La vocera aseguró
que es la primera vez que se descubre un esqueleto tan bien conservado
de un Tarbosaurio (Tarbousaurus) de unos cinco años de edad,
del que se ha recuperado el 80 por ciento."Sólo le faltaba
la parte del cuello y de la cola", apuntó la vocera
acerca del esqueleto, formado al parecer por más de 300 piezas.
El esqueleto fosilizado tiene dos metros
de largo, por lo que se cree que el animal era joven, ya que ese
tipo de dinosaurios podían llegar a medir casi doce metros
y pesar hasta seis toneladas.
Este descubrimiento fue realizado en agosto
de 2006 por los investigadores japoneses de la empresa de biotecnología
Hayashibara, que dirige el Museo de Ciencias Naturales, y la Academia
de las Ciencias de Mongolia. Se tardó tanto en dar a conocer
el hallazgo, debido a la dificultad de extraer cada pieza del fósil,
lo que llevó más de mil horas de trabajo, según
los científicos japoneses.
El Tarbosaurio era un dinosaurio carnívoro
que habitaba el desierto del Gobi y que, al igual que el Tiranosaurio
que vivía en América, fue uno de los últimos
supervivientes de estos animales, que se extinguieron por causas
todavía no aclaradas a finales del período Cretáceo,
hace unos 65 millones de años.
www.clarin.com,
Jueves 24 de julio de 2008
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