EVASIÓN No pregones ya más de lo que veo porque si antes tu empresa presintiera, haría lo imposible y lo que fuera para hurtar lo que aumenta este deseo. Porque mi voz se vuelve bisbiseo que se alza como un aura pendenciera para ondear como ondea la bandera sobre el pórtico cruel de un mausoleo. Ya no evadas ni ignores evidencias al esconderte en soles clandestinos, al engendrarte en versos vespertinos y experiencias que alargan inocencias Ya no enclaustres ausencias y mutismo que en ti no hay otra cosa que hedonismo. Ramiro Rodríguez |