Número 17, junio - julio 2003
VIGILANCIA TECNOLÓGICA>> Editorial
 
  Anticipación y configuración del futuro      
Jesús Rodríguez Pomeda
Profesor Asociado de Organización de Empresas
Universidad Autónoma de Madrid
jesus.pomeda@uam.es
 

Los más lúcidos análisis de la situación económica mundial desde finales de 2001 no dejan de señalar diversos factores que han originado la más severa crisis de confianza desde 1929.

En efecto, el marasmo geopolítico que se manifestó con el derrumbe de las Torres Gemelas confluyó con un sinfín de escándalos empresariales en la primera economía del planeta. Como resultado, inversores y agentes económicos en general han puesto en tela de juicio el funcionamiento correcto y normalizado de muchos mercados (bursátiles, factoriales, ...), lo que, en buena lógica, ha conducido a una mayor aversión al riesgo de todos cuantos en ellos operan.

Sin embargo, la lógica de la economía de mercado obliga a empresas y otros agentes a afrontar constantemente un imposible conocimiento del futuro. En efecto, variables tales como la demanda futura o los cambios en los gustos de los consumidores son determinantes a la hora de adoptar en el presente decisiones cruciales tales como la inversión o el lanzamiento de nuevos productos y servicios.

En este contexto de incertidumbre exacerbada (que afecta a los propios cimientos del sistema económico) cobran más importancia si cabe los esfuerzos que los directivos empresariales llevan a cabo para poder conocer de antemano las tendencias que regirán los mercados durante los años sucesivos.

Traemos a las páginas de madri+d un conjunto de colaboraciones del máximo interés para enfocar el problema citado desde una perspectiva moderna que resulte de utilidad especialmente en lo que respecta a la dimensión científico-tecnológica de la empresa.

No resulta nuevo el planteamiento según el cual la empresa debe competir para crear y dominar las oportunidades que van surgiendo en el entorno. Desde los trabajos que durante la década de 1970 dieron origen a la prospectiva, mucho se ha avanzado en el estudio sistemático de las condiciones competitivas futuras. Tampoco es ajena a la conducta de las empresas más dinámicas la idea de proactividad: trabajar de forma práctica para que esas condiciones incipientes que presenta el futuro se amolden a los planteamientos estratégicos de la propia organización.

Así (como ya señaló Twiss en 1988), la prospectiva se convierte en una herramienta imprescindible para la toma de decisiones, y se apoya en tres pilares básicos:

  • vigilancia del entorno,
  • estimación de la escala temporal de ciertos sucesos relevantes, y
  • perfeccionamiento de la información utilizada en las decisiones previas.

En esta línea, el trabajo del profesor Morcillo pone de relieve la importancia que para la empresa cobra en estos días turbulentos la creación de un sistema propio de alerta que le permita adoptar las decisiones oportunas con la agilidad requerida por la dinámica de los mercados contemporáneos. Resulta claro que la empresa ha de integrar las informaciones originadas en dicho sistema con todos los procedimientos de creación y difusión del conocimiento competitivo. Será entonces cuando alcancen su verdadera entidad, ofreciendo a la empresa capaz de desarrollarlos una aportación crítica al logro de la ventaja competitiva.

Estos sistemas internos de gestión de la información, como destaca el trabajo del profesor Merino, confieren la necesaria capacidad de respuesta a la estrategia empresarial. Tal agilidad procede del carácter retador que toda anticipación del futuro ha de tener. En efecto, cualquier configuración de un escenario futuro desafía la mentalidad vigente al mostrar modos impensados de organizar los factores de producción.

Tal vez el lector piense que estas son cuestiones alejadas de la actividad empresarial cotidiana y, especialmente, de aquellas que constituyen la mayor parte de nuestro censo empresarial: las pequeñas y medianas (PYMES).

El artículo de Del Pozo y Gayo recoge algunas de las ventajas más destacadas que para las PYMES representan los Círculos de Innovación, en especial, el acceso a información oportuna y relevante para la toma de decisiones.

En una línea argumental que podríamos calificar de complementaria, los trabajos de Albert y Martín y De la Calle subrayan el valor que el conocimiento tiene para toda empresa –pequeña o grande- puesto que le permite el encuentro ágil y preciso con la demanda incierta que se manifiesta en el mercado.

En nuestra sección de Investigación aparecen tres artículos que giran en torno a otros aspectos del sistema de innovación. En el primero de ellos, debido a Bueno y otros, describe los principales resultados de un proyecto de investigación patrocinado por la Comunidad de Madrid orientado a la elaboración de un modelo de gestión de la actividad investigadora llevada a cabo en Universidades y Organismos Públicos de Investigación (OPIs) de nuestra región. Los restantes artículos de dicha sección giran en torno a determinados resultados (así como sobre indicadores relevantes para aproximarlos) del Sistema de Innovación de la Comunidad de Madrid.

Completamos la presente entrega de nuestra revista con las restantes secciones habituales:

  • Quién es quién, donde acercamos a los lectores algunas opiniones de Lora-Tamayo, recientemente nombrado presidente del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), y de Álvarez de Arcaya, destacado directivo de una pujante e innovadora empresa como es Alcatel Espacio.
  • Innovaciones de éxito y Transferencia de Tecnología, con el caso de Cytochrome S.C.
  • La I+D en cifras, que presenta datos relevantes del aspecto público del Sistema de Innovación de la Comunidad de Madrid.
  • La I+D en la Red, con tres propuestas de otras tantas páginas electrónicas que esperamos resulten de utilidad para nuestros lectores (http://www.tecno-logica.net/, http://www.tendencias21.net/ y http://www.investigaempresa.com/).
  • Línea directa con Madri+d, con interesantes ideas referidas a fiscalidad, financiación, comercialización y régimen legal de las patentes.
  • Reseñas bibliográficas, donde presentamos sendos análisis críticos de Benavides y Quintana (2003), así como de CETISME (2003).
  • Con otro aire, nuestro colofón, en el cual el profesor Morcillo retrata con humor una figura habitual en muchos entornos: la del oportunista.

En suma, esperamos que esta propuesta suscite el interés de nuestros lectores, y les sirva de motivo de reflexión sobre la importancia que el análisis y pronóstico del entorno cobran en estos tiempos difíciles.