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Simplemente para que se den
una idea de algunas cuestiones que muchos desconocen y que a mi criterio
son importantes a la hora de establecer cualquier juicio, lo escribo desde
mi experiencia clínica de más de una década de tratar estos problemas y de
haber realizado pericias sea para sumarios o jubilaciones para organismos
provinciales desde el hospital provincial en el que trabajo.
(Todo lo que sigue está basado en el DSMIV. Que no es un
manual de "sensiblerías" sino de diagnóstico y tratamiento de distintas
enfermedades.Lo pueden encontrar en la web
http://consultapsi.com/servicios/libreria/ )
El cuento que relato es ficticio. pero no viene mal leerlo.
Pablo VI dijo una vez:
"Primero el Hombre, después el resto"
Un día te levantas a la mañana,.. y cuando estás en el
colectivo sentís de pronto una sacudida en el corazón,.. parece que éste
se sale del pecho y comienza a latir con más y más fuerza... sentís los
latidos en todo tu cuerpo y en ese momento un sudor frío te invade... las
gotas de sudor caen por tu frente y sentís que todo el cuerpo se moja
desde la planta de los pies a la cabeza... pensás que ya va a pasar, o que
seguramente son los indicios de que te estas muriendo... ¿cáncer? ¿Paro
cardíaco? ¿una enfermedad?... miras a los costados y todas las personas te
parecen extrañas, sentís que tu cuerpo se desvanece, que no sos vos el que
está allí ¿los demás se darán cuenta? ¿se notará?... te dan ganas de
llorar, el corazón ya no sólo se sale del pecho sino que el dolor es cada
vez más fuerte, tanto que comienza a dificultarse tu respiración. no te
entra el aire y te desesperas, empezás a respirar cada vez más rápido y te
comienza a doler el cuerpo, la espalda, cada músculo. sentís como si se te
frunciera la cara por la tensión que te asalta. ya van cinco minutos que
ocurre esto y nadie puede ayudarte, por lo que te bajás del colectivo sin
saber adónde huir, porque no se puede huir de lo que te pasa. no hay lugar
seguro. no es como si te están por robar porque todo eso sucede dentro
tuyo y no tenés ninguna posibilidad de controlarlo ¿me estoy volviendo
loco? ¿me estoy por morir?. Comenzás a marearte y parece que te vas a caer
en cualquier momento, no podés resistirlo. tus intestinos comienzan a
hacer ruido y ya no sólo te duele el pecho sino que tu panza se endurece.
y duele. cada vez más. sentís como si miles de hormigas suben por tu
cuerpo, no podés levantar el brazo o se duermen las piernas.
No sabes como pero llegas a un hospital creyendo que vas a
morir ahí y el médico te dice que no. que es una crisis y que tenés que
hacer tratamiento y tomar medicación. Comenzás el tratamiento pero todos
los días, cada día en cualquier momento te atacan los mismos síntomas. no
podés calcular el momento en que eso ocurrirá. le comentás a tu familia y
ellos te ven bien, como todos los días. pero para vos la vida cambió. no
te animás a salir solo porque te empezás a sentir mal y necesitas que
alguien te acompañe. aún así eso puede ocurrir igual. esto que te pasa
comienza a repercutir en tu trabajo al que ya no podes asistir porque la
medicación no te da el efecto que te prometieron, se lo explicas al
médico, llorás sólo delante de él porque no sabes que mas hacer y no
querés que tu familia te vea quebrado. Llega el fin de mes y tenes que
darle de comer a tus hijos y haces lo que podés. ¿Quién puede entender lo
que te pasa si te dicen que no tenés nada? ¿cómo hacer para seguir cuando
lo único que quisieras es que si en verdad vas a morir eso ocurra ya, que
no sea de esta manera. no podes aguantar mas. Sabés que lo único que te
puede sostener de es insistir en lo que podés y dar batalla a lo que te
pasa aunque no es muy claro como... el club en el que toda tu vida
trabajaste y en el que ocupás un tiempo es lo único que ante tanta
inhibición te brinda al menos la distracción y el sentirte útil, porque en
lo demás ya casi te considerás un inútil. vas viendo como lo que todo lo
que construiste en tu vida se desmorona, pero lo único en lo que te sentís
valioso es en aquello que tu padre te enseñaba sobre ocuparte de los demás
y que eso no podés renunciar porque sino ¿Quién serías después de todo?...
el problema es que como tu familia apenas llega a fin de mes le explicas a
tus compañeros del club y les decís que podés seguir trabajando en tu casa
pero lo que antes dabas sin mirar ya no podés.. pedís (o te ofrecen)
ayudarte con los gastos de que implica tu función y hasta algunos buenos
amigos se ofrecen a pasarte a buscar para ir a las reuniones, o las mismas
directamente se hacen en tu casa. Qué bueno es contar con los amigos!...
