Pronto

Revista Pronto, 25 de febrero de 2003

"Tampoco somos la familia Ingalls"


En mar del Plata, antes del arranque de una esperada gira nacional, el grupo del momento habla de cómo se consiguen chicas, de la plata que juntan, del acoso de las fans, de las peleítas internas y le pegan con todo a Mario Pergolini

Tripa es el que más se ríe, bromea todo el tiempo y aprovecha cada instante para gritarles a las chicas que se asoman desde cada ventana del hotel marplatense para saludar a sus ídolos. Manu parece disfrutar cada momento, siempre sonriendo y de buen humor. Gerónimo es el más serio, camina junto a los productores, pregunta que hay que hacer luego de la nota y llama a sus compañeros al orden a cada minuto. Milton y Pablo el más chico, parecen los más distantes, hablan entre ellos, se ríen, pero también se fastidian con el sol, con los fotógrafos, con los asistentes, parecen verdaderas estrellas de Rock. "No es una pose, ¿eh?, son así todo el tiempo", desliza alguien cercano al grupo.
Hasta hace poco los cinco eran simples desconocidos, llenos de sueños. Hoy son los Mambrú, uno de los grupos Pop más taquilleros de la Argentina.
Hace apenas cinco meses, luego de terminado el reality Popstars, se conformó la banda y se transformó en un éxito en todo el país, con miles de placas vendidas de su primer disco y estadios llenos en donde se presentan.
"Tenemos varios proyectos. Lo primero es hacer una gira por el interior: en Marzo vamos a estar en Mendoza para la Fiesta de la Vendimia. También estamos trabajando para lo que va a ser el segundo disco, y seguimos proyectando recitales para Capital Federal durante el año", cuenta Tripa respecto de futuro inmediato.
Cada uno llegó por caminos diferentes a la gran posibilidad de su vida, y los cinco cuentan cómo fueron aquellos primeros pasos. El más chico del grupo, Pablo Silberberg (18), recuerda: "Yo tenía una banda con mi hermano gemelo, hacíamos hard rock y heavy metal. Fui al casting con la esperanza de mostrar lo que tenía, no me importaba si quedaba o no. Después, cuando entré al hotel me empezó a tentar mucho la idea de formar parte del grupo".
Gerónimo ( 25), quien ya había trabajado en algunos musicales, cuenta su experiencia en el casting: "Yo fui con la intención de quedar pero al principio lo veía como algo muy lejano; no te olvides que fueron a probarse entre cuatro mil pibes. Ya cuando éramos diez, tenía muchísimas ganas de quedar".
Milton Amadeo (21), oriundo de Bahía Blanca, jura haber llagado a Mambrú casi de casualidad: "Yo había ido a acompañar a un amigo y no sabía muy bien de qué se trataba, igual me terminé anotando. Después me enganche mucho y finalmente me convocaron".
Germán "Tripa" Tripel (23), en cambio, no tenía intención de presentarse; su familia prácticamente lo obligó: "Fui a probar suerte, mi familia me alentó mucho, casi me insistió, porque yo no estaba muy convencido. Hoy les tengo que dar las gracias"
Emanuel "Manu" Ntaka (25), quien viene luchando desde hace muchos años con la esperanza de convertirse en músico, relata su paso por Popstars: "fui a golpear una puerta más, como siempre, intentando hacer lo que me gusta. Y finalmente, el proyecto me fue seduciendo. Hoy estoy muy orgulloso de lo que hacemos. Te juro que si no formara parte del grupo, compraría sin dudarlo el disco de Mambrú".
Hospedados en el Hotel Manantiales de Mar Del Plata, los cinco han salido hasta un pequeño jardín para hacer la sesión de fotos, bromean entre ellos van y vienen, se suben a los árboles; es difícil mantenerlos a todos en el cuadro por más de un minuto. Después, más calmados y gaseosas de por medio, llega la hora de la charla.

