Rufini: "Llegar al reducido no es un imposible"
En el fútbol caníbal de hoy en día los resultados mandan y a decir verdad en este sentido el panorama de Cañuelas, hasta hace un par de fechas atrás, no solamente era poco alentador, sino incluso resultaba hasta aterrador. Los dirigidos por Marcelo Rufini no sabían más que de derrotas, merecidas o no, lo que provocaba que el equipo estuviera hundido en un pozo del cual parecía no poder salir.
Sin embargo poco a poco ese panorama comenzó a cambiar y los resultados a llegar lo cual le permite al rojo actual distar y bastante del equipo que no hacía mas que perder partidos a principio de año.
En este nuevo marco El sitio web del CFC entrevistó Marcelo Rufini quien se refirió a la actualidad de su equipo.
El presente del equipo dista, y mucho, de la realidad por la que atravesaba a comienzo de año. ¿Qué pasó?
Poco a poco comenzó a tomar forma lo que nosotros pretendíamos y, además, sabíamos que el cambio debía darse. No sé si la pegué o no (se ríe) pero yo dije que en cuatro o cinco partidos el panorama iba a cambiar y así fue. Con humildad y trabajo se logra todo.
En el ambiente del fútbol los resultados mandan y en este sentido la racha de Cañuelas atentaba contra su continuidad en el cargo.
Ya habíamos tocado fondo y teníamos que arrancar. Los resultados llegaron justo y el techo de este equipo aun no lo conocemos.
¿Qué significa que los resultados “llegaron justo”? ¿Acaso pensó en algún momento en dar un paso al costado?
No, jamás. Pero hubo muchos técnicos dando vueltas quienes incluso hablaron con jugadores diciéndoles que iban a agarrar Cañuelas; a mi nunca nadie me dijo nada.
¿Desde la dirigencia nadie le insinuó nada?
Exacto. Tuve el apoyo todo el tiempo pero se vivía un clima feo porque había varios técnicos dando vueltas e incluso llego a decirse por radio que el “tato” Medina era mi sucesor en el cargo. Sentir esa presión no es nada lindo.
¿Cómo afectó su trabajo la desvinculación, determinada por la dirigencia, de seis jugadores?
Yo no era partidario de esas desvinculaciones, pero el club dijo que no les podía seguir pagando. Ahora lo que falta es recambio por lo que tuvimos que recurrir a chicos que no sé si estaban listos para jugar, aunque si eran tenidos en cuenta para integrar el plantel. Yo no quería apurar a los chicos, sino ir mechándolos de a poco sobre todo cuando estábamos peleando el descenso.
O sea que para usted el descenso ya es cosa del pasado.
Te diría que no hay que pensar más en el descenso, hay que mirar para arriba.
¿Mirar al octogonal?
¿Por qué no?, como ya dije el techo del equipo no lo conocemos aun. Hoy llegar al reducido no es un imposible para nosotros.
Cuando contaba con esos seis jugadores los resultados no se daban, sin embargo sin ellos los resultados comenzaron a aparecer y el funcionamiento del equipo mejoró. ¿No es paradójico esto?
Pero los jugadores que se fueron, o mejor dicho la mayoría, no eran titulares. Antes tenía la base del equipo más parte de este grupo de jugadores que hoy ya no está y los chicos; hoy éstos ocupan el lugar de aquellos que se fueron y muchas veces tengo que inventar jugadores para determinados puestos y este es un trabajo que hacemos en conjunto con “Cachi” (Martinoni).
En definitiva tanto Rufini como sus dirigidos y la parcialidad roja ya se ha olvidado del descenso y se ilusiona con la posibilidad de llegar al reducido. ¿Será esto posible? Solo restan un par de fechas para conocer la respuesta.
Lic. Matías Folgueira.
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