BASES DEL ENFOQUE INTERACCIONAL DE LA COMUNICACIÓN

 

Lic. Carlos E. Salgado

 

 

            ...“Plotino el Platónico demuestra por medio de los capullos en flor y de las hojas de los árboles que del Dios Supremo, cuya belleza es invisible e inevitable, la Providencia llega hasta las cosas de esta tierra. Señala que estos frágiles y mortales objetos no podrían estar dotados de una belleza tan inmaculada y exquisitamente forjada si no emanaran de la divinidad, que impregna infinitamente todas las cosas con su invisible e inmutable hermosura.”  

San Agustín, “La Ciudad de Dios”.

 

            ...“En Junio de 1977 pensé que tenía los comienzos de dos libros, a uno de los cuales llamé La Idea Evolutiva, y al otro Todo Escolar Sabe. El primero sería una tentativa de reexaminar las teorías de la evolución biológica a la luz  de la cibernética y de la te teoría de la información. Pero cuando empecé  a escribirlo noté que me era difícil hacerlo teniendo en mente un auditorio real, el cual, confiaba yo, entendería los presupuestos formales y por ende simples, de lo que allí decía. Se me hizo monstruosamente evidente que en este país, en Inglaterra  y, supongo, en todo el mundo occidental, la instrucción escolar se cuidaba de eludir todos los problemas decisivos, que yo tendría que escribir un segundo libro para explicar mis juicios elementales, relacionados  con la evolución y con casi cualquier otro pensamiento biológico o social -con la vida cotidiana y el desayuno que ingerimos-. La educación oficial no le decía a la gente casi nada acerca de todo lo que haría en las playas y en los bosques de secuoyas, en los desiertos y en las llanuras. Ni siquiera personas crecidas  y con hijos podían dar cuenta razonable de conceptos como entropía, sacramento, sintaxis, número, lineal, nombre, clase, relevancia, energía, reglas de las dimensiones, tipo lógico, metáfora, topología, etc.  Qué son las estrellas de mar? Qué son las mariposas? Qué son la belleza y la fealdad?”  

Gregory Bateson, “Espíritu y Naturaleza”.

 

 

 

TEMAS

INTRODUCCIÓN

TEORÍA GENERAL DE LOS SISTEMAS.

CIBERNÉTICA

TEORÍA DE LOS TIPOS LÓGICOS

TEORÍA DE LOS GRUPOS DE GALOIS

ORIENTACIÓN POR REGLAS DE LA COMUNICACIÓN

AXIOMAS DE LA COMUNICACIÓN

 

 

 

 

 

 

INTRODUCCIÓN:

 

 

He creído interesante comenzar este trabajo con una inusualmente larga cita, de uno de los autores que más influyó en la conceptualización que hoy conocemos como Pragmática de la  Comunicación.  Existen coincidencias a nivel mundial, acerca de la importancia que el pensamiento de Gregory Bateson ha tenido en diversos campos científicos.

 

La retórica de Aristóteles, la Teoría de la Información de Shannon Weaver, el modelo de la Comunicación Humana de Berlo, privilegian algún aspecto del proceso de comunicación (el mensaje, el canal, el contexto social, respectivamente). En común tienen el compartir el paradigma de la física newtoniana y la lógica aristotélica.

 

Trasladándolos al campo de estudio de la conducta y de la comunicación humana, se los ha denominado: Enfoques direccionales de la comunicación, puesto que la consideran un proceso o cadena de eventos temporalmente ordenados, que comienzan en el emisor y terminan en el receptor (gráfico 1). El concepto de causalidad implícito es lineal y unidireccional.   Las conductas del receptor son consecuencia directa de la que ha realizado el emisor. Esto es, las reacciones del receptor funcionan como una variable dependiente del comportamiento del emisor (la manipulación del emisor, mensaje o canal, constituyen la causa de la reacción del receptor). Cuando la cadena se invierte, no se modifica el proceso, continúa siendo lineal, pues las bases de dicho proceso no son de causalidad mutua, sino que cada fase sigue o precede a la otra, constituyendo una relación causal lineal, entre emisor-receptor.