-Pasan más tiempo juntos que con sus respectivas familias, ¿es buena la convivencia entre ustedes?
Gerónimo: Nosotros lo que compartimos mucho es el trabajo, y después separamos las cuestiones del grupo y la amistad que tenemos.
Pablo: La verdad es que nos llevamos muy bien todos, pero no es de ahora, sino desde el programa; los cinco pegamos buena onda enseguida.
-En las giras, ¿duermen juntos?
Gerónimo: No, cada uno tiene su habitación privada.
Manu: En realidad, le da vergüenza contar la verdad, pero con Gero sí dormimos juntos. (risas)
Pablo: La verdad es que el negro sortea para ver quien duerme con él (risas).
Gerónimo: Paren che, hablemos en serio una vez.
-¿Hay peleas entre ustedes?
Milton: Peleas en serio nunca hubo, pudo haber alguna típica pelea de amigos, pero nada grave. A veces hay alguna diferencia y se marca, pero no podemos decir que se trata de una pelea; los códigos están claros y la verdad que nos respetamos y nos queremos mucho.
Manu: Ojo, tampoco todo es color de rosas ni somos la Familia Ingalls. A veces estás metido en un estudio o ensayando horas y horas, y surge alguna peleíta o algún roce, pero es normal.
Gerónimo: Igual, eso tiene que ver con cómo cada uno llegue al trabajo ese día. Cada uno tiene su vida, somos cinco tipos diferentes, y si uno tal día se levantó con el pie izquierdo, puede estar con cara de culo. De todos modos, eso pasa en cualquier trabajo, no es exclusivo de Mambrú.
Pablo: Además, desde que se formó el grupo, si surge alguna diferencia, la charlamos entre nosotros y tratamos de solucionarla. Porque, básicamente peleamos por lo mismo.
-¿Cuántas horas pasan juntos por día?
Pablo: No hay un horario determinado. Lo que pasa es que una semana capaz que no hacemos nada y otra estamos desde las 8 de la mañana hasta la 1 de la madrugada.Siempre depende del trabajo que tengamos que hacer.
Manu: si tenemos que hacer un videoclip, capaz que estamos tres días seguidos, y si tenemos que grabar un disco, estamos uno o dos meses todos los días.
-¿Se puede decir que se hicieron amigos o son solo compañeros de trabajo?
Tripa. Te diría que somos más que amigos, nos sentimos como hermanos. Cuando no laburamos, nos juntamos y compartimos los cinco nuestro tiempo libre.
Pablo: Creo que en cierta parte, la gente que eligió el grupo se dio cuenta de que nos sentíamos amigos, vio la buena onda que había entre nosotros. Desde los primeros momentos del casting, cada uno quería que quedara el otro, y creo que por eso además de por las condiciones de cada uno, es que quedamos elegidos.
-¿Les molesta no poder salir a la calle como hasta hace algunos meses?
Manu: Ojo que vamos a algunos lugares, salimos a comer juntos o a algún boliche. Obvio que nos tenemos que cuidar el doble y no podemos pasear por Corrientes los cinco juntos.
Pablo: Y por supuesto no podemos ir a lugares muy públicos. A nadie le gustaría estar comiendo y que vengan 800 personas para pedirte un autógrafo o un beso.
-La productora que los maneja, ¿los somete a un régimen muy estricto?
Tripa: Depende del trabajo que tengamos. Cuando estamos de gira o vamos a hacer alguna presentación a algún lugar, sí tenemos un itinerario que seguir. Pero después, cada uno hace su vida.
Pablo: No es un régimen policial, es un trabajo como cualquiera. Se cumplen ciertos horarios y después cada uno va a su casa.
-Emanuel, por el hecho de ser de raza negra, ¿pensaste que podías quedar elegido, teniendo en cuenta que no hay mucha gente de color en nuestro país?
-La verdad es que no lo pensé. Es cierto lo que decís, que mi look podría resaltar, pero me concentré específicamente en lo musical. Sabía que por más que fuese negro, colorado o amarillo, si no tenía el talento, no iba a llegar a ningún lado.
-¿Alguno sigue viviendo con su familia?
Gerónimo: No, todos vivimos solos; algunos, a partir del éxito de Mambrú y otros, desde hace más tiempo. Cada uno hoy tiene su casa.
-Las chicas los siguen con bastante fervor. ¿Qué hacen para poder llegar a verlos?
Pablo: De todo. Hubo una chica en córdoba que apareció por los techos del hotel. Estábamos en la pileta y de repente vemos a una loca trepada al techo, que era altísimo, y nos empezó a gritar.
Milton: La otra vez que estuvimos en Mar del Plata hubo varias fans que se mandaron por la escalera de emergencia. A veces alquilaban habitaciones en el hotel y te llaman por teléfono o merodean por los pasillos del piso en el que estamos.
-Al principio debió ser divertido, pero después de varios meses, ¿estas cosas los cansan?
Manu: Depende el día. A veces te levantás muy contento y decía: "Vamos, que vengan las chicas que quiero firmar autógrafos".
Tripa: Y otros días te levantas de mal humor y no querés ver a nadie.
Milton: Es como que tenés ganas de ser vos y no un Mambrú. Querés estar solo, y que el asedio sea constante, a veces joroba.
-¿Las fans ya saben dónde vive cada uno?
Gerónimo: Sí, todas, y se pasan día montando guardia.
Manu: Tocan el timbre, golpean y a veces se hacen pasar por familiares.
