TRES AÑOS DESPUÉS
Capitulo 16: "Un rojo amanecer"
Hermione y Marie vieron como Rose y Robert salieron de la nada. Aún no reaccionaban ante la sorpresa y en sus cabezas se originaban pensamiento sin parar. Rose fue la primera en reaccionar e inmediatamente le lanzó un hechizo que dejo inmovilizada a Hermione y otro a Marie.
-Sabía que ustedes me ayudarían a terminar mi trabajo- dijo con cinismo.
-Que haces aquí- acertó a decir Marie que no comprendía la situación.
-Pues mi trabajo niña insolente-dijo Rose dándole indicaciones a Robert de que se dirigiera a esa caja extraña que momentos antes Hermione había inspeccionado.
-Desde luego que le debemos el éxito a nuestra querida Hermione- dijo Robert acentuando las palabras con tonos ácidos.
-Que demonios hacen aquí?-dijo con tono autoritario Marie.
-Como siempre de entrometida- dijo Rose tomando el frasco que le tendía Robert.
-Bueno Rose podríamos decirles, que al cabo no podrán contarlo- dijo riéndose Robert y después acompañado de Rose.
-Tiene razón, porque no contarles- empezando a pasearse entre los casi inmóviles cuerpos de Marie y Hermione- empecemos por desenmascarar a esta- dijo Rose tomando bruscamente a Hermione por el pelo- Esta que tu crees que te aguanta todo el día, no es mas que una empleaducha del ministerio que vino a encontrar esto- dijo alzando una botella de color verde con un tapón de calavera emanado de la boca de esta una serpiente que se enrollaba en toda la botella y que contenía un liquido viscoso que al moverse se quedaba pegado en las paredes de la botella- si, apoco creíste que de verdad te apreciaba jajaja, pues no solo estaba contigo por interés, ella solo cumplía con el ordenes de ineptos que no quieren ver a mi señor retornar-Hermione vio como la cara de Marie se trasformaba de desprecio a incertidumbre y duda y solo acertó a menear la cabeza para darle a entender a la niña que no era cierto.
-No te sorprenda mocosa, ningún humano es capaz de soportarte por mas de 5 minutos, por qué crees que tu padre contrata niñeras y nunca pasa tiempo contigo.
-No es cierto, tu mientes-dijo Marie con todo el odio y desprecio que su corazón de niña albergaba.
-Jajaja mentira si dijera lo contrario, acéptalo eres un estorbo en la vida de tu padre, imagínate lo eres para los demás? -dijo Rose levantándola del suelo con una mano y apretando sus uñas contra la piel de la niña.
-Tenemos que ir por el otro-dijo Robert levantando también a Hermione.
-Te espero en el vestíbulo- dijo Rose que se adelantaba con Marie sujeta.
Robert miró a Hermione con dolo y le dijo:
-Eres una estúpida Hermione, nos hubiéramos divertido de no ser tu negativas.
-Tu eres un estúpido por pensar que yo te hubiera aceptado- dijo Hermione con enojo.
-Claro que me hubieras aceptado porque yo soy mas hombre que Malfoy.
-Eso no lo creo.
-Pues ahora mismo lo comprobarás- Robert empezó a besar a Hermione y esta se sentía impotente a no poder moverse o golpearlo, el solo sentirlo cerca le repugnaba ahora que sabía toda la verdad que encerraba su interés desmedido hacía ella.
-Mejor no,- dijo separándose de ella- ya habrá tiempo para esto.
-Estúpido, te dejas manejar por el recuerdo de un ser que se hacia llamar mago y lord-dijo Hermione sin medir el peligro que venía. Robert no le contestó y se limitó a llevarla entre los distintos pasadizos que los habían llevado hasta ahí.
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Al salir de al oscuro vestíbulo se encontraron con Rose que sostenía entre sus brazos a Richard y a Marie tendida en el suelo con golpes en la cara y sangre cerca de la boca. -Ya tenemos todo-Rose- larguémonos de aquí.
Robert amordazó a Hermione para que no hiciera ruido y levitó a Marie que se encontraba inconsciente seguramente por lo golpes que recibió.
Caminaron fuera de la mansión y se adentraron en el bosque que bordeaba las orillas de la imponente casa que es ese momento se hallaba oscura y lúgubre.
Llevaban mas de una hora caminado entre la maleza que conformaba el bosque cuando llegaron a un claro donde estaba dispuesto un altar con trece pilares de piedra y en el centro una piedra liza, grande y en forma circular.
Rose puso a Richard en la piedra y amarró en un pilar a Marie.
-Tendrás la fortuna de ver renacer a nuestro señor a pesar de no merecer el honor-Dijo Rose a Hermione.
-Tu sabes que eso jamás pasará- dijo convencida Hermione, sin saber porque.
-Es mas, tu nos ayudarás-dijo Robert apuntándole con la varita.
-No!!!-dijo Hermione
Robert le quito el hechizo que la inmovilizaba e inmediatamente le lanzó el imperius que la dejó en trance.
-Cuando empezamos?-dijo impaciente Robert.
-Solo un momento mas, pero nosotros tenemos que hacer el sacrificio.
-El sacrificio será el niño y le daremos uno extra- señalando a Hermione.
-Yo pensé que querías a esa para divertirte.
-Pues ya no.
El tiempo requerido por Rose pasó rápido entre el incomodo murmullo del viento colado entre las ramas y el frío que calaba hasta los huesos.
Rose despertó a Marie y le dijo:
-Mira tienes un lugar privilegiado para ver el espectáculo- Rose se dio la vuelta destapó a Richard y lo colocó exactamente en el centro de la piedra.
Marie vio como Rose y Robert empezaban a recitar palabras que sus oídos no tenían sentido, pero ante los demonios ocultos en la tierra resultaba un cántico y palabras maravillosas.
Se empezó a sentir un aire que helaba el alma hasta del ser mas valiente y en el centro de la piedra se empezó a formar una figura extraña con humo que provenía del suelo profano y vio con horror como un ser de ojos rojos estaba encima de su hermano y le preguntaba con una voz profunda y densa decía:
-A quien quieren despertar desde mi reino?
-A nuestro señor Lord Voldemort- dijo Rose con voz segura aunque dentro de ella el miedo la invadía.
-Su señor soy yo y Voldemort es mi aliado.
-Nosotros queremos devolver a la vida a su aliado, dijo Robert rápidamente.