 

En cambio, el nombre de Enfoque Pragmático de la Comunicación con que se popularizó el enfoque interaccional, es consecuencia del interés con que se ocupa de las consecuencias que en todos los contextos tiene la comunicación. Más  adelante podremos ver que para Gregory Bateson, conducta y comunicación pueden ser utilizados prácticamente como sinónimos. (incluso en sus últimos trabajos, demuestra que las reglas que regulan el proceso comunicacional, se hacen extensivas a los fenómenos de actitudes y valores).  Desde una perspectiva pragmática todo comportamiento (habla, gestos, movimientos), constituyen elementos del fenómeno comunicacional, haciéndose extensivo incluso a contextos impersonales que afectan el comportamiento.

 

No se ocupa solamente del efecto que la comunicación tiene sobre el receptor, sino que incluye y considera inseparable, a su vez, el efecto que la reacción del receptor tiene sobre el emisor (gráfico 2). Su interés se encuentra en el estudio de las relaciones emisor/receptor, que se establecen por medio de la comunicación.

 

Del mismo modo que hablamos para referirnos a los Enfoques  Direccionales de su Paradigma, diremos que este enfoque se desarrolla a partir del Paradigma de la Física Relativista.

 

Así como toda la Física Newtoniana se construye en base del supuesto de que el espacio y el  tiempo serán considerados constantes, y todos los cimientos  de dichas construcciones teóricas (que permitieron importantes avances tecnológicos), descansarán sobre dichos conceptos, la idea Einstenieana de la variable espacio-temporal, cuestionará dicha enunciación.

 

Existen diversas consecuencias de dichas enunciaciones. Quizás la más importante para nuestro estudio, sea la que conceptualiza la idea central de que aquello sobre lo cual estamos tratando no trata más de objetos, como en la física tradicional, sino de relacione, y que la tarea consistirá entones, en la búsqueda y establecimiento de pautas y procesos subyacentes a las estructuras.. de los fenómenos con los que se está tratando.  Declara Gregory Bateson que las relaciones deberán constituir la base de toda definición, y su objetivo principal será descubrir los principios de  organización en todos los fenómenos observados: descubrir la pauta que conecta.

 

Se rechazará también el enfoque de la lógica aristotélica, por considerarla inadecuada para la descripción de pautas biológicas. La lógica se puede utilizar con mucha elegancia para describir sistemas lineales de causa /efecto, pero cuando las secuencias causales se convierten en circulares, como ocurre en el mundo viviente, su descripción en términos lógicos genera paradojas (eventualmente esto sucede en casos de sistemas no vivientes, como el termostato, dotados  de mecanismos de retro-acción). Según Bateson, esto sucede porque se introduce el tiempo (la lógica es atemporal).

 

Diremos que de acuerdo con esta visión, al introducir el tiempo, la paradoja resultará una oscilación.

 

Se trata entonces, de una concepción que incorpora los conceptos de tiempo, cambio y fluctuación como elementos esenciales, enfatizando sobre  la naturaleza dinámica de la realidad.

 

Dijimos párrafos más arriba, que este enfoque se sustenta  desde el Paradigma de la Física Relativista. Pero encuentra además en otras disciplinas los elementos fundamentales que permitirán su desarrollo.

 

A continuación haremos un breve desarrollo de las teorías que explícitamente más elementos conceptuales aproximaron a la Teoría Interaccional de la Comunicación.

 

 

·       Teoría General de los Sistemas. Cibernética.

·       Teoría de los Tipos Lógicos de B. Russell.

·       Teoría de Galois.

·       Orientación por Reglas de la Comunicación.

 

 

 

Gráfico 1

 

 

 

 

Gráfico 2

 

 


 

 

 

 

TEORÍA GENERAL DE LOS SISTEMAS. CIBERNÉTICA.

 

 

Desarrollada por Ludwig Von Bertalanffy y otros. Se describe como la formulación y derivación de principios que son válidos para los sistemas en general.

 

A continuación detallamos algunos de los conceptos básicos:

 

                a. Un sistema es un conjunto de objetos así como de relaciones entre los objetos y sus atributos.  para el caso de un sistema interaccional de dos o más comunicantes, en el proceso de  definir la naturaleza de su relación. La variable tiempo está implícita, y es la que le otorga a los sistemas su condición de proceso.

