La excelencia de las
naciones
"Nada
en exceso"
Solón
Esta
simple frase de Solón, que ilustra su visión paradigmática sobre los
resultados de la excelencia, resume el ideal
clásico.
Solón,
estadista ateniense, incluido entre los Siete Sabios de Grecia, hizo
frente a la crítica situación social de Atenas en el siglo quinto
antes de Cristo (conocido como el siglo de Pericles). Debido a un
proceso de acumulación de tierras y poder en manos de la nobleza,
los campesinos perdían sus campos y su libertad. Solón anuló las
deudas e hipotecas, limitó la extensión de las propiedades y
prohibió los contratos que implicaban la pérdida de la libertad
personal. Después reformó la Constitución. Todos los ciudadanos
tuvieron acceso a la asamblea (ecclesía), y entre ésta y el Areópago
creó un consejo de 400 miembros (bulé). Realizó una reforma
monetaria y del sistema de pesas y medidas.
Durante
las últimas décadas se ha presumido de manera exagerada sobre el
concepto "volver a lo clásico" y muchos intelectuales se jactan de
neoclásicos. Los estudiantes de arte suelen identificar el estilo
Neoclásico como una consecuencia del descubrimiento de las ruinas de
Pompeya, que fue de gran influencia en artistas como David y marcó
el final del excesivo estilo Rococó. En lo político, se destaca en
cambio, el advenimiento a sangre y fuego, del imperio napoleónico.
Un precio muy alto por volver al
clasicismo.
Con
la caída del abominable muro de Berlín, uno de los efectos notables
de la globalización, ha sido la posibilidad de comparar sociedades
remotas y en consecuencia distinguir diferentes calidades de vida,
culturas y liderazgos. Si por definición la excelencia es: La
superior calidad o bondad de una cosa en su género. ¿Es posible
definir un modelo de excelencia para las
naciones?
Es
probable que sobre este tema no tengamos todas las respuestas, pero
vale la pena formular por lo menos algunas
preguntas:
1)
¿Existe un único criterio global por el que se puede determinar la
Excelencia de una nación?
2)
¿Es la excelencia de una nación lo que permite un nivel de vida
superior para su sociedad, o es el nivel de vida superior de una
sociedad el que reviste de excelencia una
nación?
3)
¿El concepto de calidad de vida es entendible de la misma forma en
diferentes culturas?
4)
¿Tiene vigencia el ideal
clásico?
En
el mundo de los negocios, en la antípoda del ideal clásico, las
empresas que logran imponer sus reglas de juego son las que se
eligen como modelos de excelencia. Las que instalan estilos de vida,
implantan nuevas tecnologías, impulsan patrones de gestión y
liderazgo. Estas empresas cautivan capital, tanto intelectual como
humano, y cuando están en problemas empujan al resto del mercado,
proveedores y clientes.
Pensando
en las naciones, discutamos unas pocas ideas sobre este
tema:
El
paradigma de bienestar:
La
cantidad y diversidad de bienes y servicios, implicados hoy dentro
del concepto común de prosperidad, ha acentuado como nunca antes,
las diferencias entre los límites extremos de riqueza y pobreza. Los
capitales fluyen libremente hacia las naciones donde el nivel de
bienestar sostiene el consumo y permite invertir en negocios de alta
rentabilidad.
Los
capitales y los talentos de todo el mundo son bien recibidos y
pueden ingresar a las naciones prósperas con total libertad. Estos
capitales incrementan el nivel de prosperidad aumentando el empleo.
Más empleo genera más prosperidad, luego mayor consumo y esto a la
vez atrae más inversiones, que derivan en más empleo conformando un
círculo virtuoso.
En
el mundo de los negocios, este comportamiento se conoce como "vuelo
hacia la calidad". Cuando esto ocurre en un mercado determinado, la
concentración del mismo se acentúa velozmente precipitando las
quiebras de sus competidores.
Sin
embargo, de forma indiscutible, las necesidades básicas del ser
humano se han mantenido constantes debido a que pertenecen a su
propia naturaleza. Por esta razón aunque las naciones emergentes
siguen teniendo serios problemas, como la desnutrición, los “sin
tierra”, la mortandad infantil y el analfabetismo, aspiran a las
ligas mayores y se sienten muy presionadas por su posición relativa
dentro del nuevo escenario global.
