CAPITULO II: ETTIENE
La dorada luz del medio día me despertó al reflejarse en mi cara; debía haber dormido muchas horas...pero estaba tan cansada... que las horas de sueño se habían hecho inevitables. De repente recordé donde estaba, los acontecimientos que se desencadenaron en la posada y  como había llegado hasta allí. Mire a mi alrededor. Era una gran estancia muy parecida a la que me quede dormida. Estaba en un gran lecho arropada por sabanas de suave lino y mantas de la mas dulce de las lanas; desde el podía ver dos pequeños ventanucos  desde donde llegaba el agradable borboteo del agua.. Debía haber algún riachuelo cerca...eso me recordó que necesitaba un buen baño y ropa limpia pues la mía estaba hecha jirones. Si, tan solo pensar en el frescor del agua sobre mi piel hacía que quisiese salir pronto al exterior para disfrutarla...
¿Pero donde estaba el hombre de ciencia?  Un agradable aroma a comida apreció contestar a mi pregunta...ummmmmm ...comida...bien pensado hacia mas de tres días que me alimentaba con bayas y frutos del bosque; y ahora llegaba hasta mi el aroma del pan recién horneado...pero no podía presentarme ante el de aquel modo...no con la ropa estropeada. Debía  asearme un poco. Así que tome la determinación de salir a bañarme al riachuelo y tal vez encontrase algo limpio que ponerme en alguno de los arcones que  había en la habitación. Pronto encontré lo que buscaba... parecía una de las camisas de dormir que utilizan los humanos blanca y suave por el uso y debido al tamaño de mi benefactor, era lo suficientemente grande como para servirme de vestido.
Si, Ettiene era un hombre fornido y proporcionado; bien parecido, su voz era cálida y serena y su tez estaba tostada por el sol haciendo que sus ojos destacasen sobre ella de manera asombrosa. Sus ojos. Sus ojos eran bellos muy bellos, no solo por su color sino por la bondad que irradiaban. Sin embargo parecían ocultar una gran tristeza. Tal vez lograra conocer que era aquello que le atormentaba y le daba un aire meditabundo... también recordaba sus brazos, tan seguros como las almenas de los castillos...y unas manos grandes y sorprendentemente suaves...para ser las de un hombre.
Descendí por la escalera de piedra que comunicaba  la sala principal con  los aposentos en los que me hallaba, en dirección al exterior cuando una voz me detuvo...
- Vaya  vaya, mirad lo que nos ha traido el medio día ...buenos dias milady.-Era una anciana regordeta cargada con un cesto de fruta -¿teneis hambre? Apuesto a que si... vamos vamos venid a la cocina he preparado comida para vos y para Ettiene..- sin darme siquiera opción a contestar me agarró de la mano y me llevo con ella - mi nombre es Oona y no, no soy la sirvienta de ettiene; digamos que compartimos intereses...vivo un poco mas abajo en un pequeño claro del bosque... y digamos que me ocupo de que no le falte comida y aseo a cambio de...ciertos conocimientos...el es un poderoso mago y yo me quede tan solo en hechicera –rió-, no me miréis así - dijo la anciana- no soy una bruja, nunca me ha gustado esa palabra... prefiero hechicera.. Medico... cualquiera menos bruja...¿acaso me veis aspecto de bruja? – de nuevo no esperó a mi respuesta, pero creo que la sonrisa que le ofrecí fue suficiente- pues eso...bueno querida y como os llamais pajarillo?

- Mi nombre es Driad, señora. Vuestro amigo me ayudó anoche y me ofreció cobijo... por cierto sabéis donde esta? Para seros sincera, creí que era el quien estaba preparando esta magnifica comida...
- Aaaay no querida... Oona es la cocinera, de eso puedes estar segura...Ettiene? Supongo que estará meditando... le gusta hacerlo... Donde? Cualquiera sabe... en algún lugar solitario... o tal vez haya vuelto a la posada de Nass para ver si obtiene algo mas de información... Me ha contado lo del altercado con los secuaces de la Dama Negra... mal asunto niña... esa gente es peligrosa... vamos comed un poco parecéis hambrienta. Oona me acercó un cuenco con queso fruta y un poco de pan recién hecho.
- Mi querida señora esta comida tiene un aspecto excelente.. pero quisiera asearme un poco llevo varios días de camino y ...
- Después -dijo la vieja-  ahora debéis comer un poco... y no temáis Ettiene aun tardará en volver así que tendréis tiempo de sobra para asearos- esto último lo dijo con un poco de sorna, como si supiese que mi intención era estar bella para cuando el volviera- Además cuando me dijo que había una dama en el castillo creí conveniente traer algunas cosillas; en aquel cesto teneis jabon perfumado, un cepillo y algunas cintas que tal vez os sean de utilidad... y no me deis las gracias... yo también fui joven querida- dijo entre dulces risotadas.
- Oona sois estupenda.. Ettiene hace muy bien al teneros a su lado... hace mucho que le conoceis?
- Si querida mucho...desde que vino al castillo
- Como es? Parece un buen hombre...
- Lo es niña..lo es. Es un hombre bueno, con un corazón de oro. Noble de pensamiento y fiel al honor y a la verdad. Además de un gran hechicero y un apuesto joven claro...pero de eso ya os habréis dado cuenta ... si...el rubor de vuestras mejillas lo confirma. - Si; la vieja Oona era lista, supongo que ya entonces era evidente la atracción que aquel ser humano había causado en mi pero intenté desviar el tema.
- Y decidme...como es que un gran hechicero como el vive en un castillo como este?...no tiene grandes comodidades..y los magos de la casa de Hass son magos poderosos y viven rodeados de lujos...como es que el prefiere vivir así?
- Eso deberá contaroslo él  pequeña- el semblante de Oona se ensombreció.
- Ocurrió algo verdad? Y por eso sus ojos están tristes ... – Oona  por primera vez desvió su mirada de la mía y casi a modo de reprimenda me aconsejó acabar pronto con mi comida si es que quería estar presentable para cuando Ettiene regresara. El resto de la conversación giró en torno a mí y a mi historia. Cuando terminé cogí el cesto que me había traído la anciana y la camisa limpia y me dirigí hacia el riachuelo que pasaba junto al castillo
- Driad! Grito la anciana desde la cocina tráeme el vestido más tarde.. lo lavare y te lo remendare un poco...mañana estará como nuevo... y date prisa.. Ettiene debe estar a punto de llegar...