«Apenas unos pocos días atrás mantuvimos un ameno y cordial diálogo telefónico con la hija del maestro Enrique Cadícamo, Mónica, a fin de estar al tanto de lo que parecía un ligero problema de salud que le obligó a guardar reposo en una afamada clínica y aprovechar la ocasión para hacerse un chequeo general. Su hija nos rogó ser emisarios de sus cariñosos saludos y permanente recuerdo al pueblo de General Rodríguez. Asimismo agradeció a los medios periodísticos en general por su constante atención para con su padre. Finalmente y en su nombre manifestó su gratitud para con este periódico que le es enviado a su hogar de Capital Federal invitándonos a recoger el ejemplar de "Mis Memorias" publicado por Editorial Corregidor especialmente dedicado. Mientras aguardábamos con optimismo la recuperación del maestro y con ella la ocasión privilegiada en que podríamos mantener una charla con Dn. Enrique, nos sorprendió la noticia de su fallecimiento a los 99 años que repercutió por supuesto en todo el país.

Ciudadano Ilustre de la Ciudad de Buenos Aires, Ciudadano Ilustre de General Rodríguez en 1991, su biblioteca municipal lleva su nombre. En una carta el querido maestro señalaba "soy un poquito de Luján y General Rodríguez" aludiendo a la polémica del sitio de su nacimiento agregando con su humor característico su similitud con el poeta griego Homero de quien siete ciudades se disputaban el honor de ser su solar de nacimiento. En tanto es opinión del prof. Dardo Malvino descartar a General Rodríguez como localidad natal del Maestro; la confusión puede surgir de la ausencia de registro civil en ésta y su inscripción en Luján; sea como fuere y más trascendente que esto, es su monumental obra y el cariño permanente que tuvo para con los vecinos de General Rodríguez, cariño recíproco de todos los que lo conocimos y tratamos directamente, y el que supo despertar en todos a través de su amor por el tango. Se ha ido un 'guapo de la guardia vieja' fiel a los suyos, no quiso fallarles ni tener la arrogancia de transponer los límites del siglo XX, prefirió acompañarlos y pertenecer, junto a Gardel, Goyeneche, Contursi, Le Pera, Manzi, Troilo y tantos otros a las glorias de este siglo.

Acción el Periódico de General Rodríguez, 20 de diciembre de 1999.