Superar los propios límites ha sido el motor de la Humanidad desde tiempos inmemoriables. El mito de Ícaro resulta una muestra del deseo de nuestros antepasados de no limitarse a vivir en dos dimensiones.

Ya en el Quatroccento italiano, Leonardo da Vinci realizó estudios y maquetas de aparatos que deberian permitir a las personas a elevarse por los aires, o por lo menos a descender desde las alturas hasta el suelo sin accidentes.

Sin embargo, no es hasta el siglo XX en el que este sueño se hace realidad. Primero con el desarrollo de la aviación, y después con la invención del paracaidismo, la humanidad tiene la posibilidad de experimentar las sensaciones hasta entonces reservadas a las aves.

En la actualidad, los progresos tecnológicos permiten una extraordinaria variedad de deportes aéreos, con una altísima seguridad. El ejemplo más claro lo tenemos en los saltos en Tandem. donde cualquier persona, de toda condición física o edad puede experimentar el placer de la caída libre sin ningún esfuerzo, gracias a un arnés doble que le une a un instructor, que es quien realiza todo el trabajo.

Existen dos modalidades básicas en este deporte: con el paracaídas cerrado (caída libre) y con el paracaídas abierto. De ambas, la más practicada es la caída libre y con mayor frecuencia las alineaciones en el aire con varios saltadores que hacen figuras, lo que se conoce como trabajo relativo, porque se sube o baja pero sólo con respecto a otro participante; también se encuentran el estilo y vuelo libre, además del skysurfing. Por otro lado, lo más frecuente con el paracaídas abierto es buscar la precisión en el aterrizaje.

En nuestra situación, deberíamos hablar de "caída libre", mas que de "paracaidismo", ya que en el caso que nos ocupa, el paracaidas no es más que un simple instrumento para poder aterrizar.

Los saltos se realizan desde una altura de unos 4.000 metros, y la caída dura algo menos de un minuto, en el que se habrán de realizar todos los movimientos con la máxima precisión, a una velocidad aproximada de 200 kmh/h, lo que explica la gran dificultad de este deporte, requeriendo una enorme concentración y muchas horas de entrenamiento.

Nuestro equipo se engloba en la modalidad de skydiving en formacion a cuatro, o VF4. Esta modalidad consiste en saltar desde el avión, y en un tiempo de 35 segundos desarrollar, en caída libre, una secuencia de formaciones que se predetermina mediante un sorteo previo.

Todo esto se puede calificar gracias a la grabación en directo del cámara del equipo. Su papel es muy importante, dado que la puntuación solo puede basarse en esta filmación. Por eso, los cámaras son realmente una parte del equipo, y se trata de verdaderos expertos en filmación en caída libre.

 

Modalidades
Canopy
Con los paracaídas abiertos varios participantes realizan formaciones en el aire. En una competición se califica la rapidez para agruparse o para realizar varias alineaciones en un solo salto.
Skydiving
En caída libre, varios participantes realizan trabajo relativo, al maniobrar en el aire, para formar diferentes figuras preestablecidas con la mayor exactitud en el menor tiempo posible
Salto de precisión (accuracy) Consiste en aterrizar en una marca o sitio predeterminado. Es importante la exactitud y estabilidad durante varios saltos consecutivos.

Estilo libre (free style)
Se trata de realizar, con el paracaidas cerrado, una serie de figuras, algunas obligatorias, pero donde la coreografia es producto de la cratividad de los paracaidistas. La filmación, realizada por un cámara, es decisiva para la calificación final.
Surf Aéreo (sky surf)
Se salta con una tabla de diseño especial a través de la cual el participante se desliza en vuelo libre. Al igual que en una competición de estilo libre, se considera el control en los movimientos y calidad de las imágenes del cámara.