Déjame llorar

Cuánto vacío hay en esta habitación,
cuánta pasión colgada en la pared,
cuánta dulzura diluyendo el ser del tiempo,
tantos otoños escondido y sin tí, solo.
Millones de hojas goteando en tu cuerpo,
otoños de llantos lloviendo en tu piel.

Iluminada y eterna, enfurecida y tranquila,
sobre una alfombra de hierba y vas volado dormida,
un imposible silencio enmudeciendo mi vida,
con una lágrima tuya y una lagrima mía.

Cuántas nostalgias durmiendo en el desván,
he declarado mi vida en soledad,
hago poemas de dolor que nunca olvido,
pues sobre nubes de este otoño las escribo, solo.
corazón que se para a llenar un suspiro,
haciendo de su oscuro vaho, dulce bebida en mí.

Iluminada y esbelta, enrojecida y sumisa,
sobre mi cuerpo de alas y así sonries cada día,
con una estrella fugaz te confundí la otra noche,
y te pedí tres deseos mientras duraba tu luz,
déjame llorar,
déjame llorar por tí.

Felix