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RÁFAGAS SINARQUISTA Enero 2001/No. 9 OBSERVACIONES POLITICAMENTE INCORRECTAS U.N.S. ORGANIZACIÓN CÍVICA LA HISTORIA OFICIAL DE MÉXICO: CIENCIA FICCIÓN MASONICA
Esperanzadora resulta para muchos mexicanos la intención del Presidente de la República VICENTE FOX QUEZADA por desterrar de México dos de las mas dolorosas lacras que injustamente padecemos: POBREZA E IGNORANCIA. (Periódico la Prensa sábado 25 de Noviembre de 2000 primera plana). Pues bien, SR. Presidente, ya trepados en ese camión, LOS SINARQUISTAS le tomamos la palabra, y para empezar, sugerimos a usted respetuosamente que a la brevedad posible sea creada al amparo de su gobierno, una oficina que se dedique de tiempo completo a revisar la vergonzosamente falsificada Historia de México. Es decir, le pedimos que por el bien de la Patria se forme - caiga quien caiga –, una comisión de la verdad en materia histórica. ¿CON QUE PROPOSITO? Con el de que todos los mexicanos nos contemplemos en el claro y auténtico espejo de nuestra verdadera historia y desterremos FABULAS Y PATRAÑAS que estorban a una real unidad Nacional. La verdad no es y no ha sido en México, de manera alguna, una practica común de nuestra vida social y política; toda ella está encubierta por una tupida red de mentiras convencionales que la PANDILLA MASONICA Revolucionaria, que el 2 de julio mordió el polvo, ha mantenido; y ha colocado a la verdad en la situación de un objeto indeseable. Salvo la mejor opinión de usted, Sr. Presidente, LOS SINARQUISTAS consideramos que no puede haber peor ignorancia que ésta. Por esta razón, o sea, por que la verdad suele ser ingrata y molesta, fugitivos de ella, LA PANDILLA, nos ha obligado a asilarnos en un mundo de ficciones tan absurdas como las que puede crear el uso de la mariguana; parece que vivimos bajo el efecto de una droga que deliberadamente nos han hecho consumir para evitar el contacto con una realidad que nos hiere. Esto explica, en parte por lo menos, el falseamiento de los hechos históricos. Hay en nuestro pasado verdades que nos hieren, que nos deprimen, que nos rebajan, y en vez de encararlas, las rehuimos cobardemente. LA PANDILLA nos ha creado una imagen de la historia en la que pretendemos vernos reflejados, y nos recreamos en ella, aunque esa imagen sea falsa y, a veces, RIDICULAMENTE FALSA. Esta PANDILLA MASONICA que se apodero de México desde hace 176 años (1824), aparte de habernos robado, endeudado, degradado y envilecido, nos ha obligado a tragar una historia falsificada que con desvergüenza sin igual se les sigue "enseñando" a niños y jóvenes desde la primaria hasta la universidad. (Utilizar mentiras con fines inmorales, esta tipificado como delito de fraude. Art. 386 del código penal). Es necesario señalar que esta miserable PANDILLA, como hija que es del padre de la mentira, le teme a la verdad del mismo modo que drácula le teme a la luz; sabe bien que cuando la verdad florezca en México, los idolillos masónicos por ella creados pasaran a mejor vida; sabe bien que cuando esto acontezca, cuando menos el 90% de los "héroes" cuyos nombres "adornan" los muros de la Cámara de Diputados, saldrán volando irremediablemente al bote de la basura. Resulta evidente que si un mexicano cualquiera investiga con ojos desinteresados y libre el alma en LA VERDADERA HISTORIA DE MEXICO, hallará en ella una serie de hechos incompatibles con la idea de grandeza que tenía de la multitud de "héroes" que aprendió a amar y respetar desde su niñez, entonces podrán suscitarse en su espíritu cualquiera de estas dos cosas: 1.- Si es honrado de espíritu, al sentirse engañado, reaccionará con aquellos que han osado por tanto tiempo verle la cara de imbécil. 2.- Si no lo es, apartará esa verdad desagradable de su mente y seguirá creyendo en la ficción que LA PANDILLA le ha creado muy a su gusto; seguirá bebiendo la sabrosa miel de las mentiras masónicas. Pues bien Don VICENTE, esto último ha sido catastrófico para el pueblo de México, un pueblo que se refugia en la mentira es un pueblo perdido; no mejorará nunca, seguirá siendo un enclenque espiritual incapacitado para rescatar el honor nacional. Si la gusanera masónica revolucionaria quiere seguir adorando a sus idolillos de barro, ¡sea!, no nos oponemos a ello pero que par tal efecto utilicen el obscuro escenario de los recintos masónicos; mas los mexicanos necesitamos urgentemente SABER LA VERDAD EN MATERIA HISTÓRICA; esa verdad que le ha sido negada y escamoteada perversamente por tanto tiempo. ¡LAS ESCUELAS QUE CON NUESTRO DINERO PAGAMOS LOS MEXICANOS NO SON LOGIAS MASÓNICAS!: "MUCHO LODO Y SANGRE ¡SI! PERO TAMBIÉN BATIR DE ALAS..." Hay en nuestra historia ciertamente hechos vergonzosos: cobardías, bajezas y traiciones sin fin, pero también abundan en ella trazos de gran heroicidad de mujeres y hombres verdaderamente patriotas; cuando los mexicanos los descubran; cuando se les enseñe, cosa a la que como pueblo soberano tiene derecho, podrá entonces decir con legitimo orgullo: ¡ ESOS SON MIS HEROES! Por lo aquí expuesto consideramos, SR. PRESIDENTE, urge una revisión científica de nuestra historia que cubra la era prehispánica, el virreinato, los dos imperios y la época republicana. ¡CUANTAS COSAS SALDRÁN A LA LUZ!. "SOLO QUIEN ES VERAZ ES FUERTE" dijo alguien. Nuestra debilidad como pueblo es el resultado de la mentira, y la mentira es al mismo tiempo origen de nuestra debilidad. Seamos veraces, y siéndolo empezaremos a aprender a ser fuertes, y lograra así, juntos, el resurgimiento de la patria. ¿LLEGO LA HORA DE LA VERDAD PARA EL PUEBLO DE MÉXICO SR: PRESIDENTE?
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