Los imperios creados con la antigua aventura colonial empiezan a llegar paulatinamente a su fin. La alarma que se dispara en las metrópolis del poder económico, reconociendo el despertar de las maltratadas masas de trabajadores, tras agotar los desagües de sus males - entiéndase Provincias Periféricas - impulsa a la creación de nuevas formas de colonialismo que abran los límites de mercados: las descargas de parados.
El asentamiento de nuevas multinacionales y empresas foráneas favorecido por los beneficios fiscales que ofrecen nuevas iniciativas, como la Zona Especial Canaria (ZEC), repercutirá directamente sobre el pequeño comerciante canario. Pero la mayor repercusión la notaremos a medio plazo, por que con la nueva inversión extranjera llegará otra nueva invasión de trabajadores de fuera acaparando puestos de trabajo y creando sus micro colonias, y actuando cual legítimos colonialistas volverán a interrumpir el estilo de vida tradicional, como Europa a hecho en estas maltratadas tierras durante tanto tiempo.
Aumentará la destrucción de los valores culturales. Los Canarios nos veremos reducidos a un porcentaje menor de habitantes. No se tendrá en cuenta la densidad de población (200p.p.Km cuadrado) muy superior a la media española (80p.p.Km c.) lo que afectará directamente, junto con las nuevas conversiones inmobiliarias, a nuestro deshecho medio ambiente. Conseguiremos aumentar la carga de contaminación atmosférica como jamás alguien pensara que se pudiera hacer en unas islitas como estas, y ya no podremos achacarle culpa alguna a una refinería que transforma más crudo que ninguna de las españolas ("nuestra industria más productiva"), serán muchos más habitantes; muchos más coches, muchas más microondas saturando nuestro espacio vital, etc.
Todo ello gracias a la gestión oficial de nuestros políticos de turno, que no podían haber pedido ayudas fiscales para la profesionalización de la mano de obra sin formación, que son el único excedente canario, sino que prefieren incentivar la inversión extrajera o, como se dice por ahí, vender Canarias.
En las enciclopedias españolas se dice que "El proceso por el cual los individuos o los grupos quedan absorbidos y adoptan la cultura dominante se denomina asimilación"(1). Nosotros lo llamamos, como se ha llamado siempre: colonialismo cultural, que ya arrasó antiguamente pueblos enteros subyugándolos hasta diluirse y desaparecer, empobreciendo el panorama cultural de la humanidad, y cuyo mayor causante siempre fue el ímpetu imperialista de los inversionistas con que colaboraron los estados fácticos que comprenden el conocido como "primer mundo". Y lo que también sabemos es que, si bien antiguamente esta acción era parte de un plan global para despersonalizar a los pueblos conquistados, hoy es solamente un efecto, causa del colonialismo financiero que intentan imponer los grandes poderes, por encima de esa España que nos ha llevado a la actual situación.
Pero... no es su guerra: es la nuestra, Canarios.
Pedro González.
(1) Aculturación: Enciclopedia Microsoft Encarta
98. 1993-1997 (Actualizada a Diciembre 1998)