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Orestes
El espectáculo en un
acto que aplaudieron en Europa 10.000 personas.
Con la participación especial de Julia Zenko, Carlos Vittori, Susanna Moncayo,
Rodolfo Valss y Carlos Rivarola.
Sexteto de tango dirigido por Diego Vila.
Coreografía de Oscar Araiz.
Únicas cinco funciones: Jueves 18,
Domingo 21, Viernes 26, Sábado 27 y Domingo 28 de septiembre en el Teatro
Avenida (Av. de Mayo 1222, Buenos Aires).
BUENOS AIRES, Septiembre 2003.- El éxito europeo de 2002 por fin llega a Buenos
Aires.
Buenos Aires Lírica, la nueva asociación de ópera de Buenos Aires, presenta en
cinco únicas funciones, "ORESTES" en Argentina, la ópera tango con textos de
Betty Gambartes y música de Diego Vila, basada en la obra teatral "El reñidero"
de Sergio De Cecco.
"ORESTES" reúne voces populares con voces de la lírica; un antiguo mito que
retorna ahora en un ambiente de arrabal, con una puesta de nuestra época,
también a cargo de Betty Gambartes, y la deslumbrante coreografía de Oscar Araiz.
Los papeles protagónicos están a cargo de Julia Zenko, Carlos Vittori, Susanna
Moncayo, Rodolfo Valss y Carlos Rivarola. El sexteto de tango cuenta con la
dirección de Diego Vila.
CINCO ÚNICAS FUNCIONES: DIAS y
HORARIOS:
Jueves 18 de septiembre, 20.00 horas
Domingo 21 de septiembre, 18.00 horas
Viernes 26 y sábado 27, 20.00 horas
Domingo 28, 18.00 horas
SALA: Teatro Avenida (Av. de Mayo
1222, Buenos Aires).
TICKETS: Desde $ 5 hasta $70. En venta en el Teatro Avenida (Tel. 4381-0662)
INFORMACIÓN: Buenos Aires Lírica, Tel. 4812-6369, www.balirica.org.ar , info@balirica.org.ar.
Visite "ORESTES" en Internet: www.opera-tango.com
SINOPSIS
Personajes:
Elena, hija de Morales: JULIA ZENKO
Orestes, hijo de Morales: CARLOS VITTORI
Nélida, mujer de Morales: SUSANNA MONCAYO
Soriano, hombre de confianza de Morales y amante de Nélida: RODOLFO VALSS.
Morales, guapo de Palermo: CARLOS RIVAROLA.
Vicente, amigo de Orestes: JORGE NOLASCO.
La mujer de la Milonga alter ego de Morales: GIULIANA ROSSETTI.
Milongueros, el barrio, el malevaje, hombres y mujeres de la milonga.
Los personajes de esta obra están situados en un período de transición de la
historia argentina y en un arrabal porteño. Es el mundo pintoresco de los guapos
y el malevaje, donde domina el más fuerte, el más diestro en el manejo del
cuchillo y del hembraje. Allí se rinde culto al coraje y al hombre que se impone
tanto en la pelea como en el baile. En este ambiente de guapos las relaciones se
establecen mediante rígidos códigos de honor que no excluyen la intolerancia y
la violencia y que obligan a estar siempre listos para el duelo. Rehusar la
provocación sería una deshonra.
Morales toma cuerpo para encarnar el mito del guapo y cobra vida en los
raccontos de Elena para afirmar la nostalgia por el malevaje y sus aspectos
positivos mientras que en el recuerdo de su mujer Nélida representa los costados
negativos de ese mismo ambiente.
La dramatización se produce cuando ambos mundos se enfrentan. Nélida y Vicente
aspiran a una convivencia pacífica en una tácita condena a la provocación y a la
justicia por mano propia y se oponen a los códigos de ese círculo de cólera y
sangre representado por el reñidero.
Y es a través de Orestes, el hijo, que el tema se desplaza hacia el verdadero
nudo dramático: el cambio de perspectiva socio-política y la desmistificación
del guapo.
Orestes hijo de Morales, se encuentra atado a los códigos del padre pero sin
convicción personal. Busca en él la afirmación de su propia imagen. Su
sometimiento es patético cuando desea vencer la indiferencia de su padre y
lograr su cariño y respeto. Impulsado por esta necesidad y para ganar su
admiración, comete un asesinato.
Durante el velatorio de Morales reaparece Orestes y se reanima la desmesurada
sed de venganza de Elena, quien acusa a Nélida y a Soriano, su amante, como
responsables de esta muerte. Obsesionada por vengar la muerte de su padre,
presiona a Orestes para que sea su ejecutor. Orestes es la víctima de choque de
éstos dos mundos en contraposición.
La ligazón afectiva fortísima que lo une a la madre y la amistad fraterna de
Vicente, darán lugar a otros raccontos esclarecedores y desmitificadores de la
figura de Pancho Morales.