 

                b. Como medio de definir al conjunto de todos los objetos cuyos atributos al cambiar,  afectan al sistema, y también a aquellos objetos cuyos atributos son modificados por el comportamiento del sistema.

 

                c. Los sistemas son abiertos, y se hallan ordenados en una jerarquía. El caso de un sistema comunicacional de dos miembros que participan de otro sistema mayor (su comunidad idiomática).

 

                d. Totalidad. Un sistema se comporta como un todo indivisible y coherente. Lo que le sucede a una parte afecta al todo. La totalidad  (gestalt) es más de la suma de las partes. Las cualidades y características del todo, no se explican por la suma de las partes.

Si trasladamos esta condición a la comunicación humana, diremos que se debe  considerar un contexto sistémico, y no tratarlo como un asunto explicable por atributos individuales.

Este principio tuvo importantes aplicaciones en Terapias, y determinó el desarrollo de una línea llamada Terapia Familiar Sistémica.

 

                e.  Los sistemas se caracterizan por su causalidad circular. Esta es posible gracias al mecanismo de control esencial de los sistemas: la retroalimentación. Nos referimos al flujo circular de información que vuelve a introducirse en el sistema, para informarle del efecto de sus acciones anteriores, con el objeto que pueda controlar y corregir sus acciones futuras logrando el objetivo establecido.

Un buen ejemplo de esto  lo es, el termostato, que informa al sistema (de acondicionamiento térmico), si llegó a la temperatura definida como meta (para entonces apagarse). O por el contrario, si la temperatura existente traspuso el umbral (y entonces, apagarse).Esto es,  el sistema funciona en forma circular, por lo que puede operar autocorrectivamente. Dicha retroalimentación podrá ser negativa (se utiliza para corregir y disminuir la desviación de la salida con respecto de la norma establecida). Es fundamental para el mantenimiento de la estabilidad. Retroalimentación positiva, con la que la información actúa acentuando la desviación, llevando  entonces a un cambio.

 

Estos conceptos nos llevan a otro de gran utilidad para la comprensión del funcionamiento de los sistemas, como lo es el de homeostasis (tiene que ver con la estabilidad del sistema, a pesar de los cambios del mundo externo, y el equilibrio y sus fluctuaciones, del medio interno.

 

                f. Equifinalidad. Será la última de las características de los sistemas que describiremos. Su enunciación es muy simple y revolucionaria. Se refiere a que estados finales idénticos podrán ser alcanzados desde condiciones iniciales diferentes, y a través de distintas vías de desarrollo.  La gran importancia de este concepto radica en que es posible explicar el comportamiento de un sistema dado, por el estado actual en el que se encuentra.

Referencias explicativas que incluyen datos del pasado (mediato o inmediato), resultan innecesarias. Estos conceptos tienen gran importancia en la psicología anclada hasta ese momento en referencias y justificaciones teológicas, para la compresión de la conducta humana. Según esto, la compresión de la conducta actual de una persona podrá hacerse a partir de la configuración actual de sus interacciones (inter e intrapersonales), clave  no siempre suficientemente ponderada, sin necesitar acudir a términos como inconsciente.  El trabajo consecuentemente deberá centrarse en la atención a las entradas y salidas a que está expuesto el sistema, y en la participación de ese sistema dentro de otro sistema más amplio, de la que forma parte. Las consecuencias pragmáticas  que el concepto  de Equifinalidad tuvo en el modelo terapéutico que propuso el Enfoque Interaccional, resultaron de gran valor, teórico y técnico,  y decidieron que las intervenciones en el equipo terapéutico se realizarían en función del complejo de interacciones presentes, que resultaba posible observar de las acciones (por ej. de un sistema familiar presente, el aspecto central o tarea principal sería establecer las pautas o patrones comunicacionales de esas interacciones).  Atendiendo especialmente al cómo, para qué  de ese comportamiento dentro del sistema interaccional: pareja, familia, etc.

 

 

 

CIBERNÉTICA

 

Nada hemos dicho hasta ahora de la Cibernética.

Constituye la teoría de la  transición de la información y del control de los sistemas, desarrollada por Norbert Wiener en la década del cuarenta.

El mecanismo básico: la retroalimentación. Se utilizará para controlar la acción de modo que resulte eficaz.

