DESTILAR

Nauseabundo destilar, de la rosa ya yerta.
Como se tambaleo, al abrir las ventanas,
ver la vida, la pogresión verídica
que nunca nada fue.
Helor suprema, mueca absorta... sin piel
tenue latir, angosta se vio
como el día aquél, dame tu hombro...¡Quédate!
No estuvo... -Efímero cabal-
Golpe bajo, a igual sentir
al tikar ese hombre en el bus
dos billetes, el otro...
-una bofetada-
ella sola se pago el pasaje.
Aún lavándose en el aguamanil
la verguenza sufrida
no la pudo aclarar.
Suciedad de bofetadas morales
¡arráncate ya de esa raíz!
Jamás podré comprender
la jauría voraz
del temporal arreciante,
los pétalos de la flor
efímeros són.
Correctamente... la vida,
homólogo del sufrir.

-Yedra-

Elisa Gómez