Orestes debe decidir entre cumplir la venganza, según los códigos de honor y
coraje propios del mundo paterno o escuchar su propio deseo: el del hombre que
no quiere matar.
FICHA TÉCNICA
. Coreografía: Oscar Araiz
. Música y Dirección Musical: Diego Vila
. Libro y Dirección General: Betty Gambartes
. Diseño de vestuario: Mini Zuccheri
. Diseño de Iluminación: Roberto Traferri
. Producción Ejecutiva: Ricardo Klapwijk
. Intérpretes: Julia Zenko, Carlos Vittori, Susanna Moncayo, Rodolfo Valss y
Carlos Rivarola
. Duración del espectáculo: 1 hora 45 minutos – Sin intervalo
EXTRACTOS DE LA CRÍTICA
"La ópera tango que triunfó en Europa. Acaba de finalizar la gira de Orestes,
último tango por Holanda y Bélgica. La prensa elogió el musical que tiene
coreografía de Oscar Araiz". (CLARÍN, Buenos Aires, 10 de abril de 2002)
"Orestes: impresionante teatro-total... la música es fantástica... las
coreografías son tan expresivas que parece que el propio ojo no alcanza a
verlas. El baile es suave, con gracia, fuertemente expresivo e hipersensual..."
(HET LEIDSCH DAGBLAD, Leiden, 4 de abril de 2002)
"Orestes se muestra aquí como debe ser: impactante y pasional. Julia Zenko es
fuerte y convence. La danza, provocativa, virtuosa, con música de tango, milonga
y candombe. Una obra típica de Argentina..." (DE HAAGSCHE COURANT, La Haya, 25
de marzo de 2002)
"Pasión del sur en ‘Orestes’, una ópera de tango apasionante y accesible. Tango
en todas sus facetas. Juego, exprensión, contención, tensión y sutileza. Los
bailarines se mueven con facilidad, envolviéndose unos a otros. Canto y danza se
expresan con pasión..." (HET ROTTERDAMS DAGBLAD, Rotterdam, 23 de marzo de 2002)
"Las emociones cobran un gran lugar en el libreto de esta ópera tango, en la
cual el corazón está puesto enteramente en las palabras... muy buen bailadas,
llenas de tensión. Los bailarines se lucen mediante movimientos virtuosos de las
piernas. Diego Vila mezcla los colores de las arias italianas con el tono oscuro
del tango..." (DE VOLKSKRANT, 25 de marzo de 2002)
"El principio de la obra es muy fuerte y logrado. Bailarines y cantante
realmente dominan el escenario con toda perfección. La orquesta compuesta por
seis músicos hace maravillas, bajo la dirección del pianista y compositor Diego
Vila se logra un fuerte apoyo de la acción, contribuyendo a realzarla..." (ZWOLSCHE
COURANT Zwolle, 2 de abril de 2002)
"La forma como fue realizado el baile crudo, la danza de entrega, el baile de la
muerte, con gran desenvoltura y fuerza artística, conquistó al público, que
disfrutó de una actuación sin pausa y sin descanso". (DE STEM, Breda, 4 de abril
de 2002).
Música de Orestes: En Europa fue editado el CD de Orestes por PAN Records y
próximamente se editará en Argentina un nuevo CD por EPSA Music.
El Principito
Con
espectaculares imágenes filmadas y proyectadas por dos pantallas de 10m.
x 4m. que funcionan a los largo del espectáculo interactuando con los
actores.
Escenas, canciones y coreografías se alternan en un recorrido vertiginoso
por la historia de un niño maravilloso y su viaje de aprendizaje entre
singulares personajes
Una puesta única y original de gran impacto visual con efectos especiales en
vivo como la entrada de un avión a escena, 50 luces móviles de última
generación y efectos de pirotecnia
Localidades a la venta con 15% de descuento con tarjeta exclusiva VISA Y
VISA ELECTRÓN
Puntos de venta
Ticketmaster llamando al 4321-9700, en locales Musimundo (Florida 665 y
Cabildo 1873) y en el teatro
Precios de las localidades
Platea Preferencial $
40.-
Platea Común 1 $ 35.-
Platea Común 2 $ 30.-
Platea Alta $ 35.-
Super Pullman $ 25.-
Pullman 1 $ 20.-
Pullman 2 $ 15.-
Pullman 3 $ 10.-
El elenco
El Principito: Sebastián
Francini
El Aviador: Juan Carlos
Baglietto
La Serpiente: Patricia Sosa
El Zorro: Roberto Catarineu
El Astrónomo y El Borracho:
Carlos March
El Hombre de Negocios: Omar
Pini
El Rey: Rodolfo Valss
La Flor: Florencia Otero
El Vanidoso: Alejandro Paker
Ensamble
Valeria Archimaut
Ana Azcurra
Maria Laura Cattalini
Analia González
Maria Gabriela Lavagnino
Andrea Surdo
Miguel Brandan
Héctor Hernández
Alejandro Lavallén
Federico Lynch
Martin Marín
Gisella Lachaise
Brian Vainberg
Dirección
Eduardo Gondell
Dirección musical
Eduardo Frigerio
Direccion de coreografia
Hugo Gómez
El Principito
Este musical también fue concebido, como se lo propuso Antoine de
Saint-Exupéry, pensando en los niños y en aquellos adultos que no quieren
olvidar el niño que fueron. Y todos los que participaron en esta adaptación
saben, que más allá de los efectos escénicos, la sorprendente tecnología de
nuestro tiempo, detrás de las imágenes más sorprendentes y el esfuerzo de
cada uno de los miembros del elenco por dar lo mejor de sí, lo único
importante es transmitir aquello que no podemos ver y es esencial para
nuestra vida.