Las analogías entre el comportamiento de las máquinas inteligentes y particularmente el cerebro humano, resultan por demás importantes. Incluso diversos  temas de estudio resultan importantes tanto para teóricos e investigadores del Sistema Nervioso Central, como de las Computadoras y de los fenómenos de transmisión de la información.

Los adelantos y descubrimientos en cualquiera de esos campos inmediatamente influyen sobre los demás. Como un buen ejemplo de esto podríamos mencionar: codificación, información (su naturaleza multiplicativa).

Todos los desarrollos de las Ciencias Cognitivas se dedican específicamente al estudio de esas coincidencias, y la mutua utilidad de los respectivos avances, refuerza  estos progresos.

Inteligencia Artificial, Neurociencia, Lingüistica, Filosofía y Psicología resultan campos conceptuales y técnicos próximos.

 


 

 

 

TEORÍA DE LOS TIPOS LÓGICOS

 

 

“Los especialistas en cualquier tipo de ciencia de la conducta tienen que ver con el aprendizaje en un sentido u otro de la palabra. Además, como aprendizaje es un fenómeno comunicacional, todos estos especialistas se han visto afectados por la revolución cibernética. Esta revolución fue iniciada por los ingenieros y teóricos de la comunicación, pero sus raíces más antiguas se encuentran en el trabajo fisiológico de Cannon y Claude Bernard, en la física de Clarke Maxwel y en la filosofía matemática de Russelly Whitehead. En la medida en que los especialistas sigan ignorando los problemas planteados en los  Principia Mathemática pueden considerar que sus conocimientos tienen una obsolescencia de aproximadamente 60 años.

 

Pareciera sin embargo, que las barreras de incomprensión que dividen a las diversas clases de especialistas en ciencias de la conducta pueden ser iluminadas (pero no eliminadas) mediante una aplicación de la Teoría de los Tipos Lógicos, de Russell, al concepto de aprendizaje, que a todos nosotros nos concierne”.

Gregory Bateson, “Pasos para una Ecología de la Mente”.

 

 

Como se destaca claramente de las palabras de Greogory Bateson, dicha teoría constituye uno de los  principios fundamentales, paradigmáticos, desde donde se construirá la Teoría Interaccional de la Comunicación.

 

 

La Teoría de los Tipos Lógicos se ocupa de temas que frecuentemente para todos aquellos especialistas  o estudiosos que se encuentran al margen delos estudios de lógica/matemática, miran desde la  distancia, con una cuota de temor (y malos recuerdos de experiencias, más o menos frustrantes en el secundario), seguros de la importancia de todos estos temas, pero serenos al saber que otros individuos (probablemente de otra raza) se están ocupando.

 

Los enunciados en cuestión resultan por lo demás de gran simplicidad. Sus consecuencias sin embargo, de máxima trascendencia.

 

Dice:

 

ninguna clase, en un discurso formal lógico o matemático, puede ser miembro de sí misma; que una clase de clases no puede ser una de las clases que son sus miembros; que un nombre no es la cosa nombrada.

 

Estas afirmaciones parecen triviales, incluso obvias, pero las consecuencias que los científicos de las ciencias de la conducta cometan errores que corresponden precisamente análogos al error de clasificar al nombre junto con la cosa nombrada, tiene importantes consecuencias. Constituyen lo que llamaremos un error en la asignación de los tipos lógicos. Equivale a comerse el Menú en lugar de la cena.

 

 

 

Definiremos una clase, como aquello que representa la totalidad de objetos unidos por una propiedad o característica común, y los miembros, como los componentes de dicha totalidad.

 

Más compleja resulta la afirmación: que una clase de clases no puede ser uno de los ítems clasificados correctamente como sus miembros. Si clasificamos juntas las sillas para formar la clase de las sillas podemos pasar a comentar que las mesas y bancos son miembros de una clase más amplia de “no sillas 

Pero cometeremos un error en el discurso formal si contamos la clase de las sillas entre los ítems que están dentro de la clase de no-sillas.

 

Pues, en tanto que ninguna clase puede ser miembro de sí misma, la clase de no-sillas evidentemente, no puede ser una no-silla.