Mientras
las naciones que lideran el desarrollo de tecnología han mejorado
sus promedios de vida dramáticamente, la mayor parte de la población
mundial vive en condiciones de miseria que la tecnología ha
permitido difundir pero no mitigar.
La
búsqueda de una mayor prosperidad dentro de este paradigma explica
la integración de la Unión Europea y por contrapartida el grado de
insatisfacción masivo de los ciudadanos de la U.R.S.S. marcó el
clímax de su desintegración, acelerando el triunfo de la libertad
que puso fin a la guerra fría.
La
educación parece no haber sido planeada para enseñar principios y
valores coherentes con el bienestar general, la estabilidad, la
equidad y la generosidad. El concepto, ama a tu prójimo como a ti
mismo ha sido dejado de lado buscando individualmente la mejor
calidad de vida posible, acorde a este paradigma de bienestar. ¿El
nuevo concepto de excelencia es totalmente ajeno al ideal clásico y
a los valores judeocristianos?
La
tecnología:
El
éxito en el desarrollo de la tecnología y su efecto directo sobre la
calidad de vida ha caracterizado las últimas décadas. Las naciones
que han sido puntales de este desarrollo se posicionaron como
centrales.
La
impresionante adicción al consumo de bienes y servicios, modificó
radicalmente el concepto tradicional de bienestar, sentando las
bases de un nuevo paradigma hiper-consumista. "La carrera" por
alcanzar el nivel de satisfacción social, en este nuevo modelo,
implica una impresionante demanda, que hace pocos años era imposible
imaginar. La búsqueda de altas tasas de retorno, hace que las
inversiones se orienten fuertemente al desarrollo de bienes
relacionados con el ocio y el
hiper-consumo.
Las
mejoras tecnológicas y correlativamente el aumento del consumo, ha
caracterizado el desarrollo de las naciones consideradas como
líderes.
Evidentemente
el grado de adicción a la tecnología que experimentan los ciudadanos
de las naciones centrales las mantiene en demanda creciente. ¿Puede
la tecnología ser una medida por el que se pueda considerar la
excelencia de una nación?
El
Liderazgo:
El
liderazgo administra sus recursos bajo una enorme presión. Por una
parte el contexto internacional, presiona globalmente para eliminar
reglas que limiten la concentración de riqueza. Desde lo interno, la
sociedad resiste las decisiones de estado que aparenten alejarlos
del nuevo paradigma de bienestar. En consecuencia podemos ver un
grado de insatisfacción creciente en los ciudadanos de las naciones
emergentes.
Esta
situación se potencia dentro de la sociedad de estas naciones, donde
las clases medias están mayormente insatisfechas. Los estratos de
mayor pobreza suelen presionar menos por falta de recursos pacíficos
para hacerlo, y cuando lo hacen son mayormente reprimidos.
Los
estratos medios de la sociedad, en los naciones emergentes,
multiplican exponencialmente su descontento, rechazando el ideal
clásico. Una superabundante información les permite conocer todo lo
que les falta para llegar a ser felices dentro del nuevo paradigma
de prosperidad. La clase media presiona para que el dinero que los
estados recaudan como tributo se destine a inversiones de alta
rentabilidad demostrables, caso contrario amenazan con no pagar sus
impuestos. Por otra parte ahorran en monedas que consideran de mejor
calidad que la de sus naciones y acentúan el deterioro de sus
propias monedas, afectando negativamente la economía de los países
donde residen. Temen que los líderes malgasten su dinero. Dentro de
este paradigma todo aquello que no demuestre ser una buena inversión
a corto plazo, como por ejemplo el gasto solidario, es catalogado
como irresponsable, populista y demagógico.
Los
más necesitados (desocupados y sub-ocupados) no pagan impuestos y
además necesitan que los líderes inviertan dinero del estado en
ellos. Esto traerá beneficios para la nación a largo plazo aunque
aumenta el descontento de los que tributan hoy. Las clases de
mayores ingresos tratan de hacerse justicia por mano propia,
evadiendo tributos y ahorrando en el exterior. Se conforma entonces
una economía informal, que apura tasas de impuestos mayores, para
compensar a los que no pagan, generando otra fuente de
descontento.