Pablo: Igual, creo que ya aprendieron que somos Mambrú sólo un rato de nuestras vidas. Si nos cruzan por la calle o en un shopping, está todo bien, pero si vas a tocarme el timbre a mi casa, es una invasión. Ojo, igual entiendo que lo hacen desde el afecto, no es que las pibas dicen: "Che, vamos a romperle los quinotos al boludo éste que está durmiendo la siesta".
-¿Alguno tiene una pareja formal?
Gerónimo: No, en mi caso no. Y quiero aclarar que soy un ser humano perfectamente normal, que aprovecha esta movida. Agarramos un poquito por todos lados. No sé, me siento Arnaldo André (risas).
Bueno, Viejo, tengo ganas de divertirme.
-¿Qué dijeron Virginia y vos, Milton, cuando vieron las fotos en que salían juntos y se hablaba de romance?
-Nos reímos, qué íbamos a hacer. En realidad, a la gente que trabaja con nosotros no le gusta demasiado. Es como que no conviene que un Mambrú tenga novia, porque a las fans no les gusta.
Pablo: Lo que pasa es que uno sigue siendo un ser humano, y por más Mambrú que sea, no puede evitar enamorarse en algún momento.
-¿Vos lo decías por tu romance con Dominique, la sexta Bandana?
Pablo: Pero de dónde sacaron eso. Dominique fue una compañera de trabajo; ¿a vos te parece que con las posibilidades que tengo ahora de conocer chicas, me voy a poner de novio? Ni en pedo.
-¿Vos, Manu?
-No, yo también estoy solo, soy otro picoteador salvaje.
-¿Tripa?
-Yo estoy comprometido. Esta noche ya la tengo ocupadísima (risas). No, viejo, en serio, tenemos nuestros compromisos. El negro es el que hace el casting, así que ya saben, chicas, si tienen entre 18 y 25 años, presentarse en la habitación de Manu.
-Antes hablábamos de las Bandana, ¿se hicieron amigos de las chicas o son apenas conocidos?
Pablo: Al principio, no nos hablábamos mucho, porque nosotros recién empezábamos y ellas estaban en España. Pero después de Vélez es como que, al juntarnos a ensayar, pegamos muy buena onda entre los dos grupos.
-¿Cómo fue ese recital en Vélez?
Tripa: El recital con Bandana lo vivimos con mucha euforia y a la vez fue muy raro, porque nosotros nos habíamos formado apenas dos meses antes de ese concierto, y de repente, casi de la nada, estábamos haciendo Vélez. Fue muy fuerte realmente; creo que para ellas, a pesar de que tienen una carrera más larga, fue igual de grosso.
-¿Cómo reaccionaron las familias de cada uno con el éxito de Mambrú?
Gerónimo: En mi caso, con mucha felicidad. Tengo papá, mamá y tres hermanos que adoro, y todos tienen una orientación artística, así que les encantó.
Milton: Mi viejo y mi vieja me apoyaron desde muy pibe; yo estoy con la música desde los 8 años y siempre me bancaron.
Manu: Mi papá era músico de jazz; yo aprendí mucho de él. Mi vieja es profesora de Filosofía y Psicología, no salí a ella para nada, siempre quise ser como mi viejo y hacia eso estoy yendo.
-¿Pablo, Tripa?
Pablo: Al principio, con los primeros castings, mi familia no estaba convencida porque había muchos planes para que fuéramos a vivir a Europa. Después, eso se interrumpió y surgió lo de Popstars, y acá estoy.
Tripa: En mi caso, siempre me apoyaron, no tengo ninguna queja; al contrario, por ellos pude llegar a donde estoy.
-¿Les molestan los ataques que les hacen desde algunas radios, como por ejemplo lo de Mario Pergolini cuando se burla de sus canciones?
Manu: No lo escuchamos, ¿qué dijo de nosotros?
-Por ejemplo, cuando suena alguno de sus hits, hace que alguien grite arriba: "Mambrú, la c... de tu madre".
Tripa: A mí me encanta Mario Pergolini. Es más te diría que cuando nos critica, más me eleva el ego.
Milton: Yo no me pongo muy contento porque me digo: "Qué increíble que un personaje de la inteligencia y la sagacidad de Mario Pergolini me critique".
Gerónimo: No somos dignos de lamerle los pies.
Manu: De cualquier forma son de barro ¿no?
Pablo: ¿Sabe lo que debe ser más gracioso?, Que el hijito debe estar todo el día escuchando el disco mientras él se muere por poner Motorhead (risas).
-La mayoría viene de hacer rock, ¿les molesta las críticas de los rockeros?
Pablo: Es que el rock no es lo que diga tal o cual por la radio. Tiene muchas caras; yo escuche mucho, leí mucho, y la verdad es que nosotros tenemos mucho de rock.No es que somos un grupito pop inventado, como creen algunos. Mambrú somos nosotros cinco. Yo toco la guitarra acústica y eléctrica, y Milton toca bajo, clarinete y guitarra. El que diga que no hacemos música, que nos venga a ver en vivo.
Gerónimo: Estamos bien, haciendo lo que nos gusta; las críticas, la verdad es que no nos afectan, hay Mambrú para rato.
¿Tienen miedo que Mambrú sea algo pasajero y después tener que volver a tocar puertas o tener que vivir sin el dinero que ganan ahora?
Gerónimo: No ganamos tanta plata como la gente piensa. Así que no nos vamos a marear con eso. Y la verdad, con respecto a lo otro, lo importante, lo que hoy tenemos ganas es de dejar una marca en la historia de la música. Esa es nuestra meta, después veremos que pasa.

