Máxima
tensión en Medio Oriente
Ofensiva israelí en el Líbano
El gobierno de Olmert envío tropas tras el secuestro de dos
soldado y ordenó a las fuerzas armadas "alejar de la
frontera la amenaza de Hezbollah"
JERUSALEN.-
El gobierno israelí ordenó a las fuerzas armadas "alejar
de la frontera la amenaza de Hezbollah", informó la
radio pública israelí al término de la reunión
de gabinete celebrada de urgencia.
El
primer ministro israelí, Ehud Olmert, se reunió con
los ministros del gabinete político-militar para autorizar
operaciones especiales contra el Líbano, agregó la
fuente.
"Los
secuestros (de los dos soldados) marcan una escalada en toda la
región e Israel pretende actuar de manera adecuada porque
es claro para todo el mundo que la responsabilidad de este caso
viene de la parte del gobierno libanés", declaró
el ministro de Gabinete Yitzhak Herzog.
El
funcionario eludió precisar los objetivos que podría
atacar su país ni la amplitud de las operaciones autorizadas,
pero destacó que algunos miembros de Hezbollah que reivindicaron
el secuestro de los dos soldados integran el gobierno libanés.
Ataques.
La aviación israelí atacó dos puentes en el
sur del Líbano y llevó a cabo simulacros de ataques
sobre varias áreas cerca de Beirut y de la ciudad de Sidón,
sin que se sepa de víctimas hasta el momento, anunció
la cadena de televisión libanesa LBC.
La
aviación israelí destruyó el puente sobre el
río Damur, a 20 km al sur de Beirut, cortando de este modo
la autopista en dirección a Líbano sur, anunció
la policía.
Al
mismo tiempo, los aparatos israelíes sobrevolaron a baja
altitud las colinas de dicha localidad, así como la de Naameh,
donde el Frente Popular para la Liberación de Palestina-Comando
General tiene bases, que a menudo son blanco de los ataques aéreos
israelíes.
Respuesta
de Hezbollah El Hezbollah libanés chiita anunció en
un comunicado haber bombardeado la posición de Bramit, bajo
el "mando del ejército israelí" en Galilea,
en el norte de Israel, y aseguró que su ataque dio en el
objetivo.
La
Resistencia Islámica precisó en un comunicado que
"bombardeó con artillería y con cohetes el centro
de mando del contingente de Galilea, en Branit, en represalia por
las agresiones continuas del enemigo israelí".
Secuestro.
El Hezbollah anunció en un comunicado que capturó
a los dos soldados y quiere cajearlos por detenidos en Israel, sin
precisar cuáles.
El
anuncio de la captura fue recibido por intensas manifestaciones
de alegría en el suburbio chiita de Beirut controlado por
el Hezbollah.
Según
la policía libanesa, los dos soldados fueron secuestrados
en territorio libanés, en la región de Aita al-Chaab,
donde una unidad israelí había penetrado en la mañana.
Este
mediodía, el primer ministro israelí Ehud Olmert calificó
la incursión de Hezbollah de "acto de guerra",
adjudicó la responsabilidad al gobierno libanés y
prometió que la represalia sería "moderada, pero
muy, muy, muy dolorosa".
Esta
captura espectacular por el Hezbollah, apoyado por Teherán
y Damasco, la primera de este tipo desde hace seis años,
se produjo durante enfrentamientos generales en la frontera israelí-libanesa.
Dos
civiles libaneses murieron y cinco resultaron heridos por el bombardeo
lanzado por los israelíes, según la policía.
El
primer ministro israelí Ehud Olmert afirmó que quienes
"traten de debilitar la determinación de Israel pagarán
un alto precio por sus actos".
Ocupación
terrestre. Después del anuncio del secuestro de los dos soldados
por el Hezbollah, el ejército israelí lanzó
una operación terrestre y aérea contra el Líbano,
la primera de esta envergadura desde el retiro militar israelí
del sur del Líbano en mayo de 2000.
Israel
continuaba sus bombardeos aéreo y terrestre contra el sur
del Líbano y posiciones del Hezbolá, hiriendo a 4
civiles, según la policía.
Los
bombardeos contra puentes dejaron aislado el sector oriental, en
particular la región de Tiro (90 km al sur de Beirut), de
la parte sur del Líbano, según corresponsales en el
terreno.
En
la mañana, decenas de cohetes de tipo Katiusha y obuses de
morteros disparados desde el Líbano cayeron en Galilea, al
norte de Israel y dejaron cuatro heridos, según fuente militar
israelí.
El
ejército israelí replicó bombardeando con artillería
Aita Al-Chaab y varias otras localidades fronterizas de sudoeste
libanés.
Bombardeo.
Una hora después, el Hezbollag bombardeó posiciones
del ejército israelí que ocupa las granjas de Cheeba,
en los confines de Líbano, Siria e Israel.
Condena
internacional. Estados Unidos, la ONU, la Unión Europea,
Francia y Alemania expresaron su preocupación. El secretario
general Kofi Annan pidió la liberación inmediata de
los soldados israelíes y condenó la represalia israelí
en el sur del Líbano.
Agencias
AFP, ANSA, EFE y AP
La Nacion, Miércoles 12 de Julio de 2006 |