Elisabeth Shue
El éxito de taquilla Karate Kid, el momento de la verdad (1984), con el papel de Ali, la chica del adolescente experto en artes marciales, fue el debut en la pantalla de esta intérprete que había comenzado su trayectoria profesional poco tiempo antes en los escenarios. Un rol principal en Cocktail (1988), de nuevo como la novia de la estrella, aquí Tom Cruise, seguiría a este trabajo, al igual que personajes secundarios en comedias como las secuelas segunda, de Regreso al futuro, parte II (1989), y tercera, Regreso al futuro, parte III (1990), o Escándalo en el plató (1991), centrada en el mundo de las telenovelas. A estos desempeńos se sumarían también una breve aparición en el drama monetario Twenty Bucks (1993) o el encabezamiento del reparto del sentimental Mucho más que amigos (1994). La oportunidad de Elisabeth Shue de demostrar sus aptitudes, empero, tendría lugar en 1995, y a lo grande. Sería Leaving Las Vegas (1995) de Mike Figgis, el lento suicidio de un alcohólico, Nicolas Cage, a través de la bebida y junto a una prostituta, Shue, asimismo vapuleada por la vida. La riqueza e intensidad expresivas de su prestación le valdrían una nominación al Oscar a la mejor actriz protagonista, además de recibir un Globo de Oro y otras distinciones de primera magnitud. Sin embargo, sus intervenciones ulteriores no gozarían de igual aceptación, destacando entre ellas, sólo por su difusión al tratarse de una superproducción, El Santo (1997), con Val Kilmer.