Prenda sus bocinas,
contiene música.

Crónica de María Aurora
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Mi crónica del día 31
de octubre, 2007
Me citó a las 7:30
P.M. el Señor José Navarro en los camerinos del
Auditorio Nacional para ver a Serrat y entregarle
algunos regalitos.
Cuando llegamos mi
hermano y yo, pasamos por un estacionamiento, y
dijo el Señor Navarro que había sido un día difícil,
pues a nuestro Juanito le habían entregado su premio
de “Las Lunas del Auditorio”, y que había estado la
directora del Festival Cervantino con unas personas
con él, y que eso no lo tenían previsto; que Serrat
estaba ensayando; le dije que le llevaba los regalos
a Serrat y me dijo, “le diré a su mujer para que los
reciba”, y salió la Señora Candela para recibirlos,
me saludo de beso, me dijo que me recordaba de la
vez anterior que ella había venido, (Gira Versos en
la Boca, año 2003), le entregaba los regalos cuando
de pronto sentí una mano sobre mi hombro, estaba un
poco oscuro, era el estacionamiento, y volteé y era
Serrat.

Nos saludamos, le
presenté a mi hermano y le di unos barquitos de
papel cuadriculado que yo hice para que por favor
me los firmara, me dijo que si, y después de un
momento regresó la Señora Candela para dármelos
firmados. Fue un detalle muy bello de los dos,
pues Serrat estaba cansado y faltaba una hora para
el concierto.
Tere Velázquez, yo
iba preparada por si no lo podía ver, y le entregué
dentro de la caja una cartita, y le dije que
queríamos que cantara en su próxima gira “Vencidos”,
como alguna vez escribiste que la querías escuchar
en vivo, y varios dijimos lo mismo, se lo pedí como
un favor especial, ojala y sea así.
También saludé al
Señor Ricardo Miralles; a quien no vi fue a Joaquín
Sabina
Me encantó el
concierto, de verdad estaba como encantada,
esperando que harían ese dúo dinámico cuando
terminaban una charla, o canción. No hicieron el
número del fútbol, es más cuando terminó la canción
“La Fiesta” creí que se había terminado el
concierto, y pensé aquí no se van a poner la
chaqueta de color amarillo que aparece en los
periódicos, y si se la pusieron.

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Y fue cuando cantaron
la canción del “Pirata Cojo” como dice Mireia en su
crónica cuando el público (diez mil personas) se
pusieron de pie y les aplaudían, fue cuando a
nuestro Juanito se le rodaron las lágrimas, es que
fue una ovación como de 3 minutos, tremenda, con
cariño de verdad, pidiéndoles más canciones, y ¡Oootraaa,
otra!, . Ellos no se querían ir, se les notaba
por medio de las pantallas enormes que hay en el
Auditorio que ya estaban cansados, pero se
cuchicheaban y cantaban más canciones, el concierto
terminó a las 11:15 P.M. y empezó a las 8:30 P.M.
Después de la canción “El Pirata Cojo”, cantaron 8
canciones más.
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Hicieron un gran
equipo, pero sobre todo una gran selección de sus
canciones, y sabían a lo que iban al pensar en sus
canciones, y solo para dárnoslas a toda la gente que
los quiere.

Eduardo, María
Aurora, Mireia y su hijo.
Auditorio Nacional, 31
octubre 2007.

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