ABRE LOS OJOS
De Alejandro Amenábar


Alejandro Amenábar estudió C.C. de la Información en la Universidad Complutense de Madrid. Desde 1992 ha obtenido varios premios por sus cortos, como el Primer Premio de Vídeo en el Festival de Elche, el Primer Premio de Vídeo y el Primer Premio Extraordinario de A.I.C.A., el Primer Premio de Vídeo del Festival de Carabanchel y el Premio "Luis Berlanga" para la realización de cortometrajes. Realizando funciones de director, guionista, editor, actor y músico en sus cortos.

TESIS fue su primera película con la que consiguió 7 premios Goya y 6 premios internacionales. Ha sido vendida en más de treinta países e invitada a más de cuarenta festivales. Es el cineasta más jóven de España y según él, mucho trabajo, algo de talento y un poco de suerte, han sido las claves para conseguirlo.

Ahora, Alejandro Amenábar, presenta "Abre los ojos", una película que concibió estando enfermo con gripe y que, como resume su productor, José Luis Cuerda, "es un hilo tenso de intriga psicológica, insospechadamente proyectado al futuro, que nos obliga a recorrer sin pestañear todos los recovecos de los sentimientos humanos: El deseo sexual, la traición al amigo, el autoengaño, la culpa, la venta mil veces consumada del alma al diablo y la fragilidad de las apariencias".

Amenábar, director, guionista y autor de la banda sonora de esta película, promete ser uno de los mejores cineastas de nuestro país.

SINOPSIS

En la celda de un psiquiátrico penitenciario, un joven de veinticinco años (César) empieza a relatar a su psiquiatra (Antonio) los hechos que, según él, le han llevado hasta allí...

Heredero de una considerable fortuna, bien parecido, con éxito entre las mujeres, César es un muchacho al que la vida sonríe. Una noche, su mejor amigo, Pelayo, le presenta a Sofía. César se enamora de ella al instante, y no tiene el menor reparo en quitarle el ligue a su amigo. Tampoco le resulta difícil. Al parecer Sofía y él conectan perfectamente.

Pero esa misma noche, César se encuentra con Nuria, una chica aferrada a él de un modo obsesivo y casi enfermizo. César intenta desembarazarse de ella, pero finalmente acepta que lo lleve a su casa en coche. Nuria, deshecha por lo celos, se lanza por un precipicio con César a bordo. Tras el accidente, ella muere y él queda desfigurado.

Pasan los meses, y los cirujanos, a pesar de la fortuna de César, convertido ahora en un monstruo, son incapaces de reconstruir su rostro. Un día, Cesar, se encuentra con Sofía, a quien no había visto desde la noche del accidente. La actitud de ella ya no es la misma: lo rehuye, ni siquiera es capaz de mirarle a la cara. César se da cuentra de cómo el cambio de aspecto físico -algo que siempre estuvo a su favor- puede arruinar completamente su vida. Amargado y sin esperanza, se emoborracha y acaba durmiendo tirado en la calle.

Sin embargo, a la mañana siguiente las cosas empiezan a mejorar de improviso: Sofía vuelve a él, arrepentida, asegurando que lo quiere. Y días más tarde, los médicos garantizan que pueden devolverle su antiguo aspecto físico, por medio de una nueva operación poco menos que milagrosa.

De nuevo la vida le sonríe; pero una noche Sofía, desaparece, y ante el estupor y la indignación de César, Nuria, a quién creía muerta, se presenta en su casa afirmando que ella es Sofía. La situación adquiere tintas de pesadilla cuando César se ve incapaz de convencer a la policía de que Nuria, a la que ha denunciado, es una impostora. En realidad, ella tiene su documentación en regla y acredita que es Sofía. Incluso Pelayo le da la razón. A partir de entonces, César, desesperado, dudará de su propia cordura, considerará la posibilidad de que todos estén conspirando contra él, e, incluso, acudirá consoladoramente a la idea de que todo sea un mal sueño...

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