Desde su publicación en 1943, El Principito de Antoine de Saint-Exupéry, fue
considerado por la crítica y los millones de lectores que gozaron de esta
historia, un texto que trasciende lo infantil, y aborda cuestiones humanas
mucho más importantes y adultas de lo que una primera y rápida lectura
supone. Esta doble condición, convirtió a la obra en un desafío creativo a
la hora de adaptarla tanto al teatro.
En esta adaptación de El Principito se propuso realizar un espectáculo de
gran impacto visual, sorpresa, magia y efectos especiales, dirigido a toda
la familia cuidando especialmente de preservar el espíritu poético de este
clásico.
Sobrevivir a su tiempo, conmover y sorprender, como hace casi 60 años, es su
principal virtud y la razón de que lo consideremos un clásico. Esta
actualidad de la obra es evidente en el viaje que emprende El Principito a
través de los planetas, que son también un catálogo de actitudes adultas,
de hoy y de siempre. Allí está presente el poder regido por la razón de
estado llevado al absurdo, encarnado en El Rey; el egocentrismo desmedido y
superficial de El Vanidoso; la pasividad de los Ebrios, encerrados en un
círculo vicioso, características fácilmente identificables y divertidas
porque se trata de exageraciones, pero también son los pequeños o grandes
defectos que todo adulto pone de manifiesto en su vida cotidiana.
Pero la relación de El Principito y el Aviador es la base de la historia y
donde se concentra la mayor carga de sentimientos y afectos. Porque para el
Aviador vivir la experiencia del desierto junto a El Principito lo lleva a
renacer, a recuperar su corazón de niño. A través del relato de El
Principito, éste le habla de su nostalgia por su planeta y su flor, como de
su experiencia junto al Zorro. Estos dos momentos, son cruciales para la
obra pero también la síntesis más simple y perfecta de lo que en definitiva
es lo único importante en la vida: el amor y la amistad.
En cada cuadro del musical se buscó dinamizar y sorprender a un público
infantil y también adulto, para que el mensaje que Antoine de Saint-Exupéry,
a través de su Principito pueda llegar a todos. Teniendo siempre presente la
idea de que El Principito nos señala el camino de la pureza, el amor y la
amistad como la única salida posible en los momentos en que sentimos que
hemos perdido todo. Una lección esperanzadora, que tal vez todos los
argentinos, en los momentos que vivimos, debamos aprender.
Antoine de Saint Exupéry
Aviador y escritor francés nacido en Lyon, Francia, el 29 de junio de 1900.
Desde 1929 a 1931 vive en la Argentina donde se desempeña como jefe de la
Aeropostal trasandina, estableciendo las primeras líneas aéreas entre Bs.
As. y la Patagonia. Al ser ocupada Francia por los alemanes emigra a Nueva
York, donde el 6 de abril de 1943 publica su obra cumbre, El Principito
Pocos días después se incorpora a las tropas aliadas emplazadas en el norte
de Africa. Como capitán de una escuadrilla realiza frecuentes vuelos de
reconocimiento fotográfico sobre la Francia ocupada.
El 31 de julio de 1944, su avión despega a las 8.45 de Córcega. Dispone de
combustible para 6 hs., de vuelo, pero no regresa y a las 14.45 se lo da por
desaparecido. No se supo que ocurrió, y tanto Saint Exupéry como su avión
nunca fueron encontrados.
Rodolfo almorzó en el programa de la Señora Mirtha Legrand junto a Marcela Paoli, Patricia Sosa, y los tres ganadores de Operación Triunfo.
Entre otras cosas, hablaron del programa, del desempeño de los alumnos en la academia, y por supuesto, de su actual participación en las obras "El Principito", junto a Patricia y "Discepolín y yo".
Hacé click en las fotos para agrandarlas.