Surgen
de esta manera sectores fundamentalistas que impulsan una economía
totalmente ajena a los principios y valores mínimos de la
solidaridad.
Cuando
los líderes ceden a esta presión se implanta lo que se conoce como
modelo de exclusión social. Sin el fomento de instituciones no
gubernamentales atentas a las necesidades de los más desposeídos
resultaría imposible sostener el equilibrio social. Los líderes
deben tener planes a plazos mayores y ser capaces de explicar su
modelo nacional futuro para conseguir consenso y apoyo. ¿La
excelencia de una nación, está tan ligada a la excelencia de sus
líderes, como en cualquier
organización?
La
migración:
La
migración legal de ciudadanos hacia los polos de riqueza normalmente
convoca a la clase media, porque los más pobres en recursos
materiales y educación no logran emigrar o lo hacen de forma ilegal.
Los ciudadanos que emigran legalmente suelen ser los potencialmente
más productivos de una sociedad. Las naciones prósperas cosechan
entonces gran parte del talento y las capacidades sembradas en el
resto del globo aumentando así el nivel de desequilibrio.
Estas
inmigraciones se observan como una amenaza para los ciudadanos
celosos de su prosperidad y despiertan muchas veces una
discriminación fundamentalista. Riesgos que los inmigrantes parecen
aceptar en su búsqueda por alcanzar el nuevo paradigma de
prosperidad.
Normalmente
las naciones prósperas aplican medidas para evitar la inmigración
indiscriminada. La libertad se limita solo a lo que signifique una
inmigración de capital, dificultando la absorción de lo que no pude
aportar dinero o talento.
Antes
del siglo 20 solo las pestes generaban un efecto similar y durante
la primer mitad del siglo 20 fueron las guerras mundiales. En los
paradigmas de prosperidad anteriores la salud y la paz eran la
prioridad. En este nuevo paradigma la prioridad es la prosperidad.
Si
el modelo de bienestar que se implanta en una nación es totalmente
ajeno a sus posibilidades reales, a corto plazo se desintegra. ¿Son
excelentes las naciones que reciben corrientes de
inmigración?
La
exportación de conflictos:
Otra
característica fundamental dentro de este nuevo paradigma es la
velocidad con que todo ocurre. Bill Gates dijo que el nivel de
tecnología existente permite hacer "negocios a la velocidad del
pensamiento" y además los viajes internacionales son también una
rutina. El capital material e intelectual puede volar hacia la
excelencia, a la velocidad del pensamiento.
Los
negocios de hoy se pueden manejar desde cualquier punto del globo.
Las grandes empresas están en muchas naciones a la vez. A pesar de ello,
el tratamiento en el ámbito global que tuvo el conflicto en la vieja
Yugoslavia fue totalmente diferente del que tuvo el de Ruanda u otra
nación del continente africano. En esto radica la mayor debilidad
del nuevo paradigma.
La
velocidad con que se desintegró la U.R.S.S. hace pocos años nos
obliga a pensar en los efectos que puede tener un cambio rápido en
las condiciones de calidad de vida de EE.UU., o la U.E. Sucesos
trágicos como los del 9 de setiembre del 2001 y la compleja
situación de medio oriente podrían cambiar rápidamente el escenario
donde se concentra el capital y el talento.
Esta
es la principal razón por la que los EE.UU. tuvieron que definir
rápidamente quienes son sus enemigos y lanzar una campaña para
demostrar que no han perdido el control de la
situación.
La
paz sustentable de una nación es el mayor atractivo ante las
hipótesis de graves conflictos y probablemente su mayor fortaleza
para sostener sus aspiraciones de progreso. En casos donde la paz se
ve amenazada, las naciones capaces de exportar sus conflictos ponen
de manifiesto su grado de importancia. ¿Las naciones rápidas para
resolver sus conflictos y capaces de exportarlos, configuran también
un nivel de excelencia?
Seguramente
hay otros factores que pueden considerarse y será muy interesante
continuar este debate.
Agradeceré
vuestros comentarios.
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