Aplausos
y risas
Abrimos las manos, arqueamos la espalda, bajamos la mirada.
Andamos, seguimos y andamos, pensando que vamos de tránsito siempre.
Pensamos mucho, todo el día. Por la noche vivimos, alojamos fantasmas,
sacamos lo peor de nosotros mismos
Creemos en nada, mentimos. Nos paseamos de un punto a otro, a veces hacemos
círculos. Plagamos las calles, somos cómplices de nosotros
solamente. Plagamos las casas, usamos los baños, tomamos la comida
que necesitamos Nos chocamos con sombras al cruzar las puertas. Nos disfrazamos.
Nos mentimos a la espera de un mesías, no nos lo creemos nunca.
Nuestra excusa es nuestro vientre maltrecho, palpándolo nos distinguimos,
despilfarrándonos mejoramos al resto
No somos nadie; los espectadores de todo, los farsantes de todo. La sociedad
gana, el dolor basta. Esta milicia no quiere guerra, esta salida no quiere
meta.
Vamos a heredar el trocito más pequeño del mundo. Casi casi
será un adoquín, para progresar en nuestra introspectiva,
en nuestra lucha de la reflexión. Para frenar este tránsito
no tienes más que colocar una silla, nos verás pelearnos
por el asiento de la insurrección
Entonces, por qué de tránsito:
De tránsito por transitar, sin alterar una pizca a los viejos del
quinto. Tenemos algo en común con ellos: también nuestro
tránsito cabe en un paseo a media mañana por el parque,
junto a las palomas.De tránsito por transeúntes, como mulas
o palurdos en Las Hurdes.
De tránsito por celebrar el Tránsito el 15 de Agosto, fiesta
de conmemoración de la muerte de la Virgen María.
De tránsito por transitable, por ser capaces de transitar por el
camino más fácil.
Por tránsito recorremos la distancia entre dos puntos. Los puntos
que ya ocupamos nos los intercambiamos para acabar nuestro recorrido.
Transitamos los unos hacia los otros, pero entre nosotros siempre. Con
cada uno en una base los del tránsito cumplimos con nuestra vuelta
a un campo de béisbol.
(Aplausos y risas).
Dani.
|