Propuesta para Obras sociales

 

si observamos detenidamente los aranceles de las Obras Sociales que están disponibles en las planilla Excel “COSTOS vs. ARANCELES Obras Sociales” de la solapa “DATOS” , y los comparamos con los COSTOS REALES que tienen las distintas prestaciones (siempre considerando una odontología ortodoxa -netamente preventiva y conservadora-), podemos sacar las siguiente conclusiones: 

1.          Hay una abrumadora mayoría de Obras Sociales que no cubren ni siquiera los COSTOS de las prestaciones más comunes.

2.        La mayoría de los aranceles no guardan una relación coherente entre ellos de acuerdo a los COSTOS, lo cual demuestra que no se tuvieron en cuenta estos últimos, para su confección.

3.        Por lo tanto, se entiende que sólo se establecieron de acuerdo a las tasas de uso de los prestadores, por estadísticas, o de acuerdo a las dificultades para auditar determinadas prácticas; en definitiva, los aranceles surgen arbitrariamente sólo por las limitaciones presupuestarias de las Obras Sociales.

4.        El punto anterior demuestra la falta de imaginación para desarrollar un sistema de salud con normas de auditoría y normas de atención, que sea beneficioso para todos los sectores involucrados en la atención odontológica: EMPRESAS, ODONTÓLOGOS, INSTITUCIONES Y PACIENTES.

En el presente trabajo presentaré las bases fundamentales de mi propuesta.

La realidad actual, inevitablemente trae aparejada una deformación del plan de tratamiento. Plan que el odontólogo debería desarrollar para resolver el problema del paciente o mantener su salud y no verse condicionado por las limitaciones reglamentarias y arancelarias del sistema de atención.

Esa deformación trae como consecuencia, que la realización de Prótesis o Implantes sean las únicas prácticas que puedan ser rentables, con lo cual no es de extrañar que en un gran número de casos se abandone la odontología preventiva y conservadora.

Consecuencias de los Sistemas de Atención Actuales:

1.          Necesidad de una odontología restauradora por fracaso o ausencia de una odontología preventiva.

2.        Periódicas reiteraciones de facturación de prestaciones (principalmente operatoria dental y periodoncia), entre otras cosas por sistemas de auditorías obsoletos y por la necesidad de los prestadores de facturar prácticas no cubiertas por el sistema al estar imposibilitados de cobrárselas al paciente.

3.        Repetición de restauraciones por fracasos de un sistema que lleva a citar 2 ó 3 pacientes por hora, o por trabajar por cuadrantes indiscriminadamente.

4.        Gran cantidad de endodoncias como resultado de fracasos de operatoria dental.

5.        Gran cantidad de exodoncias por fracasos de todo lo anterior.

6.        Necesidad de invertir en prótesis dentales como consecuencia de una odontología deficiente.

7.         En definitiva, una odontología que está destinada al fracaso con un altísimo costo final para las empresas.

8.        Elevado gasto farmacológico derivado de patologías bucales (con una correcta odontología se  pueden reducir enormemente los focos sépticos de origen bucal), o de la falta de una cobertura adecuada para determinadas urgencias odontológicas que alientan una medicación innecesaria (p. ej. es frecuente que se mediquen con antibióticos o antiinflamatorios pulpitis por falta de reconocimiento de las Obras Sociales del tratamiento local adecuado).

9.        Aumento del gasto médico derivado de la mala salud buco-dental. Es indiscutible que el paciente que goza de una buena salud buco-dental presenta muchas menos patologías generales al no tener focos sépticos y al realizar una correcta digestión, por mencionar sólo 2 ejemplos de muy fácil comprensión.

 ESTOS ÚLTIMOS 2 COSTOS (de origen odontológico: el farmacológico y el médico), NUNCA SE CALCULARON COMO GASTO ODONTOLÓGICO, Y PUEDEN Y DEBEN REDUCIRSE A LA MÍNIMA EXPRESIÓN.

 

En resumen, los caminos seguidos hasta ahora por los sistemas de atención no le sirven a ninguno de los sectores involucrados en la atención odontológica: ni a las empresas, ni a los odontólogos, ni a los afiliados, ni a las instituciones intervinientes.

La solución pues, es desarrollar un sistema que desde el principio asegure las herramientas necesarias para que la atención odontológica no se distorsione, esto es respetar los Costos de una Odontología Moderna.

Defender una odontología preventiva y conservadora de excelencia, será un beneficio para todos los sectores y un ahorro económico de gran magnitud en el mediano plazo.

 A partir de esto, asegurar que no haya abusos por parte de los afiliados o de los prestadores a través de normas de trabajo, de auditoría y administrativas actualizadas y eficientes, como describiré más abajo.

Para describir las características del plan propuesto desarrollé, como trabajo práctico en un curso de auditoria realizado, una obra social la que a mi entender sería ideal, y a la que denominé “ON LINE SALUD BUCAL”.  Ver el desarrollo de la misma en el apartado correspondiente.

 

                                  Dr. Nicolás J. Ortiz