CON TU PERMISO
Recorriendo los campos helados del triste sueño,
supongo que no sólo son mentiras tus palabras,
que también tiene algo de bueno,
que en el fondo son llanos,
agudos y esdrujulos alaridos
los que rasgan mis pulmones
y los que con sus garras arrancan de mi cuerpo
pedazos de sabia cristalizada
que usas para ver tu propio reflejo
a través de un espejo abstracto
que difumina la realidad,
convirtiendola en mil rayos en los que crees.
Al final,esa mirada tuya,
detiene el bombeo de mi vida
y el tic-tac de mi reloj de arena.
Al final sueño que no soy yo con quien sueñas tu;
que para ti, tan sólo existo;
que para ti, sólo soy, con tu permiso.
FERNANDO.