Promesas
EL GRAN CAMBIO
SÍNTESIS DE LA PLATAFORMA DE LA ALIANZA
UN PROGRAMA DE DESARROLLO ECONÓMICO Y SOCIAL QUE ABRE UN
NUEVO CAMINO
EMPLEO TRABAJO, SALUD, EDUCACIÓN E IGUALDAD DE OPORTUNIDADES
PARA TODAS LAS ARGENTINAS Y TODOS LOS ARGENTINOS
CONTRATO CON LA SOCIEDAD
Los candidatos de la ALIANZA asumimos ante la totalidad de los habitantes
de la República Argentina la obligación de emplear
todo el poder y todos los recursos disponibles para procurar, en
el período 1999-2003, los siguientes objetivos:
.[ Pleno empleo ] Poner en marcha una economía que generará,
progresivamente, los empleos productivos y estables que se necesitan
para terminar con la indignidad del desempleo: esa vergonzosa herencia
del actual gobierno.
.[ Igualdad de oportunidades ] Hacer cumplir la Constitución
y las leyes a todos, sin excepciones ni privilegios. Combatiremos
toda forma de discriminación: personal, social y regional.
Forzaremos a los super-evasores a pagar sus impuestos y cuidaremos
que la riqueza, en lugar de concentrarse en un grupo de privilegiados,
llegue a toda la sociedad.
.[ La mejor educación ] Garantizar que la educación
pública, en todos sus niveles, disponga de los recursos necesarios
para cumplir su función. Toda familia tendrá asegurado,
para sus hijos, el acceso a la mejor enseñanza.
.[ La salud como un derecho ] Asegurar la salud para todos. Crearemos
un sistema con cobertura universal e igualitaria, que proveerá
a atención a todos los habitantes: desde la prevención
y la asistencia primaria hasta la medicina de alta complejidad.
. [ Un Estado sin corrupción ] Ser implacables con la corrupción.
Quienes hayan cometido delitos contra la administración pública,
deberán rendir cuentas a la justicia. En el gobierno de la
Alianza, los corruptos no tendrán lugar. Cerraremos todos
los agujeros por los cuales hoy se escapa la plata que hace falta,
y la volcaremos a la atención de los vastos sectores sociales
con necesidades básicas insatisfechas.
.[ Una comunidad sin miedos ] Devolver la seguridad a os argentinos,
combatiendo el delito. Llevaremos adelante nuestros proyectos para
tapar las lagunas de la ley penal, seguiremos luchando por una justicia
confiable y construiremos fuerzas policiales profesionales, eficientes
y limpias. Al mismo tiempo, actuaremos sobre los condicionantes
sociales de la violencia y el delito generalizados: la exclusión
y la injusticia.
Asumimos formalmente esta obligación contractual, sometida
al control de los 35 millones de habitantes, quienes juzgarán
si perseguimos estos objetivos con lealtad y eficacia.
Fernando de la Rúa - Chacho Alvarez
· Bases económicas
de la propuesta social
Desempleo y pobreza no son fenómenos naturales. Son consecuencias
inevitables de las políticas aplicadas los últimos
años
El desarrollo social como objetivo
Hoy tenemos millones de argentinas y argentinos sin trabajo; o con
trabajos cuyo salario no alcanza ni para el alimento indispensable.
Esta tragedia social no la causó un terremoto. La causó
una política económica que destruyó industrias
y abandonó a los productores.
Si la política económica hubiese sido otra, hoy no
tendríamos ni la desocupación ni la pobreza que tenemos.
La inseguridad tampoco es un fenómeno de la naturaleza. Es
el resultado de una alteración de las reglas de convivencia
--asociada a la creciente injusticia social-- y la desarticulación
del Estado, incapacitado para prevenir o controlar el delito.
No fue un cataclismo el que provocó el auge del narcotráfico,
el crimen organizado, la violencia y el delito. Fue el desgarramiento
del tejido social, combinado con la corrupción y una peligrosa
ideología según la cual el Estado debe retirarse de
todo. No ya retirarse de la fabricación de bienes y la producción
de servicios, sino abandonar las áreas en las cuales tiene
misiones indelegables que cumplir.
Si la política social hubiese sido otra, no se habría
llegado a esta dramática situación de injusticia,
exclusión y violencia.
Si hubiésemos tenido un Estado firme y un gobierno honesto
--consagrado a la educación, la justicia y la seguridad--
jamás habríamos llegado al actual estado de zozobra.
