Dragones de Tierra
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9: Recuerdo...
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-¿De qué raza será?-
-¿Será humano?-
-No, su energía dice otra cosa-
-Pero si no puedes sentir
energías... –
-Aún, pero lo siento. Es muy
fuerte-
-¿Fuerte? ¿Él? Si parece un
debilucho... –
-Parece, pero no es-
-Las apariencias engañan, deberías
saberlo estando en Yiske-
-Ya sé, ya sé, pero es que... –
-¿Qué?-
-Van a ir a la habitación de
Marcos y Noa-
-¿Van?-
-Mokouba y Weevil van a dormir con
ellos-
Silencio.
Diálogos como este se escuchaban
por todo el colegio. Todos miraban a Weevil, quien trataba de no darse por
enterado. Noa y Marcos se asombraron a enterarse que compartirían cuarto con
ellos, y se acercaron para hablarles. No podían creer su suerte.
-Hola- dijo Noa, al llegar al lado
de ellos –Soy Noa, y él es Marcos. Compartiremos la habitación-
-Hola- saludó Marcos -Eres Weevil
Underwood, ¿verdad?-
-Eh... Sí- dijo Weevil.
-Y tú eras Mokuba Kaiba-
-El mismo- dijo Mokuba, orgulloso
de llevar el apellido de su hermano mayor (1)
-Y a mí me molestaban por tener el
pelo verde... Pero veo que no soy el único- dijo Noa, mirando a Weevil.
-Eh... No creo que hayas obtenido
tu color de la misma forma que yo-
-Defecto genético, una de esas
cosas raras que pasan una vez en mil años... Por supuesto, sucedió conmigo-
dijo Noa, orgulloso.
-Ah- dijo Weevil, sin saber cómo
reaccionar.
-Oye, ¿y oíste hablar de Yami(2)?-
le preguntó Marcos a Mokuba.
-No- respondió éste -¿Qué pasó?-
-El centro de recuperación abrirá
sus puertas este año. Dicen que llegó uno de nosotros, Yami, pero no estaba muy
lastimado. Tiene un gran trauma, y su pelo es muy... estrafalario-
-Ah- dijo Mokuba, sin entender qué
era lo que daba tanto de que hablar.
-Es que parece que cuando hablaron
de Weevil... Se alteró mucho. Y como vamos a ir allá... Creo que era mejor que
lo supieran-
Weevil se quedó mudo. ¿Yami? ¿Ése
Yami? Pero... Yami había escapado a Yiske...
¿Y había llegado?
Ésa pregunta le heló el corazón.
¿Y si no había llegado y los Destripadores lo habían atrapado? No, si hubiera
sido así estaría deshecho, literalmente. Y Marcos había dicho que no había
llegado muy lastimado... Como si quisieran que llegara.
Las palabras le saltaron a la
mente con una rapidez pasmosa. Internos. Espía. Robot. Esclavo. Yiske. Quizás
le hubieran puesto algo a Yami en la cabeza para destruir Yiske, o para
matarlo. O para que hiciera una misión de infiltración. ¿Y si esperaba
encontrarlo solo, para tomar venganza? Yami no vio con buenos ojos que Yuugi se
fusionara con él...
-¿Weevil? ¿Estás bien? Estás
temblando- le preguntó Mokuba.
-Me hicieron acordar algo. Pero ya
se me pasará, no es nada- dijo Weevil. Se sentó en uno de los asientos que
había en el patio y trató de calmarse. Mokuba, Noa, Marcos y los alumnos que
había en el patio lo miraron, hasta que los tres se acercaron.
-Lo siento, no creí que pasara
esto- dijo Marcos.
-No es tu culpa, fue una conexión
de ideas- dijo Weevil.
-¿Ideas de... allá afuera?-
preguntó Noa.
Todos sabían que se referían a
todo lo que estuviera fuera de Yiske. Se referían al mundo exterior.
-Sí, algo así... Es una larga
historia- dijo Weevil.
-¿Y algún día nos la contarás?-
preguntó Marcos.
-Creo que algún día podrán
vivirla- terminó Weevil.
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Era ésa pesadilla de nuevo. Había
dejado de tenerla semanas atrás, cuando se había acostumbrado a Yiske y a no
sentir miedo frente a todo. Pero ahora la estaba soñando y con más intensidad
que nunca.
Y no quería hacerlo. No quería
recordarlo. Había sucedido el mismo día en que lo había descubierto, y Yuugi no
estaba con él. Había salido toda la noche para explorar. Era la primera vez que
lo hacía, y Weevil se lo permitió. Después de todo, no había peligro... O eso
pensaron.
Sólo la tenía cuando Saya estaba
cerca. Pero ella estaba lejos, muy lejos de Yiske... y de él. ¿Entonces? ¿Por
qué recordaba ése despertar? El mismo en que sus manos se tiñeron con sangre de
vampiro. Y cómo no hacerlo, si había al menos quinces centímetros de sangre
dentro de su habitación. Pero eso no era lo peor.
Lo peor era ver las cabezas de los
vampiros morándolo, rogándole que los eliminara.
Las cabezas se veían terroríficas
separados de sus cuerpos.
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Bueeeeeeeeno, decidí poner una de
las escenas que me inspiraron para el Fic... De hecho, fue una de las primeras
que se me vinieron a la cabeza antes de pensar en este Fic. Y la quería poner al
final, pero como el final se acerca... Mejor lo pongo ahora. Y es peor de lo
que se imaginan.
En serio, cuando me acuerdo de ésa
imagen, tiemblo. Era horrible, y por eso no podía dejar de ponerla en el Fic. Y
lo mejor de todo es que las secuelas van a reaparecer, las secuelas que tuvo
Weevil después que lo descubrieran. ¿Una de ellas? Que cada vez que tocara una
pared apareciera sangre de vampiro donde había puesto la mano, como si
estuviera manchada en ella, pero siempre estaba limpia. Y eso es sólo un detalle.
Ahora reduje mi baraja a 61
cartas, inclusive tengo las cinco partes de Exodia y el Exodia liberado. Una
vez en que no tenía monstruos puse la cabeza de Exodia en modo de defensa, para
proteger mis puntos de vida. Me dije “total, si nunca sale, no va a salir
ahora” Y me salieron los dos brazos y las dos piernas. Y lo mejor de todo era
que ya había usado al Renace al Monstruo, y me quedé con la cabeza de clavo en
el cementerio. Y otra vez me pasó lo mismo, sólo que no salía una parte y
rezongué como ni se imaginan por eso. En fin, aprendí la lección.
(1) “Orgulloso de llevar el
apellido de su hermano mayor” la gracia que me hizo poner esto... Como si
quisiera casarse con Kaiba o algo así XD
(2) ¿Yami? ¿Qué Yami? Ah, ÉSE
Yami. No sé... puede ser... quién sabe...
Nos leemos
Nakokun
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