CAPITULO 3.- SUSURROS
-Muy bien, estamos en otra dimensión, se puede aceptar
eso ¿Les decimos quienes somos de verdad? o sea que somos magos, tal vez puedan
ayudarnos- susurró un poco mas bajo Harry
-¿Bromeas verdad? ¿Que no pones atención en historia? Los magos y brujas nunca
han sido bien recibidos, aun entre elfos no creo que el decir: Hola soy Harry
Potter un mago de otra dimensión, resulte muy buena idea-
-¿Tu crees? A mi me parecen buenas personas- Harry les echó una ojeada por
encima del hombro a los elfos que al parecer ya se habían decidido y caminaban
hacia ellos. -Claro, siempre hay tres posibilidades: nos queman, nos corren,
o nos aceptan, desgraciadamente las dos primeras son mas probables-
-Eres un sádico-
-Soy un Malfoy-
-Entonces ¿No decimos nada?-
-Exacto, nos dimos un golpe en la cabeza y no recordamos mas que nuestros
nombres, no será difícil engañarlos, con el aspecto que traemos- Todo esto
lo dijeron en susurros veloces.
- Muy bien.. err... niños...si son tan amables de contestar unas cuantas preguntas-
uno de los elfos se paró frente a los jóvenes que se callaron de inmediato,
no los habían escuchado venir.
-Claro- contestó Harry animado por que dieran el primer paso.
-No no no, tu cállate Potter, ¿Por que habríamos de responder cualquier cosa?
primero díganos quienes son ustedes y ya veremos- hablo el Slytherin mirando
al elfo a los ojos de manera desafiante, Harry se puso ligeramente nervioso,
los elfos ya no les apuntaban con los arcos considerando que un par de niños
humanos no se les iban a escapar pero siempre era preocupante ser el posible
blanco de esas armas.
-¿Donde están sus padres?- siguió el elfo sin hacerle caso al rubio. -¿Nuestros
padres?-pregunto el Gryffindor desconcertado. -Claro, no esperaran que les
creamos que andaban solos por el valle ¿Que edad tienen? ¿13 años?- -Quince-
contesto muy malhumorado Draco, una de las cosas que mas le molestaban era
que lo evaluaran por su estatura, dado que él y Harry eran mas chicos que
el resto de quinto se veían de menor edad.
-¿Quince? aun así son muy jóvenes para andar solos por ahí, así que no traten
de engañarnos- añadió el elfo con una mirada calculadora- En todo caso, mi
nombre es Elladan, y el es mi hermano Elhorin- señaló al elfo a su lado y
estrecho la mano de Harry y luego la de Draco efusivamente.
-Draco Malfoy y Harry Potter, Un placer- contestó el Slytherin amablemente(para
consternación y confusión del oji-verde) -¿Y de donde son? traen ropas muy
extrañas-
-Errr- Harry y Draco se miraron uno al otro sin decir palabra.
-Miren- Dijo finalmente Draco tomando la palabra- a decir verdad estamos completamente
perdidos ya que no somos de aquí, somos, de fuera-
-¿Se puede saber de que "fuera" exactamente?-preguntó Elhroir de manera inquisitiva,
los chiquillos comenzaban a darle mala espina.
-Inglaterra- dijo Harry finalmente, el darle rodeos al asunto no ayudaría
en nada al final de cuentas.
-¿Ingla.. que?- preguntó Elladan-¿Donde queda eso?-
-¿Ven? les dije que andábamos perdidos-Draco confirmo que su teoría era cierta,
se encontraban en otra dimensión, una donde jamás habían oído hablar de Inglaterra.
-El problema es que no podemos dejarlos vagar por el valle- dijo Elladan para
terminar de una vez con eso, ya se les había hecho tarde y debían llegar a
su destino antes del anochecer, al ver el rostro confundido de los chicos
agregó- es peligroso, y esta prohibido- "con tanto orco y lobo suelto por
ahí un par de niños desarmados prácticamente son un festín para las fieras",
Elladan se estremeció internamente al pensar en el futuro que hubieran tenido
de no haber pasado ellos por ahí, los elfos son seres altamente empaticos
y sensibles a otros seres vivos, y la verdad es que un par de niños desprotegidos
le causaba ternura y ansias de protección.
-Así que vendrán con nosotros-apuntó Elhroir- íbamos a la casa de nuestro
padre, no creo que le incomode que le llevemos unos huéspedes- dijo divertido.
-Mmm.. el problema es que no traen caballos hermano-
-¿Caballos?-
-Claro!! ¿es que creían que venimos caminando?, bueno, hay uno disponible
pero es un poco brusco y no permitirá que lo monten los dos- agregó Elladan.
-Yo voy en él- dijo rápidamente Draco aprovechando la vacilación del moreno.
-Hey, no es justo-
-Vamos Potter, estoy seguro que no has montado en tu vida, así que, que mejor
que dejárselo a alguien experimentado- dijo haciendo alardes de grandeza.
-En todo caso él montará conmigo- dijo sonriendo Elhroir dirigiéndose a Harry
que solo asintió con la cabeza, momentos después una comitiva de elfos se
encaminaba hacía la casa de Lord Elrond(NA: ¿A alguien le quedaba duda?)
-Son muy jóvenes para andar solos ¿Que motivos los traen por estas tierras?-
susurró el elfo en el oído de Harry haciendo estremecerlo, si hay algo que
son los elfos eso es: curiosos, son sumamente curiosos se fijan en los detalles,
y este no se le paso desapercibido. "Lo pongo nervioso, que dulce" pensó el
elfo para si, observó con mayor detenimiento al joven que al parecer prefirió
ignorar su pregunta: cabellos negro, ligeramente alborotado que le daba un
aspecto adorablemente rebelde, piel suave, tersa, un poco dorada por el sol,
rasgos delicados, pero lo que mas llamaban la atención eran sus ojos, el elfo
había visto pasar frente a sus ojos varias generaciones de mortales y elfos
pero nunca se había encontrado con unos ojos como esos, verdes, extremadamente
verdes, las esmeraldas palidecerían a su lado, miró de reojo al otro joven,
ese parecía mas agresivo pensó recordando la manera en que los había enfrentado,
sus ojos conectaron por un momento antes del que el rubio apartara la mirada
con el ceño fruncido, plateados, por los Valar, sus ojos parecían mercurio
fundido, había visto muchos tonos de grises, los suyos y los de su hermano
eran de un gris tormenta, pero ¿Plateados? ¿De donde venían estos niños? cabello
platinado cayendo suavemente sobre la piel pálida(NA: recordemos que se estrellaron
contra el suelo, ni la gomina de Draco resiste eso) rasgos aristocráticos,
verdaderamente será interesante descubrir el origen de esos dos, demasiado
evasivos, y ligeramente recelosos. También había notado que tenían ligeras
magulladuras y golpes ¿Como se los habían hecho? lo ignoraba.
-¿No contestaras mi pregunta?- le dijo nuevamente al oído, tal vez si presionaba
un poco; vio los ojos verdes brillar con algo de temor antes de que el joven
se decidiera a decir algo.
-No vinimos aquí por voluntad propia- susurro quedamente, pero para el elfo
fue completamente audible.
-Si pudieras explicármelo- volvió a susurrar al oído del niño.
-Yo...- no pudo terminar la frase ya que se quedó sin palabras ante la vista
que se desplegó ante él.
-Bienvenidos a la Ultima morada- dijo uno de los elfos que se encontraban
al lado del camino.
No había manera de describir la ultima casa al este del mar, era simplemente
magnífica.
CONTINUARÁ