Prenda sus bocinas, contiene música.
Crónica de Teresita de Jesús
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Queridos amigos, el caso es que trataré de
expresarles mi experiencia aunque no soy tan buena
para escribir; tantas y tantas crónicas que he leído
de todos y cada uno de los que han vivido esta
maravilloso concierto, que la verdad en cada una he
visto reflejada mi emoción y mi vivencia.
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El
caso es que a Serrat, como la mayoría de todos
nosotros, lo conozco desde mi más tierna
adolescencia, he crecido con él, ya han sido ¿¿¿casi
40 años???, desde 1969, que barbaridad, bien dice la
canción que 20 años no es nada..en fin....la
tremenda emoción de verlo concierto tras concierto
durante todos estos años, no decrece se
incrementa....desde meses antes, cuando me entero
que va a venir me pongo sentimental y por todo
lloro, incluyendo el día del concierto, que para que
les cuento, la Magdalena en persona (acá en México a
las personas que lloran mucho les decimos, lloras
como una Magdalena).
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El
día 1o. de Noviembre, me preparo con ese nerviosismo
que da ir a tu primera cita de amor, para disfrutar
al 100% el concierto. Como voy desde la Ciudad de
Toluca, la partida (juntamente con algunos miembros
de mi familia, hermano, primas y sobrinos) la
fijamos para las 3 de la tarde, con el pretexto del
tráfico de la ciudad de México y aprovechar para
comer por ahí. Que les cuento, que en sobremesa de
pronto son las 6 de la tarde, me empiezo a poner
nerviosa y a decirle a la familia que ya no vayamos,
para encontrar lugar en el estacionamiento, desde
ahí empieza más grande la emoción y la ansiedad al
no encontrar eco a mi súplica. Todos me dicen que me
calme que sí llegamos....después de 45 minutos
deciden que ahora sí es hora....llegamos justo a la
8 de la noche, y yo un poco más tranquila porque ya
estoy ahí, nos vamos directamente a nuestro lugares.
Y bueno, lo que les pueda decir es poco, fue una
experiencia única, se me manifestó un Joan Manuel
Serrat, que aunque adivina que existía, hasta
entonces no conocí, dicharachero, bromista,
bailarín, juguetón, alegre, etc. Al señorón Joaquín
Sabina, lo había escuchado muy poco, es decir nada
(de este concierto en adelante he decido conocerlo
más de cerca).
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Este
gran ambiente que crean los dos que ya se ha
mencionado, de complicidad en el que se mimetizan
uno en el otro, Serrat se vuelve Sabina y Sabina
Serrat, hacen un espectáculo soberbio. Uno de mis
hermanos es fan de Sabina, él me platica que Sabina
en concierto es como decimos por acá, un desmadre, y
que incluso lo vio serio.
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Como les digo, uno se convierte en el otro. A la
salida compré mi bufanda de recuerdo que, desde ese
día, y con el frío que hace en Toluca, no me la
quito. Todavía ando en mi nube. Espero que me dure
muchos meses más.
a melodía
que escucha se llama "Es Caprichoso el Azar", del
cantautor Joan Manuel Serrat, y puede guardarla en su Pc
oprimiendo el
icono con el mouse derecho y "Guardar
Como"
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ventana superior derecha la "X" para que vaya a la página
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