A LA LUZ DE LA
LUNA A luz de la luna, tamizada por caprichosas nubes, fuimos descubriendo nuestro amor. La brisa proveniente del mar, nos servía de estímulo. Los dos éramos mas agua que tierra A la orilla del mar; en una, casi, obscura noche por el capricho de las nubes; nos declaramos nuestro amor. Ese amor que se encendió con la primera mirada A la orilla del mar; y a la luz de la tímida luna, que asomaba a través de las caprichosas nubes; nos fusionamos en un largo abrazo, para así sentirnos uno con la inmensidad de todo lo circundante KIKA 24-6-2000 |