 

Aunque no se tenga una formación matemática importante, podemos darnos cuenta de que:

 

                1. la clase de las sillas es del mismo orden de abstracción (o sea, del mismo tipo lógico), que la clase de no-sillas. Entonces:

 

                2. si la clase de sillas no es una silla, entonces  correspondientemente, la clase de las no-sillas no es una no-silla.

 

                3. Aclarará esto decir que, una clase no puede ser miembro de sí misma, ni un miembro de la clase puede ser él mismo la clase. Pues existe una discontinuidad conceptual (nivel de abstracción) entre la clase y sus miembros.

 

La clase incluye a los miembros, pero no puede incluirse a sí misma. Ejemplo de esto sería decir que la clase de los perros no puede ser en sí misma un perro. Como concepto de un nivel  de abstracción superior, que incluya a la clase de los perros podríamos enunciar a la clase de los animales. Que su vez, puede incluir la clase de los perros, gatos, tortugas, aves, etc. De allí que la  mencionamos como de un tipo lógico superior, o de mayor nivel de abstracción.

 

Descuidar esta importante diferencia, entre clase y miembro, y adjudicar incorrectamente una propiedad particular de los miembros a la clase (o viceversa) constituye un error de triplicación lógica que genera paradojas.

 

Definiremos paradoja como una contradicción que resulta de una deducción correcta a partir de premisas congruentes (B. Russell).

 

La Teoría de los Tipos Lógicos dio solución a la paradoja de la  clase de clases o paradoja de Russell.

 

Consideremos que todas las clases que son miembros de sí mismas, pueden ser reunidas en una nueva y única clase llamada A, y todas las clases que no son miembros de sí misma en la clase B. La pregunta es: la clase B, es o no miembro de sí misma? Entonces, precisamente, es miembro de sí misma, por no ser miembro de sí misma.

 

Como vemos, esto no es simplemente una contradicción, sino que estamos en presencia de una auténtica paradoja: B es miembro de sí  misma, si y sólo si no es miembro de sí misma, y viceversa.  Configurando entonces una regresión infinita. En otras palabras decir por ej. “estoy mintiendo”.

 

La Teoría de los Tipos Lógicos no se ocupa de los que sucede en el interior de una clase (o sea, de sus miembros), sino que proporciona un modelo para la relación existente entre miembro y clase, y los cambios que se generan al pasar de un nivel lógico al otro inmediatamente superior.

 

Cuando el cambio altera a los miembros del sistema, al interior del mismo, se lo denomina Cambio tipo 1, esto es cuando en un sistema dado las transformaciones que suceden, son de orden cuantitativo, que no cambian la naturaliza de ese sistema, que a pesar de sus transformaciones permanece igual a sí mismo, respetando la que ha sido hasta ahora su naturaleza.

 

El soñar mientras se duerme, permite eventualmente, para el protagonista, darse cuenta que lo que está viviendo ocurre al interior de ese estado  que llamamos soñar.  Puede incluso proponerse cambios dentro del sueño, los que serían precisamente del tipo Cambio !.

 

Pero si el soñante quisiera salirse de ese estado y entrar en el de vigilia, esto es despertar, como ese despertar no puede construir parte del sueño, pues sería un cambio de estado del sistema, estaríamos precisamente frente a un cambio de tipo lógico. Un cambio de orden, en este caso se  denomina Cambio de tipo 2. Y resulta fundamental  por ejemplo en el caso de los tratamientos de psicoterapia. Sin embargo, no nos extenderemos por ahora en sus consecuencias.

 

Como vimos la Teoría de los Tipos Lógicos se ocupa de cuestiones sumamente abstractas. Se la concibió para el mundo de la lógica. En él, cuando se puede demostrar que una serie de proposiciones genera una paradoja, toda la estructura de axiomas, teoremas, etc. que participa de la generación de la paradoja, quedan inmediatamente negados, reducidos a nada.  Sin embargo, en el mundo real (o al menos, en las construcciones que hacemos de él) nada puede ser negado de esa manera tan fácil.

 


 

 

 

TEORÍA DE LOS GRUPOS DE GALOIS

 

 

Enunciada por Ecarist Galois en el siglo XIX, se refiere a las leyes de composición que deben satisfacer un conjunto de elementos  (por ej. números, conceptos, eventos, etc.), para ser considerados un grupo.

