Para
analizar una inversión primero hay que obtener resultados
cuantificables. A largo plazo, el indicador financiero más
relevante de una inversión en un sitio web es la tasa de retorno
sobre la inversión (ROI). Muestra el total de ingresos obtenidos
(directos e indirectos) de la publicación de un sitio web como porcentaje
del total de costes de desarrollo y mantenimiento del mismo.
La experiencia internacional muestra que la inversión
en un proyecto web se rentabiliza a medio plazo, normalmente a
partir de los 12 - 18 meses. A partir de entonces las rentabilidades
obtenidas suelen ser elevadas para las empresas pioneras en su sector de
actividad.
Sin embargo, lo mejor de Internet es que podemos
obtener mucha más información que en el mundo
offline sobre el interés que despierta nuestro sitio web a
través de una auditoría del tráfico. Esta información es fundamental para
mejorar el servicio a los clientes.
Las variables más relevantes para evaluar
los resultados de nuestro sitio web son el número de usuarios, las páginas
vistas, la duración y frecuencia de las visitas, la tasa
de conversión y el valor
actual neto del
cliente. |