Como lo que te pasa se resiste a abandonarte empezás a comer
menos. ya no tenés hambre. la tristeza te invade porque ya no sentís que
seas el mismo. No podés dormir porque tu cabeza no para y te dan mas
medicación. casi sin trabajo y con 150 pesos de remedios, mas la nueva
medicación para dormir ¿cómo hacer? Te preguntas. no puedo más - decís- .
Ya no te quedan energías, y haces lo que podes en tu casa. navegas por
internet y chateas ya que para ello no tenés necesidad de salir de tu
casa, no te parece peligroso. podes descargar tu bronca en el chat, hablar
de lo que te pasa, encontrás algún que otro amigo y encontrás un lugar
donde decir, y decís enojado sin saber por qué ya que es algo que te sale
de adentro. A uno de los laburos volviste de a poco, pero el otro que te
daba el mayor ingreso ya no está. Te resistís a que tu familia pague por
lo que a vos te pasa, te sentís muy mal, que ya no podés, aunque para
afuera haces todo lo posible para que no se note. Ya no te podes
concentrar mas de diez minutos en algo. cuando lo contças la gente te mira
y no entiende porque te ve bien, duda de que digas la verdad porque no
pueden creer lo que te pasa, sin saber que esa duda lo único que te
provoca es aún más daño porque ratifica lo mal que vos te sentís con vos
mismo.
Desesperado, como cualquier persona que tiene sus afectos,
acudís a tu familia para que te ayude. y tu familia para vos es el club en
el que has crecido y que durante años ofreciste lo mejor de vos ... Como
no estás bien no podés evaluar todas las implicancias pero pensás "ellos
entenderán, ya no puedo más". Tu familia te presta plata y eso te da
aliento, nadie se animó a decirte que por ahí no era apropiado esto de
pedirle dinero al club... igualmente esto te devuelve un poco la esperanza
que ya casi habías perdido porque te sentías "poco hombre". pedís en
distintas ocasiones y se te da el dinero. De a poco te vas sintiendo mejor
y si bien ya no es lo mismo porque perdiste mucho trabajo cuando podés vas
devolviendo el dinero pero justo se armó lío en el club y resulta que
ahora dicen que sos un aprovechador, que sos un mal tipo. no entendés
nada. A mí me dijeron que sí! Gritas a todos los vientos. me encontraba
mal, no podía!.. pero nadie escucha.
Finalmente luego de que el Tribunal de disciplina se expidió
sobre tu conducta, confirmás el temor más grande que tenías. "no soy un
buen tipo, seguro que lo que me pasa es porque me lo merezco, lo que
decidieron en el club lo confirma". como ya te confirmaron tu temor mas
grande ¿para qué apelar?... te retirás, con la ilusión caída y casi sin
esperanza . de lo que te pasaba estás mejor, pero ¿cómo recuperás todo lo
que perdiste de vos y que te hacía valer ante la mirada de lo demás?. Con
un nudo en la garganta escribís una carta a los socios del club tratando
de explicar tibiamente lo que te pasaba porque lo que queda de lo que
mancharon de tu honorabilidad así lo exige.
La Justicia es ciega se dice.
La justicia no en todos lados es igual...
El fallo de la CNH ya está, supongo que a partir de las
evidencias objetivables encontradas, de la propia vivencia de la Ley Scout
que tienen sus miembros, de la Ley Scout en sí, de lo que dicen los
Códigos legales... de todas esas cosas, se habrán basado para establecer
su juicio, y obviamente hay responsabilidades ( no discuto eso), pero
muchas veces creo que hay que evaluar el peso de algunos atenuantes en
particular que no implican desresponsabilizar a nadie sino poder tener
otra mirada de algunas situaciones, por algo la psicología y la
psiquiatría son auxiliares de la justicia, no creo que por mi simple
opinión... de hecho al menos en mi ciudad, en los Tribunales sean de
Familia, civiles y comerciales o penales, se tiene muy en cuenta las
pericias psicológicas tanto en la parte acusadora como para la acusada, a
la hora de establecer la condena o el castigo. Obviamente es imposible
hacer una pericia de cada persona. pero en algunos casos particulares creo
que sería lo mas adecuado.
La CNH debe velar por los valores del Movimiento Scout, ante
la situación singular de ésta persona ¿Se consideró primero el Hombre y
después el resto? ¿o el resto se lo tomó como si fuera Hombre?.
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