Dirección: Michael Radford.
Guión: Edward Anderson.
País: Reino Unido y Luxemburgo.
Año: 2007.
Duración: 108 min.
Genero: Crimen.
Titulo Original: Flawless.
Elenco: Michael Caine (Sr. Hobbs), Demi Moore (Laura Quinn), Joss Ackland (Milton Ashtoncroft), Lambert Wilson (Finch), Shaughan Seymour (Eaton), Nicholas Jones (Jameson), David Barras (Fenton).
Producción: Michael A. Pierce y Mark Williams.

 

Un Plan Brillante

Por Maximiliano Curcio

 

      Sinopsis: Laura Quinn trabaja en la London Diamond Corporation, la principal empresa de diamantes del mundo en 1960. Laura es una ejecutiva entregada que siente una tremenda frustración al ver que la evolución de su carrera está obstaculizada por el machismo que domina la compañía. Así, se alía con el Sr. Hobbs, un veterano empleado que afirma tener un plan perfecto para un robo que no dejará rastro.

 

* * / REGULAR

Un Plan Brillante” une puntos en común con el también reciente estreno cinematográfico “El Gran Golpe”. No solo ambos retratan un plan perfecto para asaltar un banco (un autentico subgénero contemporáneo del suspenso), sino que también son sendos films made in Inglaterra. Sin embargo, como producto artístico, cada uno toma su rumbo y son bien distintos en su concepción así como en su resultado final. Mientras “El Gran Golpe” se basaba en un caso real y hacia gala de una narrativa llevadera para resaltar un film de acción atrapante, “Un Plan Brillante” no corre tan buena suerte, a pesar de contar con los pergaminos de Michael Radford, realizador de dignos films como “El Cartero” o “El Mercader de Venecia”.

Como ya fue apuntado, varios puntos en común unían a las películas. Sin embargo los mas representativos y los que la definen como una obra de arte pasable o no son los que justamente conforman la antitesis de estas dos películas. Sin ser una joya, “El Gran Golpe” fue un film respetable, correcto y prolijo. Como contrapartida “Un Plan Brillante” es demasiado solemne, previsible e insuficiente. No alcanza con el siempre genial Michael Caine. Menos aun si su partenaire actoral es una Demi Moore devenida últimamente en actriz de películas clase b, su timing actoral parece haberse perdido por completo y la construcción de su personaje (en pos de dar un mensaje feminista en medio de una sociedad machista) cae de forma permanente en la exageración.

Con guiños acertados sobre el alcance mundial del competitivo capitalismo salvaje y la explotación casi esclava en Sudáfrica, el robo y los interminables giros sorpresa más previsibles son, finalmente, el centro del relato. Si la intriga captura una pizca de interés en un tópico de películas que ya agotó sus posibilidades desde la genial “Tarde de Perros”, esta se ve diluida con un panfletario inexplicable desenlace, con un cargado tinte ético que resulta terminando una moralina y no un mensaje constructivo. Dicha resolución termina por hundir al film en la mediocridad, y la poca sutiliza que demuestra Radford para concluir el misterio dista de la elegancia prototipo del cineasta ingles por excelencia. Un film que deja un sabor distante, lejos de la brillantez de ese objeto tan deseado que llevara a los protagonistas a la perdición o a la redención.

  

:: DERECHOS RESERVADOS - LA ZONA CRITICA ::