 

Los postulados iniciales concernientes a las relaciones entre los miembros y la totalidad, son sencillos, sus consecuencias han trascendido las fronteras de la lógica a otras disciplinas.

 

Su enunciado es el siguiente:

 

                1. Invarianza. Se refiere a que cualquier combinación de dos o más elementos entre sí, da como resultado otro miembro del grupo. Esta propiedad permite una infinitud de combinaciones, ordenaciones y cambios al interior del grupo, sin que la estructura de este se vea alterada. Por ej. si tenemos el conjunto de los números naturales y la suma como ley de composición, la invarianza se refiere a que cualesquiera que fueran los números combinados entre sí, el resultado también será otro número natural: 5+2 = 7.

 

                2. Combinación. Todos los miembros del grupo pueden ser combinados en distinto orden y, sin embargo, el resultado de la combinación sigue siendo el mismo. El orden de los elementos no altera el producto. Ej.: 5+2+7 = 7+5+2.

 

                3. Identidad. Todo grupo tiene un miembro de identidad tal, que al combinarlo con cualquier otro miembro del grupo se mantiene la identidad de este último. Ej.: en la operación suma, en el conjunto de los números naturales, el miembro de identidad es 0: pues 3+0 = 3.  Para el caso de la ley de composición de la multiplicación dicho miembro es 1, pues 3 X 1 = 3.

Lo esencial de esta propiedad consiste en que un miembro puede actuar sin  provocar cambio alguno. Se la considera un caso especial de la invarianza.

 

                4. Inverso. Esta propiedad se refiere a que cada miembro del grupo tiene su opuesto, de tal modo que al combinar cualquier miembro del grupo con su opuesto, se obtiene como resultado el miembro de identidad. De esta manera cuando la ley de composición es la suma y los elementos son los números, el miembro inverso de un número es su negativo. Ej.: 2+(-2) = 0.  Para la ley de la multiplicación: 4 X 1 / 4 = 1.

 

A partir de las propiedades enunciadas se desprende una serie de implicaciones teóricas y prácticas. Lo que probablemente nos interese más a los que trabajamos en comunicaciones, corresponde con el postulado principal de la Teoría de Galois: se pueden verificar cambios al interior del grupo sin que se altere su naturaleza.  Esto es precisamente de lo que hablamos  párrafos más arriba al referirnos a Cambios Tipo 1, y que ejemplificamos a través del soñar.

Por el contrario, cuando hablamos de hacer cambios en los parámetros del sistema (en su orden interno), hemos hablado de Cambios Tipo 2.

 

Una de las consecuencias más importantes que podemos encontrar en relación con el funcionamiento de los sistemas, se puede vincular con el principio de invarianza. Por ej. una pareja o una familia, puede experimentar importantes cambios al interior de sí misma, sin que por ello varíe su estructura interna (estructura del poder por ejemplo). En general, cuando las personas se proponen a sí mismas cambios importantes en su funcionamiento, podemos destacar que, o bien dichos cambios siempre le permiten conservarse básicamente idénticos a sí mismos, o bien los procedimientos que eligen inexorablemente los mantienen dentro de la lógica de dicho sistema. Watzlawick trabaja con estos principios de manera por demás interesante.

 


 

 

 

ORIENTACIÓN POR REGLAS DE LA COMUNICACIÓN

 

 

Quizás el concepto central, revolucionario en el momento de ser enunciado, se refiera a la  existencia de diferentes aspectos en la comunicación:

 

                aspecto referencial  o de contenido, que es aquel que trasmite información acerca de los objetos, hechos, contenidos, experiencias, etc. , y corresponde a lo que llamaremos el contenido del mensaje, por ejemplo “hoy está lloviendo”.

 

                aspecto relacional o conativo, que se refiere a aquella instrucción implícita en todo mensaje que indica cómo debe ser comprendida dicha información. Define la naturaleza de la información entre los comunicantes. En el ejemplo anterior al decir “hoy está lloviendo”, dicho de esa manera, debes percibirme como un amigo o enemigo.

 

En general se acepta que el aspecto relacional clasifica y califica al aspecto referencial, y corresponde con otro tipo lógico,. Es por lo tanto una metacomunicación.

