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Era en abril o discusión sobre la legalización del aborto

Búho Terco

 “Tengo derecho a gozar de tu cuerpo, puede decirme quienquiera,

 y ese derecho lo ejerceré sin que ningún límite

 me detenga en el capricho de las exacciones

que me venga en gana saciar en él”

El Marqués de Sade

           En estos últimos tiempos, en virtud de las declaraciones del actual Ministro de Salud de la Nación Dr. Ginés García, se originó un nuevo debate sobre un tema que genera distintas posturas  en sectores de la sociedad Argentina y que invita a una reflexión seria por parte de todos nosotros: El aborto... 

            Muchas son las cuestiones que se plantean de acuerdo al sector ideológico del que se trate, lo que nos parece ineludible y que comúnmente no figura en la agenda de discusión de quienes polarizan el debate en un “sí” o un “no” son cuestiones como las siguientes: 

a)      Educación sexual: Mal que les pese a muchos, la Educación sexual es sumamente importante a la hora de poder hacer un ejercicio libre de la sexualidad. ¿Por qué utilizar el término libre y no otro?. Porque no se es libre a partir del desconocimiento, y el conocimiento es fundamental para tomar una decisión responsable. Luego, cada quien actuará en función de sus creencias y convicciones.

Cuando una chica de 12, 13, o más años queda embarazada entre otras cuestiones podemos decir que es por ignorancia, y se la desprotege si el Estado no garantiza que progresivamente y acorde a cada una de las edades tanto los niños y jóvenes que participan del sistema escolar formal, como aquellos que están excluidos del mismo reciban información adecuada, en tiempo, forma y contexto social.

Cuando una mujer adulta queda embaraza muchas veces también es por desconocimiento, por lo tanto la educación sexual no debiere orientarse sólo a la niñez y juventud, sino también a aquellos sectores más postergados que nunca tiene ni han tenido información adecuada. 

b)      Prevención del embarazo: Si bien una de las “patas” para la prevención del embarazo es la Educación en tiempo, forma y contexto; otra fundamental es la posibilidad de disponer de los métodos adecuados para el cuidado.

Como todos sabemos hoy el tema del embarazo es menor si tenemos en cuenta el contagio alarmante de VIH en todas las edades y especialmente en la juventud; como vemos no se trata sólo de una cuestión educativa sino también de una cuestión económica, donde el Estado y las Obras Sociales puedan proveer los distintos métodos legales disponibles al alcance de toda la población, tanto de los sectores marginados como los sectores mas o menos medios.

El Estado debe proveer en tiempo y forma los métodos que posibiliten el cuidado, tanto para prevención del embarazo como para la prevención del VIH; y esto es medio difícil cuando el sistema de atención primaria es altamente deficitario. Si una mujer posee Obra Social fácilmente conseguirá un turno con su ginecólogo aunque quizás no pueda pagar por el método anticonceptivo dado que su Obra social poco lo cubre; los que posen un ingreso económico de medio para arriba pueden acceder a los distintos métodos incluso a la posibilidad de realizarse una Ligadura de Trompas o una Vasectomía; quien no tiene recursos económicos no puede acceder a muchos de estos métodos e incluso el solo hecho de pensar en alguna intervención quirúrgica (algunas son reversibles) es impensable en la actual estructura del Hospital Público que esto pueda realizarse acorde a las necesidades de las personas. 

c)      Atención interdisciplinaria: El tema de la prevención en primer lugar y de la atención de la mujer embarazada está lamentablemente atravesado por el Orden Médico, aquel que conoce del cuerpo y no de otras cuestiones, y que cree que la vida del sujeto es reducida a sus órganos. Tanto en atención primaria como en atención secundaria (tratamientos) es fundamental romper con dicho paradigma para poder brindar una atención adecuada en tiempo, forma y contexto. La inclusión de trabajadores sociales, psicólogos, sociólogos y otras disciplinas es fundamental para poder operar en la realidad y que la cuestión no pase por “dar pastillitas”. Una atención interdisciplinaria implica brindarle un lugar en donde el sujeto además de su cuerpo pueda ser alojado en su singularidad y situación social, adecuando las estrategias de trabajo en función de las mismas. Un embarazo inesperado muchas veces es vivido como lo no – planificado que irrumpe, que genera mucha angustia y por distintos motivos la persona no está en condiciones de decidir, ( se puede objetivar en las historias de vida de distintas personas que se realizaron abortos) Ante esta situación mujeres deciden consultar a curanderas o si tienen recursos concurrir a algún lugar donde se practiquen abortos para “sacarse” el problema de encima; posteriormente al estar signado como un hijo que se decidió aparecen importantes problemas en la salud Psíquica, como son depresiones y problemas de relación. 

d)      Ser Madre – Ser padre: Lamentablemente todavía asociamos la maternidad y/o la paternidad como algo meramente Biológico, como aquello que por “naturaleza” debe ser así; este prejuicio no es menor. Podríamos decir que una cuestión es ser Madre y Padre Biológico y otra cumplir con la función. Esto que desde hace años muchas de las ciencias humanas han determinado, implica la posibilidad de ser madre / padre Biológicos y al no querer cumplir dicha función poder dar un hijo en adopción a personas que quieren cumplir la función. Este horizonte de trabajo se plantea en los equipos de salud que realizan el abordaje de mujeres embarazadas que por distintos motivos (enfermedad mental o simplemente no quieren cumplir la función de madre o padre) no desean o no pueden con la responsabilidad de criar y educar un hijo. 

Simplemente si tenemos en cuenta los primeros ítems, podremos observar cómo el Estado realiza abandono de sus funciones ya que si se realizaran las acciones adecuadas que implican una inversión de dinero tanto en recursos humanos como en métodos anticonceptivos, quizás el problema que se plantea disminuirá enormemente en su magnitud. Esto nos lleva a explorar otras cuestiones que se ocultan tras el aborto: 

1)     La presión ejercida por organismos multilaterales como el Banco Mundial y el FMI quienes desde la década del 70’ en vez de proponer una mejor distribución de la riqueza mundial plantean mecanismos de controles de la natalidad para disminuir la cantidad de pobres en los países del tercer mundo; esto implica propiciar el aborto como un “método más” de anticoncepción, negando las variables anteriores que habíamos puntuado.

2)     Los cambios arbitrarios de lectura que el  CEDAW (Protocolo facultativo de la Convención sobre la eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer) realiza sobre el protocolo ratificado por nuestro país poseyendo rango constitucional, entendiendo que si nuestro país no legitima el aborto esto se entendería como discriminación de la mujer.

3)     El convertir a las víctimas de distintas situaciones de embarazo no deseado en victimarios de los que están por nacer, reproduciendo la situación perversa que muchas veces ha generado dicho embarazo..

4)     La Negación a toda discusión respecto del origen de la vida en virtud de un pragmatismo típico del capitalismo neoliberal impuesto en nuestro continente

5)     La discusión sobre la vida, ya que si consideramos que a partir de la fecundación ella está presente y solo será “viable” (con posibilidad de autosustentarse) unos años después del nacimiento; caen por tierra todo tipo de argumentaciones a favor del aborto y otros temas que por “casualidad” no se plantean; como por ejemplo la experimentación genética tan en boga en estos tiempos. 

No nos equivoquemos, más allá de los casos terribles que suelen presentarse a la hora de argumentar en temas como este, no debemos perder el foco y pensar en qué se oculta tras un debate de este tipo... muchas veces podemos sorprendernos y no muy gratamente.