Rodolfo Valss, el profesor de “Operación Triunfo”
“Como soy un padre frustrado, sufro mucho cada vez que un alumno debe abandonar la academia”
Por Gustavo Lladós – Revista CARAS
Cuando concluyó la secundaria se embarcó en un proyecto de vida muy difícil de sostener: mientras estudiaba canto, su gran vocación, cursaba las carreras de Medicina y Psicología. Hasta que se vio envuelto en una crucijada y su padre lo ayudó a elegir. “Tenés que optar por lo que te hace más feliz”, le dijo a contrapelo de cualquier consejo generacional. Y Rodolfo Valss (42), hoy coach vocal en el programa “Operación Triunfo”, le hizo caso. Desde entonces ha lucido su voz en la mayoría de las comedias musicales que se han realizado en el país. Su primera experiencia profesional fue en 1982 con un reemplazo en “El diluvio que viene”, luego se sucedieron roles secundarios en “Annie” y “La mujer del Año” junto a Susana Giménez. A continuación, en 1986, vendría el espaldarazo con “Eva”, el musical de Alberto Favero y Pedro Orgambide, con Nacha Guevara a la cabeza del elenco y él en el importante papel de Mario, el sindicalista. Con ese background no fue extraño que a la hora de de suplantar de urgencia a Diulio Marzio como protagonista masculino de “Calle 42”, la producción del espectáculo pensara en él para acompañar a Violeta Rivas. Ni que después fuera convocado para participar de “Irma, la dulce” al lado de Luisina Brando y de la secuela de “Tango argentino”. En los últimos años la suerte tampoco le fue esquiva y actuó en los tres musicales más importantes: “La bella y la bestia” “Los miserables” y “Chicago”, donde interpretó nada menos que al abogado Billy Flynn que en la versión cinematográfica, asumiera Richard Gere. Por este personaje el cantante recibió el año pasado el premio Florencio Sánchez, como mejor actor de musicales y fue nominado para los ACE. Como si fuera poco, también fue ternado para los Konex, como uno de los cinco mejores intérpretes de la década.
“Amo la comedia musical, creo que nací para hacer comedia musical porque es lo que más me gusta. Pero no tengo una gran cultura sobre los musicales porque en mi casa se escuchaba jazz y negro spirituals. La pasión por los musicales surgió en mi adolescencia, cuando fui al cine a ver “Cabaret” y de pronto me di cuenta que era eso lo que quería hacer: cantar, actuar y bailar y si es posible en el contexto de una historia importante.
Para algunos se trata de un género menor, pero es el más difícil de todos. De poder elegir, me gustaría en un futuro interpretar en teatro al maestro de ceremonias de “Cabaret” que interpretó Joel Grey. A nivel vocal e interpretativo es el personaje soñado”, expresa el egresado del Conservatorio de Música Juan José Castro.
Pero esto no podrá ser posible a corto plazo, ya que además de su compromiso con el reality musical de Telefé, está ensayando dos obras a la vez: la versión musical de “El principito”, que subirá a escena en las vacaciones de invierno en el teatro Opera, con Patricia Sosa y Juan Carlos Baglietto, y un espectáculo para el Teatro Municipal General San Martín sobre Armando Discépolo.
Por el género un tanto minoritario al que decidió dedicarse toda su vida, nunca pensó en convertirse en popular. Por eso hoy se asombra cuando es reconocido en la calle gracias a la alta repercusión de “Operación Triunfo”
“Ahora el verdulero me saluda, el señor de la estación de servicio también. Antes me comentaban con respeto que habían leído mi nombre en una crítica, ahora se familiarizan y me dicen “qué haces, pibe”. Y sin embargo yo no cambié, sigo siendo el mismo. Siempre me gustó hablar con la gente. Antes lo hacía a la salida de los teatros, ahora lo hago en cualquier parte”, sostiene
-¿Qué es lo que más y menos le gusta de su trabajo en el programa?
Descartar a un alumno. Soy un padre frustrado y por eso me encariño mucho con los chicos. Me cuesta aceptar que una persona con la que conviví y le di clases durante un mes abandone de golpe la academia. Aunque sé que esas son las reglas del juego y que el programa es así. Lo que más me gusta es enseñar y sentir el afecto de los alumnos. No me importa levantarme tempranísimo para estar con ellos, algo que no hacía desde mis tiempos de estudiante. Su cariño y las ganas de aprender lo justifican todo.
-¿Cuáles deberían ser las condiciones para ganar el certamen?
Tener ángel, alma y voz. Si a una hermosa voz le ponés toda tu alma y te brilla el angelito alrededor todo el tiempo llegas sí o sí al corazón de la gente y ganás. Es es, en definitiva, lo que trato de inculcarle a los alumnos, lo que siempre me propuse alcanzar a través de toda mi carrera: ir más allá del cantante y convertirme en un artista.
