La celebración del 1º de Mayo
en Canarias viene enmarcada en una situación de estancamiento del
sindicalismo canario provocado por la alineación de un sector dirigente
con la política de CC. Esta posición es un activo que Ican
ha puesto sobre la mesa en sus forcejeos con otros sectores de CC, siguiendo
la estrategia de las dos patas en el sindicalismo: en CCOO con los que
tienen incrustados en el aparato; en Intersindical con los militantes que
tienen y el apoyo de los allegados y la inexistencia de una oposición
real, en el sentido de que sea capaz de presentarse como alternativa al
oficialismo.
Y esta "sintonía" lleva a la alienación
de que una organización de clase apoye la política de la
burguesía, que no tiene la mínima intención de defender
las reivindicaciones de un marco canario de relaciones laborales, por ejemplo.
Sobre todo cuando cuenta con la complicidad de CCOO y UGT, grandes beneficiarios
del sindicalismo subvencionado con cuentas poco claras y una amplia burocracia
que mantener.
Las condiciones para crecer se dan, pero no
en el rumbo que marca la actual dirección de Intersindical,
no en la emulación del sindicalismo español, sino en la profundización
de las señas de identidad del sindicalismo de clase y nacionalista
canario, en el fortalecimiento ideológico y organizativo de las
federaciones, esto es, en el cumplimiento de los acuerdos congresuales:
formación de afiliados y cuadros, un asamblearismo efectivo,
el mismo lenguaje en todo el País...........
Mantener a toda costa la independencia de los
centros de poder, un discurso coherente, la democratización de la
vida organizativa que permita la coexistencia de corrientes, y una ética
que identifique y diferencie del sindicalismo de trepadores o los hereditarios.
Tener muy claro que en Canarias el sindicalismo nacionalista y el español
son antagónicos y uno crece a costa del otro.
Y evitar las situaciones de cooptación
(llamadas candidaturas unitarias), que han cercenado el debate interno,
en los futuros congresos. Con la fuerza que tengamos, tenemos que hacer
oir nuestra voz en el sindicalismo. Acabar con la costumbre que hace abandonar
si estamos en minoría. Así podremos incorporar a compañeros
que se han cansado de que se predique y se hagan cosas distintas, y que
otros tomen la decisión de desvincularse organizativamente.
Esta tarea, la que se presenta a la izquierda
sindical nacionalista, no va a ser fácil. Pero este 1º de Mayo
no debe pasar como uno más de tantos. Como pueblo y como trabajadores
nos jugamos mucho.Como nacionalistas de izquierda tenemos que avanzar organizativa
y cualitativamente en todas las organizaciones sociopolíticas, pués
está en juego nuestra nuestra propia identidad como pueblo, y hay
que luchar contra la prolongación de la situación de dependencia
en un marco neocolonial disfrazado de globalización que se está
dibujando con la colaboración, una vez más, de nuestras queridas
burguesías de cada peña.
Hoy mas que nunca el futuro está en
nuestras manos.
Por los derechos nacionales y sociales
de Canarias,
Canarias libre y socialista.
Porque solo nosotros, como pueblo, somos los sujetos de nuestra liberación,
¡ORGANÍZATE Y LUCHA!