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¿POR
QUÉ SOMOS DELINCUENTES?
¡PORQUE SOMOS DELINCUENTES!
Hay drogadictos en todas partes y
en todas partes están perseguidos. A esos drogadictos alguien
les vende la droga, a estos tenderos se les llama camellos. EN
TODAS PARTES ESTAN PERSEGUIDOS.
Hoy por fin los
drogadictos y los camellos, los camellos drogadictos y los
drogadictos camellos, se han unido en Zaragoza. Quieren
librarse del acoso y la represión al que se ven sometidos.
Para ello luchan, defienden la postura anti-prohibicionista
con uñas y dientes. Ellos han sido encerrados en oscuras
celdas, cacheados y multados en la calle y a plena luz del
dia, vejados en sucias comisarías ... Todo con total
impunidad, dado que su persecución ha sido llamada legalidad.
Una legalidad que ha causado más muerte y sufrimiento que la
heroína en sus buenos tiempos.
¿Por qué somos malos los
drogadictos? Porque somos delincuentes.
¿Por qué somos delincuentes los
drogadictos? Porque lo dice la ley.
Nos llaman delincuentes y así lo
somos, aseguran desde el Frente Anti-Prohibicionista de
Zaragoza (FA-PZ en adelante), dado que el delito lo marca la
ley y quienes la hicieron no tomaban drogas "de las malas".
Los prejuicios religiosos, los hábitos y el caliz tuvieron
mucho que ver con la ilegalización, sin ocultar la evidencia
de la temible ADICCIÓN. Estos factores nos han lanzado de
cabeza al presente prohibicionista. Intentaron librarnos de un
mal y nos causan, día a día, uno mayor.
Consumir drogas o no hacerlo, no
sólo es una decisión personal (o deberia serlo), es una
imposición social. Ellos dictaminaron qué es bueno y qué es
malo. Obraron en consecuencia: El trabajo se santificó, al
igual que la sangre de Cristo. Nosotros tuvimos la mala suerte
de no intervenir en el dictamen y convertirnos así, por
nuestra forma de vida, en peligrosos criminales capaces
clavarle su jeringuilla infectada de SIDA a una niña
indefensa, para robarle cruelmente el dinero que su laborioso
papá le habia dado para comprar golosinas en la tiendecita de
debajo de su dulce hogar. Esta es la imagen que quieren que
demos, para justificar la represión, pero la realidad es mucho
más compleja y más se enreda cuanto mejor deseas
comprenderla.
Los autenticos delitos ni son la
tenencia, ni la venta, ni el consumo de estupefacientes. Los
delitos llegaron después. Cuando la ilegalidad disparó los
precios y redujo la calidad, generando mafias sin escrúpulos
(vease el sonado caso de Chicago durante la Ley Seca) que
convierten al debil en su diana y al fuerte (el estado) en su
aliado circunstancial, comenzó la inseguridad ciudadana,
ligada inevitablemente a la figura del "terrible yonki".
Entonces ... ¿Qué es mala la droga
o la ley?
No vamos a negar, como desearían
los rancios prohibicionistas, que la droga mata (destruye
cuerpo y alma). Ya ha muerto demasiada gente por ella como
para negarlo a estas alturas. Sin embargo mucha más gente ha
muerto por los efectos de la prohibición (adulteraciones,
ajustes de cuentas, ingresos en prision, atracos, propagación
del SIDA, etc). La droga tiene algo que atrae a parte de la
población pese a ser destructiva para quien la toma, mi vecino
el alcohólico lo dice siempre ...
Nadie tiene derecho a decidir por
nosotros lo que es bueno o malo para nosotros mismos, la
intención no cuenta cuando hablamos de represión. Por ello el
FA-PZ no busca cambiar la ley (legalización), ansía su
abolición (levantamiento de la prohibición). Para, de una vez
por todas, poder disponer libremente de algo que nos
arrebataron vilmente: La droga.
El camino recorrido por las leyes
prohibicionistas está manchado de sangre, sangre joven e
inocente que se pudre en la cárcel. Apostemos por el sendero
de la libertad y hagamos el camino al andar:
REPRESIÓN NUNCA MÁS.
!AMNISTÍA PARA
TODOS LOS PRESOS RELACIONADOS CON DROGAS!
y cese inmediato de la
prohibición.
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