INTRODUCCION

AL APELLIDO BAEZ

 

 

Es el de los Báez un antiguo apellido, relativamente frecuente y repartido por toda España, si bien es recurrente en las Islas Canarias y en Andalucía. La etimología de este apellido se presenta dudosa, pues a pesar de su aspecto patronímico, no es fácil determinar cuál fue el nombre propio al que se añadió la partícula (ez)

En opinión de algunos filólogos podría tratarse de una variante del nombre y apellido PAEZ, con cambio de sorda (p) en sonora (b).

Tal es la opinión, por ejemplo, del acreditado filólogo don Gutierrez Jibón, quien en su Diccionario etimológico comparado de apellidos españoles, hispanoamericanos y filipinos, escribe que proviene Báez del nombre de pila PELAYO, siendo su patronímico de este. Pelayo, añade Jibón, procede del latín pelagius, a su vez procedente del griego pelagius, con el significado de “marino”, “hombre de mar”, “el que pertenece al piélago”. De Pelayo derivaron patronímicos Peláez, Páez, Páiz, Paes, Pais, Paesa, y Báez, así como Baes, este último en Filipinas.

Para otros autores, sin embargo, el origen del apellido Báez es otro, pues sostienen que proviene del vocablo portugués baez, del latín badius, “rojizo”, derivado a su vez de bazo, color determinado de la tez o del cabello (no confundir con el órgano corporal del mismo nombre).

Sea como fuere, lo cierto es que hubo ramas de este antiguo apellido en distintas regiones españolas y en Portugal. En nuestro país los hubo, en Extremadura, Galicia, Castilla y Andalucía, desde donde pasaron en gran numero a las Islas Canarias. También pasaron algunos individuos de este apellido a la conquista de América, alcanzando en aquellas tierras una amplia difusión.

En nuestros días llevan el apellido BÁEZ, en España, unas dos mil ochocientas familias, la mitad de las cuales, aproximadamente, se hallan radicadas en las Islas Canarias. En la Península Ibérica tiene los BÁEZ sus principales asientos en las provincias de Barcelona (como resultado de la emigración en los años cincuenta del siglo XX ), Sevilla, Málaga, Huelva, Cádiz y Badajoz; asientos menores encontramos en otras provincias, entre ellas en la de Salamanca, Vizcaya, Valladolid, Córdoba, Granada, Guipúzcoa, Álava, Valencia y Cáceres.