CONFERENCIA DEL LIC. FRANKLIN PANIAGUA
1.- Evolución de la Resolución de Conflictos
Al referirnos a la Resolución Alternativa de Conflictos hacemos mención a una forma de entender y aplicar la justicia. Se trata de una forma que se contrapone con el sistema “tradicional” que se constituye a través de los tribunales y en general el sistema judicial de nuestros países. Si bien se trata de una agrupación hecha “por defecto” que reúne una serie de mecanismos, no muy vinculados entre sí. Estos comparten entre otros características, el brindarle una mayor discreción quiénes son partes de las disputas. Esta discreción se traduce en la posibilidad de encontrar soluciones directamente con quien se tiene el problema o de contratar al sujeto que vendría a impartir justicia en el caso concreto. La idea de conservar en las partes un mayor grado de autonomía no es algo novedoso, por el contrario la historia es más bien lo contrario. Fueron los ciudadanos quienes poco a poco fueron “entregando” esta libertad de resolver sus disputas, hasta llegar a nuestra situación actual donde impartir justicia es una prerrogativa del Estado-Nación.
Algunos teóricos ubican como originarias respuestas al conflicto el mero acto de violencia como parte de la “respuesta psicobiológica” con que cuenta cada individuo. Cualquier otra reacción fuera del mecanismo de “lucha o huída”, es una construcción cultural procurada para la vida gregaria propia de los seres humanos. En el caso de los mecanismos “alternativos” existen dos principios fundamentales, por un lado la autonomía de las partes para encontrar solución a su conflicto y por otro lado la búsqueda de soluciones que procuren “restaurar” más que “sancionar” la situación presentada. A lo largo de la historia occidental se encuentra ejemplos de formas de justicia que conservan estos principios. Entre ellos el caso de los themostetas de la antigua grecia. Este se trataba de un tribunal religioso compuesto por un consejo de ancianos. Un ejemplo de este tipo de justicia que se conserva hasta nuestros días es el caso de los tribunales de agua de Valencia. Estos se encargan de resolver las disputas referentes al uso del agua entre los agricultores.
Dentro de las culturas Americanas los sistemas de justicia respondían más a una idea de justicia restaurativa que sancionatoria. Resabios de dichos sistemas se conservan aún en funcionamiento en el seno de algunos grupos indígenas. De igual forma ciertos grupos religiosos y gremiales han mantenido de alguna forma espacio de “justicia alternativa” funcionando hasta la actualidad.
Resurgimiento
El resurgimiento de los medios “RAC” esta ligado sobre todo a un agotamiento de la vía judicial como forma exclusiva de resolver disputas. En palabras de l. Tribe “demasiadas leyes poca justicia, demasiadas normas pocos resultados”. También para complementar y reemplazar procedimientos en otros espacios de toma de decisión. Como por ejemplo:
Planificación del desarrollo
Decisiones legislativas
Administración de empresas
Terapia
familiar
Diplomacia
Historia
El
movimiento reciente de “RAC” surge originalmente dentro de la empresa privada,
luego incorporado dentro de los procesos judiciales. El mismo esta inspirado en comunidades
de inmigrantes y religiosas que practican tradicionalmente la mediación. Igualmente entre los comerciantes se
practicaba la mediación sobre cuestiones marítimas y de valores desde finales
del siglo diecisiete. A principios
de siglo los sindicatos crea los
“comisiarios de conciliacion” (1913)
Basados
en los modelos utilizados en materia laboral se “ensayan” procesos alternativos
en:
Universidades
Carceles
Comunidades
marginales
(setentas)
Posteriormente
el asunto se lleva al plano ambiental y gubernamental (principios de los
ochentas). Con la Conferencia Pound: abogados, grupos de derechos civiles,
pacifistas, comerciantes, abogados, jueces, definen el perfil del uso de estos
medios a nivel judicial. A partir de este momento se inicia la incorporación de
estos medios dentro de los procesos judiciales. Esto ha llevado a la creación de leyes
especiales, tribunales de mediación
y arbitraje. Además en algunas legislaciones se hace
obligatorio acudir a un proceso de mediación antes de acudir a la vía
judicial.
El
desarrollo de los medios alternativos es el resultado de la convergencia de un
diferentes corrientes de pensamiento.