Mariano Caruso.


Segunda nota de la Revista Pronto

Tripa es el que mas se ríe, bromea todo el tiempo y aprovecha casa instante para gritarles a las chicas que se asoman desde la ventana del hotel marplatense para saludar a sus ídolos. Manu parece disfrutar de cada momento, siempre sonriendo y de buen humor. Gerónimo es el mas serio, camina junto a los productores, pregunta que es lo que hay que hacer luego de la nota, mira la hora y llama a sus compañeros al orden a cada minuto. Milton y Pablo, el mas chico, parecen los mas distantes, hablan entre ellos, se ríen, pero también se fastidian con el sol, con los fotógrafos, con los asistentes; parecen verdaderas estrellas de rock. "No es una pose, ¿eh?, son asi todo el tiempo", desliza alguien cercano al grupo.
Hasta hace apenas cinco meses, luego de terminado el reality Popstars, se conformo la banda y se transformo en un éxito en todo el país, con miles de placas vendidas de su primer disco y estadios llenos en donde se presentan. "Tenemos varios proyectos. Lo primero es hacer una gira por el interior: en marzo vamos a estar en Mendoza para la Fiesta de la Vendimia. También estamos trabajando para lo que va a ser el segundo disco, y seguimos proyectando recitales para Capital Federal durante el año", cuenta Tripa respecto del futuro inmediato.
Cada uno llego por caminos diferentes a la gran posibilidad de su vida, y los cinco cuentan como fueron aquellos primeros pasos. El mas chico del grupo, Pablo Silberberg (18), recuerda: "Yo tenia una banda con mi hermano gemelo, hacíamos hard rock y heavy metal. Fui al casting con la esperanza de mostrar lo que tenia, no me importaba demasiado si quedaba o no. Después, cuando entre al hotel me empezó a tentar mucho la idea de formar parte del grupo".
Gerónimo (25), quien ya había trabajado en algunos musicales, cuenta su experiencia en el casting: "Yo fui con la intención de quedar, pero al principio lo veía como algo muy lejano; no te olvides que fueron a probarse cuatro mil pibes. Ya cuando eramos diez, tenia muchísimas ganas de quedar".
Milton Amadeo (21), oriundo de Bahía Blanca, jura haber llegado a Mambrú casi de casualidad: "Yo había ido a acompañar a un amigo y no sabia muy bien de que se trataba, igual me termine anotando. Después fui pasando las etapas, me enganche mucho y finalmente me convocaron".
Germán "Tripa" Tripel (23), en cambio, no tenia intenciones de presentarse; su familia prácticamente lo obligo: "Fui a probar suerte, mi familia me alentó mucho, casi que me insistió, porque yo no estaba muy convencido. Hoy les tengo que dar las gracias".

