ANCIANIDAD Gira el calesín de los recuerdos en la frágil memoria de la anciana, arrugadas páginas de su libro de vida se incendian en la llama de la vejez que todo borra. Plisada piel que oculta en sus flexuras sinsabores, sufrido embalaje que se distiende entre gesto y mueca... intenta esbozar una sonrisa al tiempo que se escapa entre sus escasos dientes el último aliento. CUANDO DUERMES Sueños atrapados en pestañas queriendo escapar de los ojos, dulce vaivén de puertas en la nariz, mentón incitante, hálito que enciende, volcán en reposo, virilidad que agrede, eso eres tú, eso eres, cuando duermes. LINEAS Se vienen a mí como embalsamadas serpientes que sucumben a mis pies, líneas del progreso en el pavimento que pasan o se quedan en mi piel marcando el paso inevitable de los años, pequeños abismos, tumba de microscópicos seres, de experiencias fraguadas en el asfalto de los sueños. Líneas de espera eterna, abismos insalvables para este amor otoñal. Rectas como el camino que nos lleva a la muerte, rígidas ordenes para los soldados hecho pasos, intransigentes lechos de minúsculos arroyos, destructivas raíces del progreso que me apartan de la única línea que me importa... la que ha de traerte a mí, que se hace invisible, que se hace imposible, que no me deja ser feliz. Mariadeflor |