Por esta razón aún que
hay una cierta claridad en
la definición de los mecanismos persisten muchas diferencia en cuanta las
motivaciones. “no existe un
consenso sobre si las principales ventajas de la utilización de dicho sistema
recide en el ahorro de tiempo y dinero, en una mayor participación de las partes
o en la obtención de mejores resultados” ( L. Singer)
Una
de las corrientes más fuertes de promoción de la resolución alternativa de
disputas proviene del campo
empresarial. Las grandes
corporaciones han incorporado las prácticas de mediación dentro de su gestión
empresarial e inclusive han promovido su utilización en su relación con otras
empresas. Esto ha promovido el
desarrollo de servicios especializados de arbitraje y mediación a nivel de bufetes
corporativos.
Otra
fuente de desarrollo metodológico y conceptual para el RAC ha sido su
incorporación dentro del ámbito de la terapia familiar. También dentro del trabajo pastoral de
muchas iglesias se desarrollaron centros comunitarios de mediación que luego
fueron también desarrollados por grupos civiles.
Un
aspecto importante dentro de la evolución de esta materia ha sido su
incorporación dentro del currículo de las escuelas de derecho. En el caso de Europa y los Estados
Unidos. En América Latina esto es
algo que recién esta ocurriendo.
Igualmente es hasta ahora que se inicia la preparación de legislación
especializada. Costa Rica fue uno
de los primeros países en contar con una ley de este tipo.
2.- Negociación
Generalmente,
se cree que para negociar solo
tenemos que prepararnos para el momento en el que estamos dialogando sentados en
la mesa de negociación. Nos concentramos solamente en ese espacio y creemos
que ese es el momento
decisivo. Sin embargo, debemos
considerar que existen tres niveles importantes que se entremezclan y son
igualmente relevantes para la negociación:
Pre-negociación: este nivel es muy importante, aquí
analizamos la situación acumulamos información, conocemos a los actores, en
otras palabras “preparamos la cancha”.
Podría decirse que ese es nuestro objetivo cuando elaboramos nuestra
“estrategia de incidencia”
Negociación: en este nivel es donde se da el diálogo
directo con las partes con las que debemos o queremos llegar a un acuerdo. Es aquí donde debemos poner atención a
cosas como la comunicación, las relaciones humanas, nuestros intereses, quiénes
se deben sentar a negociar, etc.
Implementación
de lo acordando: esto debe
visualizarse cuando se negocie el acuerdo ¿Será viable aplicar lo que estamos
acordando? . Aquí es importante
tomar en cuenta que la implementación es un proceso en el que las partes deben
aportar conjuntamente. En muchos casos, nuestra relación con las partes no
termina después de que hemos negociado.
¿Cómo
se debe negociar?
Esto
es una elección y depende de la forma de ver la situación en la que se negocia.
También depende de que tan importante sea la relación que se tiene con
quienes se negocia. Podemos decir
que existen tres tipos de negociación:
Dura:
Adversarial
Se
actúa duro con el problema y con
las personas.
Se
prioriza el resultado sobre la relación.
Se
hacen amenazas
No
se cede nunca en la posición.
Se
gana o se pierde
Se
asume que la otra parte siempre tiene las peores intensiones
El
éxito se mide de acuerdo a lo que la otra parte a “perdido”
Suave:
Amigable
Hace
concesiones para quedar bien: prioriza la relación sobre el resultado
Suave
con el problema y con las personas
Generalmente
sede demasiado
Negociación
por intereses:
Este
tipo de negociación reconoce las cosas positivas de ambas y trata de evitar las
debilidades que tienen. La idea es
no enfrentar la negociación como
una guerra contra el “enemigo” o ser tan amigables que olvidamos nuestros
propios intereses.
La
negociación por intereses plantea dos cosas fundamentales. En primer término, lo
que se quiere no es ganar si no
satisfacer nuestros intereses. En segundo término, la relación con la parte con
la que negociamos tiene valor, es importante tratar de conservar esa relación en
el mejor estado posible o por lo menos no perderla. Esto es especialmente importante cuando
se negocia con persona con las que se tiene que trabajar o estar en contacto
continuo. Además, cuando se
negocian cosas a largo plazo, su implementación va a depender de todas las
partes y de cuán satisfechas se hayan sentido con la negociación.
Cuando
hablamos de cuestiones ambientales,
generalmente nos movemos en círculos de relaciones continuadas entre
instituciones o entre instituciones y organizaciones que trabajan alrededor de
un tema o recurso. En esa medida la
negociación por intereses se muestra como una herramienta útil.