Emanuel "Manu" Ntaka (25), quien viene luchando desde hace muchos años con la esperanza de convertirse en músico, relata su paso por Popstars: "Fui a golpear una puerta mas, como siempre, intentando hacer lo que me gusta. Y finalmente, el proyecto me fue seduciendo. Hoy estoy muy orgulloso de lo que hacemos. Te juro que si no formaba parte del grupo, compraría sin dudarlo un disco de Mambrú".
Hospedados en el Hotel Manantiales de Mar del Plata, los cinco han salido hasta un pequeño jardín para hacer la sección de fotos, bromean entre ellos, van y vienen, se suben a los arboles; es difícil mantenerlos a todos en el cuadro por mas de un minuto. Después, mas calmados y gaseosas de por medio, llega la hora de la charla.

-Pasan mas tiempo juntos que con sus respectivas familias, ¿es buena la convivencia entre ustedes?
Gerónimo: Nosotros lo que compartimos mucho es el trabajo, y después es como que separamos las cuestiones del grupo y la amistad que tenemos.
Pablo: La verdad es que nos llevamos muy bien todos, pero no es de ahora, sino desde el programa; los cinco pegamos buena onda enseguida.

-En las giras, ¿duermen juntos?
Gerónimo: No, cada uno tiene su habitación privada.
Manu: En realidad, le da vergüenza contar la verdad, pero con Gero si dormimos juntos (risas).
Pablo: La verdad es que el negro sortea para ver quien duerme con él (risas).
Gerónimo: Paren, che, hablemos en serio de una vez.

-¿Hay peleas entre ustedes?
Milton: Peleas en serio nunca hubo, pudo haber alguna típica pelea de amigos, pero nada grave. A veces hay alguna diferencia y se marca, pero no podemos decir que se trata de una pelea; los códigos están claros y la verdad es que nos respetamos y nos queremos mucho.
Manu: Ojo, tampoco todo es color de rosas ni somos la familia Ingalls. A veces estas metido en un estudio o ensayando durante horas y horas, y surge alguna peleíta o algún roce, pero es normal.
Gerónimo: Igual, eso tiene que ver con como cada uno llegue al trabajo ese día. Cada uno tiene su vida, somos cinco tipos diferentes, y si uno tal día se levanto con el pie izquierdo, puede estar con cara de culo. De todos modos, eso pasa en cualquier trabajo, no es exclusivo de Mambrú.
Pablo: Además, desde que se formo el grupo, si surge alguna diferencia, la charlamos entre nosotros y tratamos de solucionarla. Porque, básicamente peleamos por lo mismo.

-¿Cuántas horas pasan juntos por día?
Pablo: No hay un horario determinado. Lo que pasa es que una semana capaz que no hacemos nada y otra estamos desde las 8 de la mañana hasta la 1 de la madrugada. Siempre depende del trabajo que tengamos que hacer.
Manu: Si tenemos que hacer un videoclip, capaz que estamos tres días seguidos, y si tenemos que grabar un disco, estamos uno o dos meses todos los días.

-¿Se puede decir que se hicieron amigos o son solo compañeros de trabajo?
Tripa: Te diría que somos mas que amigos, nos sentimos como hermanos. Cuando no laburamos, nos juntamos y compartimos los cinco nuestro tiempo libre.
Pablo: Creo que en cierta parte, la gente que eligió el grupo se dio cuenta de que nos sentíamos amigos, vio la buena onda que había entre nosotros. Desde los primeros momentos del casting, cada uno quería que quedara el otro, y creo que por eso, además de por las condiciones de cada uno, es que quedamos elegidos.

-¿Les molesta no poder salir a la calle como hasta hace algunos meses?
Manu: Ojo que vamos a lugares, salimos a comer juntos o a algún boliche. Obvio que nos tenemos que cuidar el doble y no podemos pasear por Corrientes los cinco juntos.
Pablo: Y por supuesto no podemos ir a lugares muy públicos. A nadie le gustaría estar comiendo y que vengan 800 personas para pedirte un autógrafo o un beso.

-La productora que los maneja, ¿los somete a un régimen muy estricto?
Tripa: Depende del trabajo que tengamos. Cuando estamos de gira o vamos a hacer alguna presentación a algún lugar, si tenemos un itinerario que seguir. Pero después, cada uno hace su vida.
Pablo: No es un régimen policial, es un trabajo como cualquiera. Se cumplen ciertos horarios y después cada uno se va a su casa.

-Emanuel, por el hecho de ser de raza negra, ¿pensaste que podías quedar elegido, teniendo en cuenta que no hay mucha gente de color en nuestro país?
-La verdad es que no lo pense. Es ciertto lo que decís, que mi look podría resaltar, pero me concentre específicamente en lo musical. Sabia que por mas que fuese negro, colorado o amarillo, sino tenia el talento necesario, no iba a llegar a ningún lado.

