza una nueva ofrenda floral con salve cantada; en la calle Manuel Sánchez, lugar donde recibe a la Hermandad la familia de Don José Carrión Brioso, un hermano tristemente desaparecido; en la calle Blanca Paloma, tránsito emotivo pues en esa vía ha pernoctado algunos años el Simpecado de la Hermandad; el recibimiento en la Iglesia del Rocío por parte de la Junta de Gobierno de la Hermandad de Huelva; La Diputación Provincial, con nueva entrega floral; el Ayuntamiento, lugar en donde la despide la Corporación Municipal encabezada por el alcalde que es amenizada por la banda municipal y el coro rociero de la Hermandad; Gobierno Civil y Comandancia de Marina donde se llega aproximadamente a la una y media de la tarde y se canta una Salve marinera. Se recogen entonces las insignias, se aligera la carroza del Simpecado y se toma la avenida Francisco Montenegro hasta La Rábida, lugar tradicionalmente elegido para realizar la reparadora parada del almuerzo y dar descanso y agua a las bestias. Nuevamente en ruta, la comitiva enfila la carretera de Mazagón y entre el kilometro 16 y 17 entra en la vía de arena, conectando con el camino de Moguer hasta las Tres Rayas. Allí , entre pinares y eucaliptos, tiene lugar la parada nocturna donde se producen escenas de sana convivencia romera. Al día siguiente se comienza con la tradicional Misa de Romeros, suponiendo esto el inicio de una nueva jornada de camino por la carretera de Bodegones, que lleva a la Corporación hasta Gato, donde se almuerza. Los corazones late agitados, pues el Santuario de la Blanca Paloma está cerca. La llegada de Emigrantes al Rocío será al anochecer. Normalmente, antes de entrar en la Casa hermandad, los carros, caballistas y remolques pasan por delante para esperar a que la carroza del Simpecado entre dentro de su ermita, acto que se realiza entre vivas y, oraciones y felicitaciones al hermano mayor, y los presentes agradecen a la Reina de las Marismas que el camino haya transcurrido sin novedad. |