En la Universidad Nacional de La Rioja
instalaron una réplica del Zupaysaurus (dinosaurio riojano)
Se trata de una escultura en
tamaño natural del Zupaysaurus rougieri, un dinosaurio que habitó el territorio
riojano hace unos 220 millones de años, en el Parque Nacional Talampaya
Foto: En la semana aniversario de la
UNLaR, quedó formalmente inaugurada una réplica del dinosaurio riojano
Zupaysaurus.
La
Rioja. La semana pasada, autoridades de la Universidad
Nacional de la Rioja dejaron formalmente inaugurada una escultura de tamaño
natura del dinosaurio Zupaysaurus. Los actos se hicieron en el marco de un
nuevo aniversario de la Casa de Estudios, conmemorado el pasado 17 del
corriente mes.
La réplica pertenece a un dinosaurio carnívoro que
habitó el territorio riojano hace unos 220 millones de años. El ejemplar
cuyo nombre científico es conocido como Zupaysaurus rougieri, fue
elaborado en la ciudad de Buenos Aires por el profesor Jorge Blanco,
paleo-artista de nivel internacional, que ya realizó tareas de pintura
artística en los paneles del mencionado museo.
En la oportunidad, Blanco indicó que para “dar vida a
esta reconstrucción”, se aplicó la técnica de molde perdido, confeccionado en
arcilla, sobre el que se construyó la estructura definitiva, con resinas
especiales coloreadas.
El montaje de este dinosaurio se realizó sobre una
plataforma, en un espacio verde y ya se encuentra ubicado frente al
edificio del Museo.
Cabe destacar que este animal prehistórico era “como
un diablo de paso veloz, que corría detrás de sus presas por las quebradas de
La Rioja. Para todo aquel desafortunado que se haya cruzado en su camino, la
extraña cresta sobre su hocico y el centenar de pequeños y filosos dientes que
poblaban sus temibles fauces no podían pasar inadvertidos…”. Agregó que este
dinosaurio siempre ha concentrado la atención de los paleontólogos:
"Está a mitad de camino entre los dinosaurios
primitivos como el Herrerasaurus y los más modernos como el Alosaurus.
Justamente, la familia a la que pertenece está constituida por dinosaurios que
se especializaron en la locomoción, pudiendo desarrollar la velocidad de un
caballo."
Afirmó Blanco que con sus rasgos modernos, el aún
primitivo Zupaysaurus puede ser considerado el primer tetanuro, familia que
incluyó a dinosaurios carnívoros típicos del jurásico (período posterior al
triásico superior, al que pertenece esta “suerte de diablo”) y que llega hasta
nuestros días a través de sus lejanos descendientes: las aves. A la hora
de ponerle un nombre, los paleontólogos se inclinaron por Zupaysaurus, ya que
"Zupay” es una palabra quechua que significa diablo.
La réplica de este dinosaurio tiene las dimensiones
de lo que pudo haber sido en vida este ejemplar: dos metros y medio de alto,
por tres de largo, aproximadamente. La obra fue realizada en un plazo de
dos meses y, con este emplazamiento de la réplica, además de consolidar
el ámbito contextual de este centro científico, permitirá ubicar fácilmente el
Museo desde la entrada de la UNLaR a todos a los visitantes.
La Rioja, martes 21 de Septiembre de 2004
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Dinosaurios