-¿Alguno sigue viviendo con su familia?
Gerónimo: No, todos vivimos solo; algunos, a partir del éxito de Mambrú y otros, desde hace mas tiempo. Cada uno hoy tiene su casa.

-Las chicas los siguen con bastante fervor. ¿Que hacen para poder llegar a verlos?
Pablo: De todo. Hubo una chica en Córdoba que apareció por los techo del hotel. Estabamos en la pileta y de repente vemos a una loca trepada al techo, que era altísimo, y nos empezó a gritar.
Milton: La otra vez que estuvimos en Mar del Plata hubo varias fans que se mandaron por la escalera de emergencia. A veces alquilan habitaciones en el hotel y te llaman por teléfono o merodean por los pasillos del piso en el que estamos.

-Al principio debió ser divertido, pero después de varios meses, ¿estas cosas los cansan?
Manu: Depende el día. A veces te levantas muy contento y decís: "Vamos, que vengan las chicas que quiero firmar autógrafos".
Tripa: Y otros días te levantas de mal humor y no queres ver a nadie.
Milton: Es como que tenes ganas de ser vos y no un Mambrú. Queres estar solo, y que el asedio sea constante, a veces joroba.

-¿Las fans ya saben donde vive cada uno?
Gerónimo: Si, todas, y se pasan el día montando guardia.
Manu: Tocan timbre, golpean y a veces se hacen pasar por familiares.
Pablo: Igual, creo que ya aprendieron que somos Mambrú solo un rato de nuestras vidas. Si nos cruzan por la calle o en un shopping, esta todo bien, pero si vas a tocarme timbre a mi casa, es una invasión. Ojo, igual entiendo que lo hacen desde el afecto, no es que las pibas dicen: "Che, vamos a romperle los quinotos al boludo este que esta durmiendo la siesta".

-¿Alguno tiene una pareja formal?
Gerónimo: No, en mi caso no. Y quiero aclarar que soy un ser humano perfectamente normal, que aprovecha esta movida. Agarramos un poquito por todos lados. No se, me siento Arnaldo André (risas). Bueno, viejo, tengo ganas de divertirme.

-¿Qué dijeron Virginia y vos, Milton, cuando vieron fotos en que salian juntos y se hablaba de romance?
-Nos reímos, que íbamos a hacer. En reaalidad, a la gente que trabaja con nosotros no le gusta demasiado. Es como que no conviene que un Mambrú tenga novia, porque a las fans no les gusta.
Pablo: Lo que pasa es que uno sigue siendo un ser humano, y por mas Mambrú que sea, no puede evitar enamorarse en algún momento.

-¿Vos lo decís por tu romance con Dominique, la sexta Bandana?
Pablo: Pero de donde sacaron eso. Dominique fue una compañera de trabajo; a vos te parece que con las posibilidades que tengo ahora de conocer chicas, me voy a poner de novio? Ni en pedo.

-¿Vos, Manu?
-No, yo también estoy solo, soy otro piicoteador salvaje.

-¿Tripa?
-Yo estoy comprometido. Esta noche ya lla tengo ocupadisima (risas). No, viejo, en serio, tenemos nuestros compromisos. El negro es el que hace el casting, asi que ya saben, chicas, si tienen entre 18 y 25 años, presentarse en la habitación de Manu.

-Antes hablábamos de las Bandana, ¿se hicieron amigos de las chicas o son apenas conocidas?
Pablo: Al principio, no nos hablábamos mucho, porque nosotros recién empezábamos y ellas estaban en España. Pero después de Vélez es como que, al juntarnos a ensayar, pegamos muy buena onda entre los dos grupos.

-¿Cómo fue ese recital en Vélez?
Tripa: El recital con Bandana lo vivimos con mucha euforia y a la vez fue muy raro, porque nosotros nos habíamos formado apenas dos meses antes de ese concierto, y de repente, casi de la nada, estabamos haciendo Vélez. Fue muy fuerte realmente; creo que para ellas, a pesar de que tienen una carrera mas larga, fue igual de grosso.

