Poemas de Teresita Vázquez
“ LA CENA”
Corta palabra de lo que pudo haber sido.
Me convidaste una noche a tu casa a cenar,
Y yo iba muy contenta, pues me gustas,
La cosa empezó muy bien, buena cena.
Querías que yo bebiera, pero no tengo costumbre,
esa es, fue como una prueba de cariño me dijiste,
La cosa empezó muy bien, algún beso tu me diste
Yo me encontraba feliz entre tus brazos, en el baile.
Poco a poco, hasta el jardín, me llevaste enlazada,
Tus brazos eran muy fuertes, y mi cintura apretabas!
¡Yo me dejaba llevar, bailaba como mariposa,
Más volaba que bailaba, era como una ilusión!
Parecía estar soñando. Pero yo estaba bailando,
Con el hombre que yo amaba. ¡Pero esa noche!
¡Comprendí la realidad, tu buscaba otra cosa,
Inocente y confiada hasta tu casa yo fui soñando!
Pero confiaba en ti, siempre fuiste un caballero,
Era tanta mi ilusión, y me dejaba besar con pasión
En tus brazos, las horas, se me pasaban volando
Sentía mucha vergüenza, pero a gusto me encontraba.
‘Dicen que el amor es ciego, esa noche comprendí
que en tus brazos no caí, porque el destino es así!
¡Eso fue como un aviso, a mi casa yo me fui con pena
y por más que me supliques, no vuelvo a repetir la cena!
“ LOCURA DE AMOR”
Dicen que el amor es loco
Y yo no lo creo a sí
La locura de un amor
Es quererse de verdad,
Es desear que te besen
Que tus caricias no falten
Si es entrega verdadera.
Es tanto lo que te quiero.
Que solo estando a tu lado
Con ello yo soy feliz,
¡Aunque te vas alejando,
Pues yo lo noto enseguida!
La locura de un amor,
Es lo que yo, siento por ti,
¡Sin querer me vuelves loca
y loquita estoy por ti!
Dicen que hubo una Reina,
Y que murió por amor,
¡Pues la tomaron por loca
Por lo mucho que ella amó!
No quiero que a mí me pase,
Lo que la Reina sufrió,
Quiero abrazos y tus besos,
¡No quiero me dejes nunca,
no quiero, morir de amor!
A FEDERICO GARCÍA LORCA
¡Ya te encuentran Federico!
en un barranco tu estabas,
acribillado a balazos
Nadie comprende la causa.
Te rendimos homenaje
con campanitas de plata
la luna mirando al Cielo
lleno de flores estabas,
que rodeaban tu cuerpo
¡era como una mortaja
que te encontraran así!
el Dios de los Cielos quiere
que donde tu estés ahora,
Mirarás con ironía.
Pero nos dejas recuerdos
obras con un gran talento
¡y por eso te mataron, Federico!
no supieron comprender
“esto fue una villanía”
eras joven todavía,
pero nos dejas recuerdos
Del talento que tenías.
Como tanto recordamos
los que siempre te quisimos,
comprendemos tu valía,
“Tu no has muerto Federico.”
vives siempre entre nosotros
hoy venimos a ensalzarte,
y demostrarte cariño,
Como tú, te merecías.
“ LA FUERZA DEL VIENTO”
Siento una fuerza interior
que me hace sucumbir,
¡Me hacen falta tus caricias
Para yo poder vivir!
Que es lo que siente mi alma
cuando no estás junto a mi,
¡es una fuerza tan grande,
no lo puedo resistir!.
Siento deseos de amarte
de tenerte junto a mi
es tan fuerte como el viento
no me separarme de ti.
Pues yo sin tu amor no vivo
tus brazos son los amarras,
¡ni con la fuerza del viento
puedan ya, de ti apartarme!
Jamás podrás conseguirlo
Pues por mucho que lo intentes,
Siempre me tendrás contigo
Pues no hay viento que lo arranque.
“ A MI QUERIDO PADRE”
Un gran padre tuve yo
Y nunca lo olvidaré,
Fuiste mi padre y mi madre,
Pues muy chiquita perdí
a la que me dio a mi el ser.
Es muy duro para mí, el recodarte
Me faltaron tus caricias cundo yo necesité,
Pero tuve yo la suerte, de tener un padre al lado
Y bendeciré su nombre mientras viva,
Pues padres como el que tuve,
Es difícil encontrar, con ese recuerdo vivo,
Por muchos años que pase, yo no olvido.
Me hizo ser mujer valiente
Su nobleza yo heredé, me decía muy bajito
Si eres buena, muy dichosa puedes ser,
Pero ojo hija mía, pues la vida es muy ingrata
Y cuando menos lo esperas,
Un desengaño te llevas, ¡pues la viada es así!
Y no se equivocó en nada,
La vida me dio zarpazos
Pero sigo siendo honrada, tal como tu me enseñaste.
Tus consejos fueron buenos, y las gracias yo te doy,
Pero ha sido fuerte mi lucha, y poderlo conseguir
Por muchos años que pasen, te doy la razón a ti.
Fuiste mi padre y mí madre
Era una misión muy dura,
Pero yo saqué el provecho
¡Con tu cariño lograste lo que he sido,
Que fuera una mejer fuerte, pero pura!
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