Entre el sol brillante en el día de cielo azul y árboles verdes, la música cubana y tropical de Albita cabía perfectamente. Fue una gran presentadora; en vez de quedarse en una pequeña parte del escenario, caminaba por todas partes, hablando con los fans, cantando y compartiendo el micrófono. Tiene un estilo que es perfecto para algun evento público, porque sabe muy bien comunicarse con el público. No parece tímida, porque se ríe, y cuenta chistes a todos.

Pero lo que dio la mejor impresión de ella fue la manera en que introdujo a todos sus músicos. Una cantante como ella no sería nada sin los que hacen la música con la cual canta. Al fin de su parte del concierto (que duró mas o menos una hora), cuando salió del escenario, el público gritó, "¡otra, otra!". Volvió al escenario para cantar su última canción, "El Chico Chévere."

Después del descanso corto, entró en el escenario La India, con su banda. Como dice una canción del querido Marc Anthony, no hay nadie como ella. Tiene una voz magnífica, con una fuerza con la que no se compara. La India no quería dejar de cantar. Aunque se habría quedado ronca, ella cantó al antojo de su público, lo que quisiera el público era su pensamiento. Ella cantó algunas canciones larguísimas. Una de esas fue, Mi Primera Rumba, y tambien, Yemayá y Ochún. Esas canciones duraron por más de 10 minutos por cada una, quizás no duraron por tanto tiempo, pero era lo que parecía. Otras canciones, de las cuales recordamos bien ahora, son:

• Ese Hombre

• Dicen Que Soy

• Hielo

• Sola

• Mi Mayor Venganza

• Costumbres