Por eso, la propuesta básica de la ALIANZA es cambiar los
objetivos de la política económica, adecuar el presupuesto
a los nuevos objetivos, y reconstruir el Estado para que sea capaz
de alcanzarlos.
Los objetivos de la ALIANZA son los que figuran en su contrato con
la sociedad, suscrito por sus candidatos: pleno empleo, igualdad
de oportunidades, la mejor educación, la salud como un derecho,
un Estado sin corrupción y una sociedad sin miedos.
La ALIANZA está en condiciones de alcanzar esos objetivos
porque tiene:
· Una decisión firme. Si esos objetivos no fueron
alcanzados en los últimos años fue, entre otras cosas,
porque el actual gobierno no se los propuso. Como lo demuestran
los discursos de los funcionarios, la asignación que hacen
de los fondos públicos y los resultados de su política,
el bienestar social no fue su meta. En cambio, el bienestar social
es la razón de ser de la ALIANZA.
· Planes de acción. El gobierno actual dejó
todo librado a la fuerza inercial del mercado. No formó una
sociedad con el sector privado, para promover conjuntamente el desarrollo
económico y social: le pasó toda la responsabilidad
al sector privado y se lavó las manos. La ALIANZA tiene un
concepto diametralmente opuesto sobre la responsabilidad de un gobierno.
En las páginas que siguen se expone:
· Qué vamos a hacer, desde el gobierno, para alcanzar
esos objetivos.
· Cómo vamos a lograr los recursos necesarios.
Los objetivos que la ALIANZA se ha fijado, y la política
económica que seguirá para alcanzarlos, representan
un gran cambio respecto de lo más negativo que el país
ha vivido y sufrido en la última década.
A diferencia de las distintas variantes de continuismo, la ALIANZA
no cree que el empleo, la justicia, la lucha contra la pobreza,
sean "asignaturas pendientes". Son "materias"
de una "carrera" completamente distinta a la que se ha
seguido en los últimos años.
Los gobernantes que hoy se van tuvieron, durante más de una
década, la oportunidad de demostrar cuáles son sus
objetivos y sus ideas. Su turno está expirando. Lo que no
hicieron, tanto a nivel nacional como a nivel provincial, no podrían
hacerlo asi tuvieran una nueva oportunidad.
La Argentina necesita un cambio.
Sin ese cambio, no habría "propuestas concretas",
"poder de imaginación" ni "consensos"
capaces de acabar con el desempleo, el hambre y la intranquilidad
ciudadana.
Esos problemas sólo se van a resolver si, ante todo, se cambian
los fundamentos de la política económica.
Para resolver "adónde ir" y "cómo llegar",
se necesita
recuperar la capacidad de decisión nacional
Decidir por nosotros mismos
En los últimos diez años la Argentina fue gobernada
por quienes creen que el país debe ir a donde lo lleve la
corriente. La idea fue dejar que el mundo, los poderosos y supuestas
leyes de la economía determinaran nuestro futuro.
La ALIANZA sostiene que el futuro lo decide, en gran parte, la voluntad
colectiva. En vez de navegar a la deriva como el actual gobierno
dejar que el país sea arrastrado por las corrientes, la ALIANZA
pondrá la proa hacia el desarrollo económico, el pleno
empleo, la igualdad de oportunidades y la justicia social.
La voluntad, por sí sola, no basta para lograr un propósito.
Pero sin voluntad, el fracaso está garantizado.
A la hora de conformar un plan de gobierno, la determinación
de quienes deben ejecutarlo, esta actitud es decisiva. La pasividad
y el fatalismo sólo pueden producir lo que ya han producido
en la Argentina: desempleo, desigualdad y una democracia que se
agota en lo electoral.
Un programa de gobierno es la definición de un destino deseado
y, a partir de esa definición, el enunciado de las políticas
adecuadas para llegar a ese destino.
Se trata de resolver, ante todo, adónde se quiere ir; y luego,
cómo llegar. Para ambas cosas, se requiere capacidad de decisión
nacional.
No es cierto que, en la era de la globalización, tal capacidad
no exista. Esa es, precisamente, la teoría de quienes creen
que debemos navegar a la deriva. En un mar tempestuoso, sólo
se puede navegar airosamente con rumbo e instrumental adecuados.
