Historia del Pueblo Hebreo

 

 

El origen de la hermandad se remonta al año 1999, cuando un grupo reducido de Aspenses amantes de las celebraciones pasionarias de la localidad , deciden aportar la documentación necesaria para solicitar la creación de una nueva e innovadora hermandad en la Semana Santa de Aspe.

 

La Hermandad del Pueblo Hebreo, se caracteriza en estos momentos principalmente por su brevedad , ya que  fue fundada a mediados del año 2.001, después de contar con la expresa autorización de la Junta Mayor de Cofradías y Hermandades de Semana Santa de Aspe, autorización  que tardó en concederse en un periodo aproximado de tres  años. No decayendo en el empeño de formar dicha  Hermandad,  al fin y, con tan sólo veintidós componentes en la Semana Santa del año 2002, la Hermandad del Pueblo Hebreo tuvo el inmenso honor de participar en la Semana Santa de Aspe,  siendo  la  del Domingo de Ramos en la procesión de las Palmas su primera aparición. La característica de esta procesión es el júbilo y gozo que anticipa la pascua....Zacarías (9,9) “ He aquí tu rey viene justo y victorioso, humilde y montado en asno”...., la semana santa comienza con el Domingo de Ramos que une el triunfo de Cristo aclamado como Mesías por los habitantes de Jerusalén. Una vez y ya  incorporados  en el ambiente de Hermandad, El Pueblo Hebreo  vuelve a hacer una próxima manifestación  en la Solemne Procesión del Santo Entierro, portando a hombros con entusiasmo y orgullo, su venerada Cruz, símbolo del Pueblo, símbolo del  Cristianismo.

 

Los enseres procesionales  del Pueblo Hebreo se  traducen en las palmas o ramas de olivos portadas en el Domingo de Ramos,  que  no  constituyen un talismán, ni un simple objeto bendito, sino el signo de la participación gozosa en  el rito  procesional,  expresión  de la fe de la Iglesia en Cristo, Mesías y Señor ,que  va  hacia la salvación de todos los hombres. 

   

 En el viernes santo y con  el  propósito  de  enriquecer  tan solemne procesión se incorporan una serie de antorchas  asidas por cada uno  de  los  componentes que forman  dicha  hermandad,  que acompañan  con   gran  respeto y   recogimiento a nuestra venerada cruz.         

                                                     

Cabe destacar que la cruz es una obra del escultor Mario  Dewey   Álvarez, de nacionalidad argentina y recientemente afincado en nuestro pueblo. Es una obra de arte para admirar, ya que esta realizada en madera maciza, tallada a mano, una obra en la cual el escultor ha sabido conjugar las características propias del elemento, para dar el efecto propio que se  buscaba.

Una vez acabada la cruz y después del consentimiento de todos los integrantes de la hermandad, se procede a la bendición de la misma, siendo el día 9 de marzo a las 19:00 horas en la iglesia de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro . La misa fue oficiada por el párroco de la misma Don Fernando Navarro.

  Concluida la bendición, La Hermandad del Pueblo Hebreo  tuvo  la  gran  satisfacción de ofrecer un vino de honor a  todas aquellas personas que quisieran compartir  de  tan  dichoso acontecimiento.

 

     Uno de los componentes el cual hace que esta Hermandad se pueda catalogar como innovadora en Aspe, son los trajes o hábitos que la forman, estos fueron confeccionados en Orihuela por un conocido  sastre, Manuel Escudero, que inspirándose en la vestimenta tradicional hebrea de antaño, consigue crear ese ambiente de pueblo que tanto se deseaba,  todo ello , consiste en una amplia diversidad  de  mantos, túnicas, velos, fajines....... finalmente rematados con sandalias hechas en su totalidad artesanalmente.

 

     En otras localidades como Alhama de Murcia, existe una Hermandad de similares características a la nuestra, los cofrades desfilan vestidos de hebreos portando la palma o rama de olivo. Mucho mas cercano a nuestro pueblo ,  cabría destacar la participación hebrea en la Semana Santa de  Crevillente  y  Cox.

 

    La seriedad, austeridad y el buen hacer, forma parte fundamental del cometido de La Hermandad Del Pueblo Hebreo.

                                    

Mª Carmen Villalobos

 

                                       

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