 

En toda comunicación los participantes buscan determinar la naturaleza de su relación, intercambiando definiciones mutuas de dicha relación. Esto es tan importante que no puede ser librado al azar.

 

La descripción de dichas reglas corresponde a lo que llamamos Axiomas de la Comunicación. El enunciar este conjunto de reglas nos coloca frente a una dificultad insuperable hasta el momento: poseemos un sólo lenguaje para describir tanto la comunicación, como la metacomunicación.  Puesto que ambos son conceptos de distinto nivel de abstracción (tipo lógico) esta situación presenta todos los ingredientes necesarios para generar todo tipo de paradoja.

 


 

 

 

AXIOMAS DE LA COMUNICACIÓN

 

 

El Enfoque interaccional definió tentativamente cinco axiomas fundamentales de la comunicación en virtud de sus importantes consecuencias pragmáticas, en cualquier situación personal.

 

La comunicación como sistema no debe entenderse sobre las bases de un simple modelo de acción y reacción, por compleja que sea su fórmula. Como sistema debe entenderse a  nivel transaccional.

 

La descripción y análisis de estos axiomas se centra en la comunicación diádica entre personas, en la cual las claves intercambiadas emanan directamente del cuerpo (movimientos, gestos, postura), el habla (verbalizaciones), la voz (tono, volumen, tempo, etc.) y el contexto inmediato (situación física, social, cultural, etc.). Sin embargo, queda abierta la posibilidad de una transpolación cuidadosa de estos axiomas a los fenómenos de la comunicación intrapersonal (diálogos internos), la comunicación animal o la comunicación social.

 

Dichos axiomas son los siguientes:

 

·       Imposibilidad de no comunicar.

·       Niveles de contenido y de relación.

·       Comunicación analógica y digital.

·       Puntuación de la secuencia de hechos.

·       Interacción simétrica y complementaria.

 

 

 

La imposibilidad de no comunicar

 

 

Este axioma se deriva necesariamente de una propiedad básica del comportamiento, esto es, no hay algo que sea lo contrario de comportamiento, no existe el no comportamiento,  y por lo tanto es imposible no comportarse, moverse o quedarse quieto, hablar o permanecer callado, sonreír o mostrarse inmutable, presentarse a una sita o no, retirarse de una situación, etc. Además, el no hacer, no decir, no gesticular, también constituyen formas de comportamiento.

 

Si se acepta que todo comportamiento en una situación de interacción tiene un valor comunicativo, entonces no se puede dejar de comunicar, aún cuando se intente. En una situación interpersonal todo comportamiento influye sobre los demás, les comunica algún mensaje, y éstos no pueden dejar de responder a tales mensajes comportándose y comunicándose a su vez.

 

 

Los niveles de contenido y de relación de la comunicación

 

La comunicación opera siempre a diferentes niveles de abstracción. En caso de la comunicación verbal, por ej. es posible describir un nivel denotativo simple que es sinónimo del contenido explícito del mensaje. En el siguiente mensaje: “las llaves están sobre la mesa”, el nivel denotativo alude a la ubicación de dichas llaves dentro de todas sus ubicaciones posibles.  A este aspecto de la comunicación que transmite información mediante la codificación de los fenómenos se le ha denominado el aspecto referencia o de contenido de la comunicación.

 

En otro nivel de abstracción se incluyen todos aquellos mensajes implícitos o explícitos acerca de la codificación lingüística realizada al enviar el mensaje. A este, se le denomina el nivel metalingüistico (meta: más allá), y corresponde a la semántica y sintaxis del lenguaje, por ej.: el sonido verbal llave representa un miembro de una clase tal de objetos, la palabra llave no puede abrir cerraduras.

 

Asimismo, es posible describir otro nivel de abstracción en el que se incluye todo mensaje implícito o explícito acerca de la relación que se establece entre los hablantes al intercambiar el mensaje descrito. A este nivel se le denomina metacomunicación o comunicación acerca de la comunicación. Por ej.: el hechos de decirle dónde estaban las llaves fue amistoso.

 

La metacomunicación se refiere, entonces a cómo debe ser entendido el mensaje. De aquí que también sea denominado el aspecto conativo o relacional de la comunicación.