-¿Cómo reaccionaron las familias de cada uno con el éxito de Mambrú?
Gerónimo: En mi caso, con mucha felicidad. Tengo papa, mama y tres hermanos que adoro, y todos tienen una orientación artística, asi que les encanto.
Milton: Mi viejo y mi vieja me apoyaron desde muy pibe; yo estoy con la música desde los 8 años y siempre me bancaron.
Manu: Mi papa era músico de jazz; yo aprendí mucho de él. Mi vieja es profesora de Filosofía y Psicología, no salí a ella para nada, siempre quise ser como mi viejo y hacia eso estoy yendo.

-¿Pablo, Tripa?
Pablo: Al principio, con los primeros castings, mi familia no estaba nada convencida porque había muchos planes para que fuéramos a Europa. Después, eso se interrumpió y surgió lo de Popstars, y acá estoy.
Tripa: En mi caso, siempre me apoyaron, no tengo ninguna queja; al contrario, por ellos pude llegar a donde estoy.

-¿Les molestan los ataques que les hacen desde algunas radios, como por ejemplo los de Mario Pergolini cuando se burla de sus canciones?
Manu: No lo escuchamos, ¿que dijo de nosotros?

-Por ejemplo, cuando suena alguno de sus hits, hace que alguien grite: "Mambrú, la c... de tu madre".
Tripa: A mí me encanta Mario Pergolini. Es mas, te diría que cuanto más me critica, mas me eleva el ego.
Milton: Yo me pongo muy contento, porque me digo: "Que increíble que un personaje de la inteligencia y la sagacidad de Mario Pergolini me critique".
Gerónimo: No somos dignos de lamerle los pies.
Manu: De cualquier forma son de barro, ¿no?
Pablo: ¿Sabes lo que debe ser mas gracioso? Que el hijito debe estar todo el día escuchando nuestro disco mientras el se muere por poner a Motorhead (risas).

-¿La mayoría viene de hacer rock, les molestan las criticas de los rockeros?
Pablo: Es que rock no es lo que diga tal o cual por la radio. Tiene muchas caras; yo escuche mucho, leí mucho, y la verdad es que nosotros también tenemos mucho de rock. No es que somos un grupito pop inventado, como creen algunos. Mambrú somos nosotros cinco. Yo toco guitarra acústica y eléctrica, y Milton toca bajo, clarinete y guitarra. El que diga que no hacemos música, que nos venga a ver en vivo.
Gerónimo: Estamos bien, haciendo lo que nos gusta; las criticas, la verdad es que no nos afectan, hay Mambrú para rato.

-¿Tienen miedo de que Mambrú sea algo pasajero y después tener que volver a tocar puertas o tener que vivir sin el dinero que ganan ahora?
Gerónimo: No ganamos tanta plata como la gente piensa. Asi que no nos vamos a marear con eso. Y la verdad, con respecto a lo otro, lo importante, lo que hoy tenemos ganas es de dejar una marca en la historia de la música. Esa es nuestra meta, después veremos que pasa.

Mariano Caruso

 


Revista Pronto, Febrero 2003

EL FENOMENO MAMBRU LLEGO A LA COSTA ATLANTICA
La fama no se nos subió a la cabeza