Esto, en materia económica, significa organizar y facilitar
la multiplicación de los recursos disponibles. De eso , de
cuya buena administración depende el bienestar social.
El problema no consiste en decidir si queremos más o menos
apertura al comercio internacional; más o menos inversión
extranjera. La Argentina necesita más de ambas cosas. El
problema es otro: cómo hacer para que la apertura comercial
argentina juegue a favor de su desarrollo económico-social
y cómo atraer o retener la clase de capital que ese desarrollo
requiere.
Las inversiones productivas prefieren las economías seguras
y en expansión; no se sienten atraídas por los gobiernos
complacientes que sumergen a sus sociedades en la inseguridad, la
pobreza y la incertidumbre. En estas últimas circunstancias,
los inversores sólo pueden ir a un país a realizar
tener interés en negocios circunstanciales. Para participar
de un proceso de transformación productiva, inserción
dinámica en el mundo y desarrollo social, el propio capitallos
propios inversores esperan que el país donde arriesgan su
capital encontrar en el país huésped tenga una capacidad
de decisión nacional, objetivos claros y políticas
apropiadas.
El 10 de diciembre de 1999 marcará, en este sentido, el comienzo
de un gran cambio en la Argentina. Después de esa década
de pasividad y subordinación, el gobierno de la ALIANZA recuperará
la facultad de decidir por nosotros mismos los objetivos de la Nación
y el modo de alcanzarlos.
No es cierto que en "el qué" coincidan todas las
fuerzas políticas y que el único problema sea "el
cómo". Cuando se fijan los objetivos incorrectos, no
hay "propuesta concreta" que valga:
Si el "qué" es
|
No hay "cómo"
|
Aumentar la productividad concentrando la producción en compañías
de gran escala |
Impedir la quiebra de PYMES y el desempleo |
Lograr competitividad internacional a través de mano de obra
barata |
Impedir el deterioro del mercado interno y la expansión de
la pobreza |
El QUÉ de la ALIANZA es otro y, por eso,
la ALIANZA logrará la modernización y el desarrollo
de las PYMES, el pleno empleo, el fortalecimiento de la demanda
y la drástica reducción de la pobreza.
El "modelo" del gobierno que se va
versus
el Plan de Desarrollo Económico y Social de la Alianza
Dos políticas económicas muy distintas
El actual gobierno tiene una visión neo-conservadora
que 20 años atrás estuvo de moda y, hoy, está
en decadencia.
La falsa teoría del desarrollo espontáneo
Según esa visión, si el Estado se
limita a equilibrar sus cuentas y no interferir con la economía,
el desarrollo se produce de manera espontánea. El proceso
sería muy simple:
Control del gasto público
+
reducción del costo laboral
+
rebaja de aranceles
|
*
*
Esta lógica llevó al gobierno a sostener que la mejor política
económica consistía en abrir unilateralmente la economía y dejar
a los distintos actores internos librados a su suerte. En consecuencia,
se desentendió de las PYMES y los productores rurales; se cruzó
de brazos antes el desempleo; no se preocupó por fortalecer el mercado
interno; no hizo nada de lo mucho que (sin comprometer el equilibrio
fiscal) podría haber hecho. A lo sumo, esa política podía llevar
transitoriamente al crecimiento del producto bruto interno. No al
desarrollo, que implica elevación de la productividad y, simultáneamente,
elevación de la calidad de vida de todos los habitantes. El resultado
está a la vista: además de no producir el desarrollo, el actual
gobierno destruyó tejido social y --frustrando su finalidad declarada--
hizo imposible mantener el equilibrio fiscal.
EFECTOS
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DE LA POLÍTICA
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SEGUIDA POR
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EL ACTUAL
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GOBIERNO
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DESEMPLEO
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POBREZA
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INDIGENCIA
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INSEGURIDAD
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PYMES QUEBRADAS
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EDUCACIÓN DETERIORADA
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SALUD EN CRISIS
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DEFICIT FISCAL
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DEFICIT EN CUENTA CORRIENTE
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DEUDA EXTERNA CRECIENTE
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Esta es una síntesis "textual", de la propuesta
de la ALIANZA, para las elecciones presidenciales de 1999. Todavía
les queda tiempo para cumplir con lo prometido. Es mi más
ferviente deseo, como el de todos los argentinos: QUE LO HAGAN.
Al hacerlo cumplirían con su parte del contrato social.
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