Pilares
de la negociación por intereses
1.-
Separe las personas del problema
Cuando
las persona deciden sentarse a negociar, su principal objetivo es clararificar
cuál es el problema y cómo se va a resolver. Esto que parece sencillo puede volverse
difícil cuando existen: malas interpretaciones, cuando intervienen las emociones
y la gente se enoja y se personalizan los problemas, o cuando se pierde la
comunicación. Por esto debemos
tratar de separar las
cuestiones personales de los problemas.
Es precisamente este asunto lo que paraliza muchas negociaciones.
Algunos
consejos:
Suave con las personas, duro con el
problema
No culpar al otro
Ponerse en el lugar del otro no es estar
de acuerdo
Reconozca y comprenda las emociones
Permita que el otro se desahogue
No reaccione frente a un estallido
Escuche, escuche, ESCUCHE
Estructure la negociación como si se
tratara de resolver un problema común
Permita que el otro quede bien
Es
bueno tomar en cuenta la necesidad humana de:
dar
explicaciones
justificarse
desahogarse
ser
respetados
mantener
la dignidad
2.
Concéntrese en los intereses, no en las posiciones
La
idea es evitar negociar por
posiciones, para lo que es necesario visualizar los intereses y necesidades
propios y de la otra parte.
Explique sus intereses y pregunte por los
de otros
Exprese el problema antes que SU
respuesta
Explique claramente a dónde le gustaría
llegar, no se pierda en el pasado.
No
desprecie los intereses de la otra parte.
Sea
firme cuando exprese sus intereses
3.Genere
una variedad de soluciones de beneficio común.
Trabajando
en forma colaborativa podemos sacar más provecho para nuestros propios
intereses. Para trabajar
conjuntamente, debemos visualizar los intereses y necesidades existentes
alrededor del problema y generar alternativas de solución que traten de conjugar
las necesidades de las diferentes partes.
Generar alternativas de beneficio común no es algo que estamos acostumbrados a hacer. En general, se tiende a pensar que solamente existe una única forma de solucionar los problemas. Además, se piensa que la opción es ganar o perder, que no hay otra alternativa. Esta forma de ver las cosas se debe a que generar alternativas es algo a lo que no estamos acostumbrados y en alguna medida asusta.
Entre más colaboración en el proceso exista, más comprometidos estarán todos en la solución.
Tome en cuenta que el problema de ellos es también su problema, facilíteles la toma de decisión
¿Cómo generar soluciones?
Lluvia de ideas
Agrandar el pastel: busque alternativas creativas
Use las diferencias en beneficio de ambos, por ejemplo, algunos estarán mas interesados en tener algún grado de poder en las decisiones que en obtener los beneficios económicos.
Busque y ofrezca alternativas atractivas para ellos y baratas para usted
Hágales fácil la decisión
4. Insista en usar criterios objetivos como base del acuerdo
Criterios
Independientes de la voluntad de las partes
Legítimas
Prácticos
Criterios
Sobre el fondo
Sobre el procedimiento
El asunto de la información
Legítima
Confiable
¿Qué información necesito?
El asunto de la información es realmente importante. Generalmente existen diferencias sobre cuál es la información válida para tomar la decisión. Por ejemplo, una diferencia muy común es la que se da muchas veces entre el conocimiento científico o técnico y el conocimiento tradicional o cultural. Cuando negociamos debemos estar de acuerdo sobre cuál información consideramos apropiado o aceptable y cuál no. Puede pensarse en combinar tipos de información, procurando un balance. Lo importante es que la información que se utilice para sustentar los acuerdos sea válida para todas las partes.
¿Cómo medimos el éxito de una negociación?
La finalidad de una negociación no es llegar a un acuerdo si no satisfacer nuestros intereses.
El éxito de la negociación no depende de algún límite específico o prefijado que podamos exigir, tampoco de llegar a un acuerdo. La idea es satisfacer nuestros intereses lo más que podamos dentro de nuestras circunstancias. Para poder valorar esto, es necesario tomar en cuenta que alternativas tenemos para satisfacer nuestros intereses si no negociamos. El éxito de la negociación se mide en función de la Mejor Alternativa a la Negociación (MAAN) que tengamos y de la que tenga la otra parte.
Se supone que si se negocia es porque se obtendría más de lo que se lograría si no se negocia. Pero ¿Qué lograríamos por otros medios o negociando en otras instancias? Es de vital importancia conocer cuáles alternativas tenemos fuera de la negociación . Esto nos permite protegernos de un acuerdo que nos perjudique y satisfacer nuestros intereses lo más que podamos dentro de nuestras circunstancias, es decir tratar de conseguir lo máximo que podamos de a cuerdo a nuestras condiciones. Negociar sin conocer nuestras alternativas es negociar ciegos.
