Reflexión # 3
PLANIFICACIÓN Y POLÍTICA EMPRESARIAL
Profesora: Linda Tiberi
Actividad de equipo. Reflexión # 3.
Por Enrico Borelli;
Javier Chirino, José García y Alfonso Peñaranda..
En un estudio realizado a un grupo de trabajadores latinoamericanos,
un número cada vez mayor tienen la opinión sobre sí mismos que
trabajan más de lo debido, están mal pagados y simplemente fastidiados con la
forma en que sus patrones los tratan. Tienen que trabajar
más horas por menos sueldo. Y la
seguridad del puesto de la que gozaban hace apenas 10 ó 15 años parece
como un recuerdo lejano. El lugar del trabajo que solía ser el de “una
gran familia feliz” ahora es el escenario de trabajadores fatigados por la
tensión y que temen perder su empleo. Como un ejemplo están empresas como IBM,
que tenía una política de no despedir a nadie, a fines de los ochenta ha
descartado esa política y ha despedido a cientos de miles de empleados.
A fin de disminuir costos y mejorar la productividad, la mayoría de las
principales corporaciones ha instituido despidos masivos en una magnitud que no
se había visto desde la gran depresión de 1930. Uno de cada cinco empleados
teme hoy perder su trabajo. Para mejorar la competitividad, las empresas piden
a aquellos empleados que sobreviven a los despidos que trabajen más horas y,
frecuentemente, con menos sueldo del que tenían antes. El resultado es una
fuerza de trabajo cansada y agotada.
Por si fuera poco, es cada vez más
frecuente que los patrones reemplacen a los trabajadores despedidos por
empleados de medio tiempo, porque estos últimos dan a la administración mayor
flexibilidad y, a menudo, cuestan mucho
menos. Hoy en día, uno de cada cuatro trabajadores es temporal.
Los despidos, las presiones para lograr
mayor productividad y el reemplazo de trabajadores permanentes con personal
temporal están socavando la lealtad de los empleados. Por ejemplo, solo uno de
cuatro empleados dice hoy que está comprometido con su organización. Puesto que
los patrones han demostrado con sus acciones que los empleados son desechables,
los empleados están respondiendo con una acusada disminución de la lealtad para
con sus patrones.
El nuevo clima en el lugar de trabajo es
altamente amenazador para la gente. Cuando se les pregunta a los empleados qué
es importante para ellos, factores como un mejor ambiente de trabajo, trabajos
flexibles y comprensión de sus jefes están cerca de los primeros lugares de la
lista. Pero son exactamente estos factores los que se están socavando en muchas
organizaciones a medida que la administración trata de incrementar la
productividad bajo estas condiciones.
PREGUNTAS:
1. Compare el ambiente competitivo que
enfrentaron las principales corporaciones en los años sesenta con el ambiente
en los noventa?
Respuesta: La situación de los
negocios tanto en Venezuela como a nivel Mundial ha dado un vuelco diametral en
la competitividad presente en los años setenta y anteriores con respecto a los
noventa y el siglo XXI.
Anteriormente se podría decir que
no existía la competencia real a ningún nivel. Las corporaciones observaban su
negocio muy al mercado doméstico donde contaban con fieles compradores y
confiaban su crecimiento en el mercado interno basado en la lealtad a la Marca
y al nacionalismo. Por otro lado, muchas de estas Corporaciones se encontraban
en situaciones de monopolio evidente por lo que no presentaban interés por la
innovación y la competitividad de precios.
Esta situación también enmarcaba
las condiciones laborales de los trabajadores, donde las empresas eran
manejadas como grandes familias sin importar la preparación o rendimiento de
dichos trabajadores, al no requerirse altos estándares de productividad por
contar con mercados asegurados. Otro factor influyente en este trato, era que
las empresas normalmente pertenecían a sus fundadores o sus descendientes y
esto generaba cultura y políticas organizacionales muy arraigas a los conceptos
de ética y moral de las mencionadas familias generalmente muy interesadas en el
bienestar de todos los integrantes de la corporación.
A la llegada de los noventa, con
una creciente ansias de poder de los ahora múltiples propietarios de las corporaciones, producto de las compras
y fusiones, así como de la economía de mercado, donde lo importante es el
rendimiento de la inversión, se puede decir que la competitividad se ha hecho
vital para la simple existencia corporativa.
Los capitalistas solo desean ver crecer sus ganancias y los Gerentes de
las empresas para poder garantizar la atracción de dichos capitales se han
visto en la necesidad de ser cada vez productivos. A aparte de esto, la
liberación de los mercados, lo que implica la caída de los monopolios, colocan
en juego, para la repartición de la
“torta”, no solo a los “enemigos” locales si no también a los foráneos que en
muchas oportunidades se presentan con ventajas promovidas por sus gobiernos
para favorecer el crecimiento interno de la nación en competencia.
