POEMA IX (de lA PALOMA PERDIDA)

Tenía un imán
el vuelo de la golondrina
buscando el sol.
De nuestras manos pendían
anclas sumergidas
en arena marrón.
La sucesión aunaba
otoños y primaveras.
Secuencias de adioses, bienvenidas
reactivaban impotencia.
Dolía en el punto de la cruza
y la coincidencia
clamaba libertad
Emilse Zorzut