Se debe pensar en forma realista con los pies en la tierra. Generalmente se piensa: “primero negociemos y después se veremos que hacer”. Esto es un error y puede provocar incertidumbre sobre que podemos aceptar y que no. Además, estamos perdiendo una fuente de poder para negociar. También es importante visualizar el MAAN de la otra parte, para ubicarnos con respecto a ella.
El MAAN no solo hay que visualizarlo, también hay que fortalecerlo y trabajar en estas alternativas. Puede convertirse en una forma de obtener un mejor acuerdo ya que trabajar estas alternativas aumenta el poder de negociación y la seguridad que se tiene. Si las alternativas que son muy limitadas se debe trabajar en aumentarlas o fortalecerlas. El poder en una negociación no depende de la riqueza, de los contactos políticos o de la fuerza. Depende de cuán atractivo sea para cada una de las partes la opción de llegar a un acuerdo. A su vez esto depende de cuán fuerte sea nuestro MAAN
Preguntas:
¿Qué podemos hacer por nuestra cuenta para satisfacer nuestros intereses?
¿Qué puede hacer Ud. unilateralmente para asegurar sus intereses?
¿A quién puede Ud. introducir en el proceso para apoyar sus intereses?
¿Qué sigue?
Utilizamos preguntas , lluvia de ideas u otra via para identificar nuestra mejor alternativa a la negociación.
Decidimos si nos conviene o no negociar.
Promovemos y fortalecemos nuestras alternativas fuera del acuerdo.
Nos preocupamos por conocer el MAAN de la otra parte.
¿Cómo manejar “un comportamiento duro”?
Lo primero que debe hacer ante un comportamiento duro o un engaño es hacerlo evidente y ponerlo sobre la mesa. Si lo están presionando psicológicamente o están apurando las cosas y tratan de “meterlo en un zapato”, no juegue el juego. No se deje presionar haga evidente y manifiesto que usted reconoce que tratan de presionarlo y que no desea negociar de esa forma. Tome en cuenta:
· Que las personas con las que usted negocia sean las que tienen el poder de tomar la decisión. No permita que le hagan perder su tiempo.
· Si usted ignora o deja pasar un comportamiento que le molesta, sin duda este comportamiento seguirá e incluso aumentará. No deje que lo manipulen psicológicamente
· Tome en cuenta que le pueden estar escondiendo información, si tiene duda hágalo saber, utilice su derecho a estar seguro y consultar otras fuentes.
¿Que debemos tomar en cuenta a la hora de realizar un acuerdo?
· Los criterios evaluadores y condiciones: legalidad, equidad, eficiencia técnica, efectividad.
· Cuidar el proceso en el que se llega al acuerdo. ¿Cómo se llega al acuerdo? ¿Participaron todos lo que debían participar?
· Contenido: revisar que tenga los contenidos formales mínimos.
· Legitimidad. ¿Quién firma? ¿Está legitmado para hacerlo?
· Realidad: ¿Cuánto cuesta aplicar el acuerdo? ¿Cuánto tomará?
¿Para qué nos sirve la información legal?
· Puede servir para medir la seguridad de los acuerdos, en función a la posibilidad o no de exigir la aplicación de estos si el cumplimiento es voluntario.
· Puede ser importante para definir el MAAN de los actores, las posibles mejores opciones y las posibles peores opciones.
· Es una cuestión clave en relación con el balance de poder, sobre todo si alguno de los actores es una institución pública.
· La información legal puede ser un elemento importante de empoderamiento para grupos en situación de desventaja (grupos comunales, campesinos), con una situación fuerte pero desconocida.
Tome en cuenta:
· No podemos aprender a volar un avión con solo leer el manual. Lo mismo sucede con la negociación es una cuestión de práctica y sentido común.
· Preguntar si alguien ganó una negociación es como preguntar quién está ganando en un matrimonio. No es una cuestión de ganar o perder.
· El buen negociador no es aquel que se define a sí mismo como el que “las gana todas”, sino el que logra que todos los que tuvieron que ver con la negociación sientan que han tenido éxito con la solución adoptada. El buen negociador procura que todos se sientan satisfechos para que la relación mejore y el acuerdo se cumpla.