 

Existe además, otro nivel de abstracción representado por el contexto en el cual se intercambian los mensajes metacomunicativos. Este contexto indica cómo deben ser interpretados dichos mensajes, y corresponde por lo tanto a un nivel metacomunicativo.

 

 

Comunicación digital y analógica

 

Existen dos modos básicos de comunicación humana que es necesario distinguir. Estos son: la comunicación analógica y la comunicación digital.

 

La comunicación analógica es aquel tipo de comunicación en la cual los objetos y eventos del mundo son expresados mediante un símil, una semejanza o analogía que contiene una estructura similar al objeto representado. Es decir, en la comunicación analógica se conservan y repiten de alguna manera las relaciones formales del fenómeno representado; siempre existe algo particularmente similar entre el referente y la expresión que se emplea para comunicarlo.

 

Este es el caso de una mesa, por ejemplo y el dibujo de una mesa. Ese dibujo constituye una expresión analógica de una mesa, que nos permitirá reconocerla como tal, aún cuando no haya ninguna mesa presente. Lo mismo vale para una representación mímica. Las analogías son en cierta forma autoexplicativas.

 

En la comunicación digital, en cambio, el objeto o evento es expresado mediante un conjunto de signos arbitrarios que no guardan ninguna semejanza estructural con dicho objeto o evento. El caso típico de la comunicación digital lo constituye el lenguaje, en el cual las palabras poseen una relación arbitraria con el objeto que se refieren. Por ej. no existe nada particularmente similar a una mesa en la palabra mesa. La única condición necesaria es que las personas que se comunican compartan el mismo código (idioma) para poder entenderse.

 

 

Puntuación de la secuencia de hechos

 

Desde el punto de vista de un observador externo, la secuencia de mensajes intercambiados entre dos comunicantes, puede ser considerada como una secuencia ininterrumpida de interacciones. Es decir, se trata de una secuencia de intercambios en las que el comportamiento de cada uno de los participantes es inducido por, e induce a la vez, el comportamiento de los demás. Sin embargo, quienes participan en la interacción necesariamente puntúan la secuencia de hechos arbitrariamente. En una prolongada secuencia de intercambios los sujetos participantes inevitablemente puntúan  la secuencia de comportamientos (o mensajes intercambiados), percibiendo a uno de los participantes como actor o estímulo, y al otro como reactor o respuesta.

De tal modo, desde la perspectiva de uno de ellos, el otro, es percibido como quien tiene la iniciativa. Desde afuera, cada interacción puede ser considerada simultáneamente, un estímulo, una respuesta y un esfuerzo.

 

Dicha puntuación  permite a los participantes establecer entre ellos ciertos patrones de intercambio, que les permitirían organizar sus comportamientos y los de los demás.

 

Resulta evidente que no existe una única manera de puntuar las interacciones, sino por lo contrario existirían tantas formas de puntuar las secuencias, como personas comprometidas en la comunicación. Frecuentemente las diferencias en la puntuación de los hechos, determinan la existencia de conflictos. En ellos, cuando se trata de reconstruir los puntos originarios de los desencuentros, habitualmente pareciera que las personas participaron de experiencias distintas; podríamos decir, “fueron al mismo cine, pero vieron diferentes películas”.

 

 

Interacción simétrica y/o complementaria

 

Una relación simétrica es aquella en que sus integrantes intercambian el mismo tipo de comportamiento. Uno o el otro pueden indistintamente, tomar decisiones, criticar, comentar la conducta del otro, dar otras alternativas, etc. Los miembros de este tipo de relaciones tienden a acentuar su igualdad.  Este tipo de relación es frecuente entre compañeros, de trabajo, de colegio, hermanos, etc.

 

Una relación complementaria, es aquella en la que uno de los miembros se halla en posición superior, y el otro en posición inferior.

Mientras que la relación complementaria se basa en un máximo de diferencia entre los comportamientos de sus miembros, las relaciones simétricas se basan en la igualdad (o mínima diferencia), de comportamiento.

 

Estas modalidades son fácilmente observables si atendemos a:

- el contenido de las comunicaciones

- las frecuencias

- la utilización de claves de interacción,, etc.