En conclusión, las ventajas
competitivas de los setenta se sustentaban en leyes proteccionistas, ambientes
monopólicos, lealtad a marca, nacionalismo, etc. En los noventa, la ventajas
competitivas se basan en, el costo principalmente, la calidad de los bienes y
servicios, la innovación, las alianzas estratégicas, y el capital humano.
2. Contraste la forma en que
estos cambios en el ambiente están afectando a los empleados?
Respuesta: En una situación de
negocios de poca competitividad, tal como la que se mencionó, a pesar de la
existencia de aparente seguridad laboral y de culturas organizacionales muy
familiares, no se propiciaba la productividad, el alto rendimiento, la
capacitación y crecimiento profesional, etc. La discriminación se presentaba mas por los valores personales, religiosos, sexo, raza,
etc., que por preparación y conocimientos.
A pesar de esto, los que
disfrutaban de un empelo se encontraban altamente motivados desde el punto de
vista personal por sentirse dentro de grandes familias donde todos eran iguales
y su vida fuera de la empresa era como una continuación de la que llevaba
dentro de esta.
En los noventa, la situación
cambió. La competitividad no es solo a nivel de las
empresas, sino también a nivel de los empleados. Quien subsiste y quien logra
el éxito? Solo los más capacitados.
Lamentablemente, la misma
política de las empresas de poca atención a sus empleados y de buscar solo los mas rentables, las han llevado a ser victimas de “mercenarios”
que solo les interesa su propio bien sin ningún tipo de apego a la
organización. Es decir, las empresas y trabajadores mantienen relaciones
mientras se sean útiles mutuamente y de esto, normalmente el perjudicado
termina siendo los consumidores finales. Por ejemplo, cuando recibimos el
servicio de cualquier empresa, se nota
la diferencia cuando proviene de empleados con sentimientos de pertenecía hacia
esta empresa a cuando proviene de personal
“outsourcing”.
Por otro lado, esta situación
genera alta rotación de personal, y disminución de productividad por falta de
identificación con la labor realizada por considerarla temporal. También afecta
la estabilidad emocional de los trabajadores por no sentirse seguros ni ahora
ni en su futuro, por que nadie garantiza ni siquiera protección social para la
vejez (sobre todo en los países subdesarrollados). La motivación en este caso
es solo el dinero.
3. Pueden las grandes compañías
ser competitivas y, al mismo tiempo, crear un lugar de trabajo que proporcione
seguridad a los empleados? ¿Y crear profunda lealtad
del empleado?
Respuesta: Hoy en día muchas de
las grandes empresas se han comenzado a darse cuenta de que la teoría del “outsourcing”, no está dando los resultados que se esperaba
y por esos están volviendo, en parte, al concepto tradicional de manejo de
personal con bajos índices de rotación, pero con hincapié en la importancia de
la capacitación de este personal para hacerlo altamente productivo. De esta
manera podemos llegar a la conclusión de que si se puede ser una empresa
competitiva asegurando un puesto de
trabajo estable a sus empleados y también garantizándoles múltiples
satisfacciones, tanto económicas como personales, de manera de ganarse su Lealtad.
El capital humano está siendo
considerado, en las Organizaciones de Clase Mundial, como el más valioso de sus
recursos y así está comenzando a tratarlo. Máquinas ultra modernas pero sin la
iniciativa y motivación del personal que las maneja, no serán lo suficientemente
eficientes tal como se espera que sean. Lo mismo sucederá con la administración
en general de la Organización. En otras palabras, se requiere un sentido de
pertenencia para dar lo mejor de sí.
Cómo puede ser una Empresa
competitiva con empleados leales y motivados? Una
manera sería:
Creando Líderes dentro de los
diferentes sistemas de la Organización de manera que lograr cambios en la
cultura interna de la misma, dirigiéndola hacia la compenetración de los equipos de trabajo para una correcta
planificación operativa y estratégica que permita la búsqueda de la Solución de
Problemas y Toma de Decisiones concretos con la identificación de todos los
integrantes de los mencionados equipos.
También se logra,
hallando/formando a las personas correctas. Buscando los perfiles mas
apropiados para la integración de los equipos y para el cumplimiento de las
actividades encomendadas. Buscando balance humano/técnico. Buscando personas
preparadas y equilibradas, con altos valores éticos, con alto poder en
organización, experiencia y credibilidad, con liderazgo y habilidades
gerenciales. Creando Confianza, tanto grupal como individual. Con eventos de
participación de grupos propiciando la unificación y el aporte de ideas.
Desarrollando metas en común. Presentando propuestas interesante en términos
intelectuales. Presentando propuestas interesante en términos de crecimiento
personal. Con ética propia. Con respeto a sus empleados. Con una excelente
comunicación, etc.