El
Gobierno limitará la llegada de familiares de inmigrantes
por reagrupamiento
20MINUTOS.ES.
14.06.2008
Los
padres quedan excluidos de este derecho y los jóvenes entre
16 y 18 años deberán tener contrato de trabajo.
Los más pequeños sólo podrán entrar
en determinados períodos del año, para evitar problemas
en los colegios.
Los cónyuges son los únicos que lo tendrán
más fácil, pues tendrán permiso de trabajo
automático.
El ministro Corbacho presentará la ley en otoño.
El
Ministerio de Trabajo ya tiene perfilado el contenido de la nueva
ley de inmigración que va a impulsar a partir de otoño.
En ella, se excluye del reagrupamiento familiar a los padres de
los inmigrantes, se limita en el caso de los hijos de entre 16
y 18 años y se prevé que los niños sólo
vengan en determinadas épocas del año, según
ha explicado el ministro, Celestino Corbacho, a El Periódico.
La
intención de Corbacho es presentar sus "propuestas
y reflexiones" en la primera Conferencia Sectorial de Inmigración,
organismo de participación de las
comunidades autónomas que se constituirá a mediados
de julio; luego lo hará con los agentes sociales y, una
vez alcanzados los acuerdos, tramitará los correspondientes
proyectos de ley en el Congreso tras el verano, según la
información publicada hoy.
La
propuesta más articulada como tal es el veto a la llegada
de menores de entre 16 y 18 años sin oferta laboral. Con
ello, Corbacho cree que se evitaría el actual fenómeno
de los jóvenes extranjeros que "acaban pasando los
días en la plazas y calles de los municipios porque ya
han superado el límite de la enseñanza obligatoria
y no tienen trabajo, ni siquiera la posibilidad de optar a cursos
de formación ocupacional". Corbacho lo sabe porque
en los barrios de L'Hospitalet, ciudad de la que fue alcalde hasta
el pasado abril, tenía siempre a 500 ó 600 chavales
en esta situación.
El
reverso de la moneda será que la llegada a España
de cónyuges reagrupados comportará automáticamente
la concesión del permiso de trabajo, una demanda reiterada
por una multitud de organizaciones e instituciones y que figuraba
en la oferta electoral del PSOE.
Otro
problema a resolver es la llegada de menores durante todo el curso
escolar, que obliga a los colegios a una constante labor de adaptación
e incluso ha hecho surgir en Cataluña la polémica
propuesta de las aulas de acogida. Un reciente estudio del Instituto
Nacional de Estadística cifraba en más de medio
millón los menores extranjeros cuyos padres tenían
la intención de reagruparlos en los próximos años.
"¿Debemos
mantener abierto el derecho a reagrupar durante 365 días
al año, con la presión que significa tener siempre
las matrículas vivas?", se pregunta el ministro, para
responder en El Periódico que "sería útil
establecer un determinado período para este tipo de llegadas
que permita preparar la respuesta de las escuelas con un mínimo
de previsión". "Es una reflexión",
advierte, y añade que, antes de formular una propuesta
articulada, esperará a escuchar las opiniones tanto del
sector educativo como de las comunidades autónomas.
Los
peor parados en la nueva ley serían los padres de los inmigrantes,
que quedarían excluidos del derecho al reagrupamiento familiar.
Para el ministro, "no forman parte del núcleo de la
familia, que es el matrimonio y los hijos", y además
son población pasiva que "somete al sistema social
a un estrés que afecta no solo a los españoles,
sino a los inmigrantes que residen aquí". Muchos países
no permiten reagruparlos y Corbacho cree que hay que seguir ese
ejemplo, aunque también esta es una "reflexión"
abierta al debate social.