Un rostro en el elenco musical parece dar siempre buenos frutos. Aunque hay ciertos recelos. Al margen de grandes obras como "My fair lady" o "El hombre de la Mancha", con Paloma San Basilio y José Sacristán, o la arriesgada propuesta de Peter Pan con varios concursantes de Operación Triunfo, ni productores ni actores quieren adquirir esa responsabilidad. Los primeros buscan un artista completo, que actúe, cante y baile, y los artistas huyen del exceso de trabajo y de repartos tan corales en los que no hay un lucimiento personal. Sin embargo, Natalia Millán (Adela, en Un paso adelante), la principal estrella de Cabaret, no ha podido resistirse. Los responsables del casting de este musical, que ya fue estrenado en el mítico estudio 52 de Broadway en 1998, insisten en decir que fue seleccionada porque era "la aspirante más completa". Y es que la reconocida actriz (también intervino en El Súper y Policías) es también una consumada bailarina. Y no será la única que quiera dar este paso.