El fenómeno Mambrú pasó por la costa atlántica y despertó la locura de miles de adolescentes. Milton Amadeo (22), Emanuel Ntaka (24), Germán Tripel (22), Gerónimo Rauch (24) y Pablo Silberberg (18) llegaron a Mar del Plata el pasado miércoles por la tarde para brindar un show en el estadiopolideportivo y se alojaron en las suites de los pisos 12º y 14 del lujoso hotel Costa Galana, que debió ser reforzado en su seguridad con vallas en la entrada y varios custodios debido a la gran cantidad de chicas que forcejaban por entrar a ver a sus ídolos. Como divos, los cinco llegaron del viaje y decidieron dormir hasta cerca de las 19, hora en que se levantaron y atendieron a la prensa. A veces con poses de estrellas, otras, como los simples chicos de barrio que eran hasta no hace mas de un año, los jóvenes se mostraron muy divertidos a la hora en encarar la nota.
“Nunca había venido a Mar del Plata, Bah, en realidad si, pero era tan chico que casi no me acuerdo”, comento al pasar Pablo, el mas acosado por las fans. Y los demás se apuraron a gastarlo: “Si fue el año pasado, por que todavía es un niño pobrecito, el chiquitito”. “La ciudad me encanta y no veo la hora de bajar y dar una vuelta”, agrego Milton, sin medir sus palabras. Es que, hoy por hoy, que uno de los mambrú pueda caminar por la peatonal San Martín no es más que una utopía.
¿Todos se llevan tan bien como parece? “Nos llevamos genial, parecemos Menudo”, dijo Milton haciendo estallar una carcajada “Sinceramente parece que nos conociéramos de toda la vida, somos cinco hermanos que nos juntamos para cantar que es lo que amamos todos”, aseguro Gerónimo. Pero igual, al rato, aprovecharon para sacar sus trapitos al sol deschavando al más malhumorado del grupo: Milton. “Bueno si me quieren poner ese titulo, esta bien. El tema es si me despiertan a la mañana no me lo banco. Pero si me levanto solo, no hay ningún problema” explico el aludido. Y a la hora de destacar al mas bonachón, todos coincidieron en señalar a Tripa, a quien Manu comparo con Ghandi. Los allegados dicen que es, por lejos, el de mejor onda del grupo.
Los Mambrú tienen una llamativa coincidencia: todos son hinchas de River. Pero a la hora de la comida los gustos varían: Pablo tiene debilidad por el sushi y el buen vino tinto, German adora la pizza y el jugo de naranjas, y Manu asegura ser un fana de los asados y el cuba libre.
La fama les ha traído chicas para elegir, y los Mambrú no se quedan callados al tema, aseguraron estar solos o mejor dicho, “con varias a la vez”. Sin embargo esta popularidad repentina de la que gozan no parece no parece haberlos mareado. Para Gerónimo “ahora salir a la calle se nos hace difícil, por que nos mira todo el mundo”. “Seguro que hoy cambiaron cosas, por que hoy somos personas publicas. Pero mi vida personal, el trato con mis amigos y mi familia sigue siendo igual”, agrego Pablo. Milton y Manu le dieron la razón. Entonces Tripa concluyo: “Seguimos siendo los mismos chicos de antes de entrar a Popstars. Tal ve con mas conocimientos musicales y una nueva experiencia de vida. Pero definitivamente, la fama no se nos subió a la cabeza”.
Por la noche los chicos cenaron en un restaurante lejos del centro y de las fans, que los perseguían a sol y a sombra, solo recibieron a Mónica Ayos y a su hijo Federico, quien quería conocer a sus ídolos. Al otro día, los Mambrú brindaron un multitudinario show para 12 mil personas, e hicieron delirar a miles de fans que tuvieron el mejor regalo en sus vacaciones.


Revista Pronto, Octubre 2002

"Listos para la guerra"

De 4000 postulantes que se presentaron en el Club Hípico, sólo cinco llegaron a la meta. MAMBRU ya es un éxito y acá te presentamos a los protagonistas.
Hace unos meses atrás ninguno esperaba nada del concurso pop que vio nacer a las Bandanas, pero con el correr de los talleres y las despedidas comenzaron a acariciar ese sueño que mas de una noche los desvelo: vivir de la música. Milton Amadeo (21), Pablo Silberberg (17), Gerónimo Rauch (24), Germán Tripel (22) y Emanuel Ntaka (24), son los elegidos para seguir los pasos de sus primas hermanas las Bandana.
RGB, la productora de Gustavo Yankelevich, y la discográfica BMG, son los padres del reality show que enalteció al pop nacional. Sus dos versiones (N de R: primero por Azul TV, actual canal 9, y ahora
por TeLeFe, miercoles 22 hs.), gozaron de un parejo buen rating, y a la vez mostró vida y obra de los jovencitos pop, alimentando la ilusión de las adolescentes y haciéndolas sentir cerca de sus ídolos.Con muy pocos prejuicios y temores musicales, MILTON nos cuenta que "esperábamos ser un grupo pop y light, algo así como los Backstreet Boys argentinos, pero por suerte se dieron cuenta que la onda esa no pega con nuestra imagen, y ademas las coreografías se llevan muy mal con nosotros", a lo que TRIPA agrega "el disco nos identifica plenamente por que fusionamos todos los generos musicales y logramos sentirnos cómodos con todas las canciones".Chicas a no desesperarse, que el CD tambien cuenta con baladas y melodias melosas de esas que tanto las hacen suspirar, "no podia faltar el romance", afirma el romántico del grupo PABLO.
Los cinco guerreros ya estan listos para atacar, los espera un shopping el viernes próximo, y el 1 de Noviembre el Gran Rex, donde se agregarán funciones teniendo en cuenta el ritmo de venta de las entradas.
La historia nos suena familiar, hace un año conocíamos a las princesitas del pop local, y ahora ellos tratarán deeno perderles pisada.
La batalla ya empezó y con talento MAMBRU la enfrentará.